El Fiscal General protesta por los límites a la autoridad para enjuiciar a terroristas
Washington, Agencias
El fiscal general de EE.UU., Eric Holder, envío hoy una carta de protesta al Senado por una medida que prohíbe el traslado de detenidos de Guantánamo para ser juzgados en tribunales en este país, por considerar que socava la lucha antiterrorista.
Holder envió una carta al líder de la mayoría demócrata en el Senado, Harry Reid, después de que la Cámara de Representantes aprobase anoche una medida que prohíbe el uso de fondos federales para el traslado a EE.UU. de prisioneros en la base naval estadounidense en Guantánamo (Cuba).
La Cámara de Representantes aprobó la medida anoche con 212 votos a favor y 206 en contra, y los fondos autorizados cubren el resto del año fiscal 2011, que concluirá el 30 de septiembre.
El Senado aún no ha sometido a voto el proyecto de ley, que además incluye la aprobación de fondos para las agencias federales y para las guerras en Irak y Afganistán para el año fiscal 2011 en curso.
Para efectos prácticos, la medida evita que terroristas como Khalid Sheikh Mohammed, presunto "cerebro" de los atentados de 2001, y otros detenidos, puedan ser transferidos a EE.UU. para someterse a juicios en tribunales federales.
También dificultaría aún más los esfuerzos del Gobierno estadounidense de cerrar el centro de detenciones en Guantánamo, que fue una promesa electoral del presidente Barack Obama en 2008.
En la misiva a Reid, Holder dijo que la cláusula 1116 sobre el traslado de los detenidos es contraproducente porque "restringe la capacidad del Ejecutivo de enjuiciar a presuntos terroristas en tribunales federales o militares en EE.UU., así como su capacidad de encarcelar a quienes sean condenados en esos tribunales".
La medida, además, interfiere de forma arriesgada en la autoridad del Ejecutivo para "determinar cuándo y dónde se enjuicia a presuntos terroristas" dependiendo de las circunstancias de cada caso, se quejó Holder.
Al debilitar los poderes del Departamento de Justicia para enjuiciar a terroristas, "también se elimina una de nuestras armas más potentes en la lucha contra el terrorismo", argumentó el funcionario.
"Sería un error atar ahora las manos del presidente y de sus asesores de seguridad nacional. Por estas razones, les insto a que eliminen (la cláusula 1116) del proyecto de ley o de cualquier otros proyecto de ley de gastos que el Senado pueda debatir", puntualizó Holder en la carta.
El voto en el Congreso se produce en unos momentos de gran tensión política en torno al futuro de los detenidos en Guantánamo, y de gran oposición a que estos sean enjuiciados en tribunales civiles en suelo estadounidense.
Estados Unidos aún mantiene en Guantánamo a 174 detenidos, de los cuales una treintena afrontaría juicios en tribunales criminales o militares.
Los republicanos quieren que los detenidos sean juzgados en tribunales militares en Guantánamo.
El año pasado, uno de los detenidos en Guantánamo, Ahmed Khalfan Ghailani, fue trasladado a EE.UU. y enjuiciado en un tribunal federal en Nueva York.
Al final, las autoridades judiciales lo declararon culpable de sólo uno de los 285 cargos en su contra por los atentados contra embajadas estadounidenses en África en 1998.
La Administración Obama se opone a la cláusula sobre Guantánamo, aunque la medida autoriza también fondos para la eventual aplicación del nuevo tratado de no proliferación nuclear con Rusia y fondos para la reforma educativa, entre otras prioridades de la Casa Blanca.
El fiscal general de EE.UU., Eric Holder, envío hoy una carta de protesta al Senado por una medida que prohíbe el traslado de detenidos de Guantánamo para ser juzgados en tribunales en este país, por considerar que socava la lucha antiterrorista.
Holder envió una carta al líder de la mayoría demócrata en el Senado, Harry Reid, después de que la Cámara de Representantes aprobase anoche una medida que prohíbe el uso de fondos federales para el traslado a EE.UU. de prisioneros en la base naval estadounidense en Guantánamo (Cuba).
La Cámara de Representantes aprobó la medida anoche con 212 votos a favor y 206 en contra, y los fondos autorizados cubren el resto del año fiscal 2011, que concluirá el 30 de septiembre.
El Senado aún no ha sometido a voto el proyecto de ley, que además incluye la aprobación de fondos para las agencias federales y para las guerras en Irak y Afganistán para el año fiscal 2011 en curso.
Para efectos prácticos, la medida evita que terroristas como Khalid Sheikh Mohammed, presunto "cerebro" de los atentados de 2001, y otros detenidos, puedan ser transferidos a EE.UU. para someterse a juicios en tribunales federales.
También dificultaría aún más los esfuerzos del Gobierno estadounidense de cerrar el centro de detenciones en Guantánamo, que fue una promesa electoral del presidente Barack Obama en 2008.
En la misiva a Reid, Holder dijo que la cláusula 1116 sobre el traslado de los detenidos es contraproducente porque "restringe la capacidad del Ejecutivo de enjuiciar a presuntos terroristas en tribunales federales o militares en EE.UU., así como su capacidad de encarcelar a quienes sean condenados en esos tribunales".
La medida, además, interfiere de forma arriesgada en la autoridad del Ejecutivo para "determinar cuándo y dónde se enjuicia a presuntos terroristas" dependiendo de las circunstancias de cada caso, se quejó Holder.
Al debilitar los poderes del Departamento de Justicia para enjuiciar a terroristas, "también se elimina una de nuestras armas más potentes en la lucha contra el terrorismo", argumentó el funcionario.
"Sería un error atar ahora las manos del presidente y de sus asesores de seguridad nacional. Por estas razones, les insto a que eliminen (la cláusula 1116) del proyecto de ley o de cualquier otros proyecto de ley de gastos que el Senado pueda debatir", puntualizó Holder en la carta.
El voto en el Congreso se produce en unos momentos de gran tensión política en torno al futuro de los detenidos en Guantánamo, y de gran oposición a que estos sean enjuiciados en tribunales civiles en suelo estadounidense.
Estados Unidos aún mantiene en Guantánamo a 174 detenidos, de los cuales una treintena afrontaría juicios en tribunales criminales o militares.
Los republicanos quieren que los detenidos sean juzgados en tribunales militares en Guantánamo.
El año pasado, uno de los detenidos en Guantánamo, Ahmed Khalfan Ghailani, fue trasladado a EE.UU. y enjuiciado en un tribunal federal en Nueva York.
Al final, las autoridades judiciales lo declararon culpable de sólo uno de los 285 cargos en su contra por los atentados contra embajadas estadounidenses en África en 1998.
La Administración Obama se opone a la cláusula sobre Guantánamo, aunque la medida autoriza también fondos para la eventual aplicación del nuevo tratado de no proliferación nuclear con Rusia y fondos para la reforma educativa, entre otras prioridades de la Casa Blanca.