Norteamérica expresa su descontento con la situación que se vive en Haití
Toronto, Agencias
Canadá, Estados Unidos y México expresaron hoy su descontento con la crisis que se vive en Haití tras las elecciones presidenciales del 28 de noviembre e insinuaron que su paciencia se está agotando, después de una reunión de los ministros de Asuntos Exteriores de los tres países.
El encuentro, que se celebró en la localidad de Wakefield a unos 35 kilómetros al norte de Ottawa, trató numerosos temas trilaterales tanto en el terreno político como económico pero la crisis haitiana y la creciente violencia y amenaza que supone el narcotráfico en la región dominaron las discusiones.
A la cita acudieron el ministro de Asuntos Exteriores de Canadá, Lawrence Cannon, y sus colegas Hillary Clinton, por parte de Estados Unidos, y Patricia Espinosa, de México.
En la declaración final emitida por el presidente de la reunión, el canadiense Cannon, los tres países afirmaron que Haití "sigue siendo una prioridad mutua y el sujeto de una vigilancia continua, incluida la transición política y el proceso democrático relacionado".
La declaración solicita que continúen "los exhaustivos esfuerzos para encontrar una solución de cara a la segunda ronda de las elecciones" que se producirán en enero y en la que en principio deberían participar los dos candidatos más votados, Mirlande Manigat y el candidato oficialista Jude Celestin.
Pero durante la rueda de prensa final, Clinton dijo que las duras declaraciones realizadas durante el fin de semana por el senador demócrata estadounidense Patrick Leahy, que solicitó la retirada de fondos al Gobierno haitiano, son una "señal" de la frustración de Washington.
"El senador Leahy está expresando la creciente frustración no sólo del Congreso sino del Gobierno y del pueblo estadounidense que a medida que nos acercamos al aniversario del terremoto de Haití no ha habido la respuesta coordinada y coherente del Gobierno haitiano que es necesaria", afirmó Clinton.
La secretaria de Estado recordó que Leahy es el presidente del subcomité que determina el destino de la ayuda exterior estadounidense y recomendó a los líderes haitianos que "presten atención" a sus palabras.
"Esta es una señal muy fuerte de que esperamos más" de las autoridades haitianas, terminó señalando Clinton.
Por su parte, Cannon afirmó que "es esencial que los actores políticos de Haití cumplan sus responsabilidades y demuestren un firme compromiso a los principios democráticos incluido el respeto por la integridad del proceso electoral".
Cannon también solicitó el recuento "transparente" de los resultados de la elección del 28 de noviembre y "que la calma vuelva a las calles".
Otro tema que también destacó en las conversaciones de hoy fue la creciente problemática que el narcotráfico supone para los tres países norteamericanos pero también para las naciones centroamericanas y caribeñas.
La secretaria Espinosa afirmó que los tres socios norteamericanos necesitan "aumentar la cooperación desde una perspectiva trilateral para asegurar competitividad y seguridad en nuestra región".
"La naturaleza trasnacional del crimen organizado también hace necesario que cooperemos basados en los principios de responsabilidad conjunta", añadió Espinosa.
En ese sentido, la declaración final dejó clara la creciente preocupación de los tres países por la seguridad en Centroamérica y el Caribe.
"Los socios norteamericanos están cada vez más preocupados por la situación de seguridad en Centroamérica y el Caribe. Los ministros renovaron su compromiso para combatir las organizaciones criminales trasnacionales", afirmó la declaración.
Los ministros acordaron trabajar para identificar "áreas específicas de cooperación trilateral en Centroamérica" y el establecimiento de un diálogo entre Norteamérica y la región "para fortalecer la cooperación regional y esfuerzos contra las organizaciones criminales trasnacionales".
Cannon dijo que "reafirmamos los compromisos de nuestros gobiernos a la cooperación trilateral y coordinación en esta área, como nuestro compromiso al combate de las organizaciones criminales trasnacionales".
Canadá, Estados Unidos y México expresaron hoy su descontento con la crisis que se vive en Haití tras las elecciones presidenciales del 28 de noviembre e insinuaron que su paciencia se está agotando, después de una reunión de los ministros de Asuntos Exteriores de los tres países.
El encuentro, que se celebró en la localidad de Wakefield a unos 35 kilómetros al norte de Ottawa, trató numerosos temas trilaterales tanto en el terreno político como económico pero la crisis haitiana y la creciente violencia y amenaza que supone el narcotráfico en la región dominaron las discusiones.
A la cita acudieron el ministro de Asuntos Exteriores de Canadá, Lawrence Cannon, y sus colegas Hillary Clinton, por parte de Estados Unidos, y Patricia Espinosa, de México.
En la declaración final emitida por el presidente de la reunión, el canadiense Cannon, los tres países afirmaron que Haití "sigue siendo una prioridad mutua y el sujeto de una vigilancia continua, incluida la transición política y el proceso democrático relacionado".
La declaración solicita que continúen "los exhaustivos esfuerzos para encontrar una solución de cara a la segunda ronda de las elecciones" que se producirán en enero y en la que en principio deberían participar los dos candidatos más votados, Mirlande Manigat y el candidato oficialista Jude Celestin.
Pero durante la rueda de prensa final, Clinton dijo que las duras declaraciones realizadas durante el fin de semana por el senador demócrata estadounidense Patrick Leahy, que solicitó la retirada de fondos al Gobierno haitiano, son una "señal" de la frustración de Washington.
"El senador Leahy está expresando la creciente frustración no sólo del Congreso sino del Gobierno y del pueblo estadounidense que a medida que nos acercamos al aniversario del terremoto de Haití no ha habido la respuesta coordinada y coherente del Gobierno haitiano que es necesaria", afirmó Clinton.
La secretaria de Estado recordó que Leahy es el presidente del subcomité que determina el destino de la ayuda exterior estadounidense y recomendó a los líderes haitianos que "presten atención" a sus palabras.
"Esta es una señal muy fuerte de que esperamos más" de las autoridades haitianas, terminó señalando Clinton.
Por su parte, Cannon afirmó que "es esencial que los actores políticos de Haití cumplan sus responsabilidades y demuestren un firme compromiso a los principios democráticos incluido el respeto por la integridad del proceso electoral".
Cannon también solicitó el recuento "transparente" de los resultados de la elección del 28 de noviembre y "que la calma vuelva a las calles".
Otro tema que también destacó en las conversaciones de hoy fue la creciente problemática que el narcotráfico supone para los tres países norteamericanos pero también para las naciones centroamericanas y caribeñas.
La secretaria Espinosa afirmó que los tres socios norteamericanos necesitan "aumentar la cooperación desde una perspectiva trilateral para asegurar competitividad y seguridad en nuestra región".
"La naturaleza trasnacional del crimen organizado también hace necesario que cooperemos basados en los principios de responsabilidad conjunta", añadió Espinosa.
En ese sentido, la declaración final dejó clara la creciente preocupación de los tres países por la seguridad en Centroamérica y el Caribe.
"Los socios norteamericanos están cada vez más preocupados por la situación de seguridad en Centroamérica y el Caribe. Los ministros renovaron su compromiso para combatir las organizaciones criminales trasnacionales", afirmó la declaración.
Los ministros acordaron trabajar para identificar "áreas específicas de cooperación trilateral en Centroamérica" y el establecimiento de un diálogo entre Norteamérica y la región "para fortalecer la cooperación regional y esfuerzos contra las organizaciones criminales trasnacionales".
Cannon dijo que "reafirmamos los compromisos de nuestros gobiernos a la cooperación trilateral y coordinación en esta área, como nuestro compromiso al combate de las organizaciones criminales trasnacionales".