Pillay aboga por un debido proceso y la independencia de poderes
La Paz, Abi
La Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Navanethem Pillay, abogó el martes por un debido proceso contra algunos opositores que enfrentan demandas judiciales acusados de corrupción pública, y una independencia de poderes, principalmente del Judicial.
"Las acciones tomadas en contra de los miembros de la oposición son sujeto de preocupación y por ello insisto en un debido proceso para que los individuos contra los que se sospecha no sean suspendidos, si no que tengan un debido proceso", argumentó en conferencia de prensa.
Aseguró que uno de los pilares de una sociedad democrática debe ser el Poder Judicial "independiente", además del respeto por el estado de derecho y un juicio justo.
A su juicio, los problemas en la administración de la justicia en Bolivia "no son nuevos" y reconoció que el Gobierno del presidente Evo Morales, "ha tomado algunas medidas para asegurar un mínimo funcionamiento del sistema".
Sin embargo, expresó su preocupación por la falta de acceso a la justicia, principalmente en las comunidades rurales y "la amplia" impunidad que existe en casos de violaciones de los derechos humanos.
Recomendó superar ese problema con la selección de candidatos para los tribunales superiores de forma "urgente", para garantizar la independencia del Poder Judicial.
La Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Navanethem Pillay, abogó el martes por un debido proceso contra algunos opositores que enfrentan demandas judiciales acusados de corrupción pública, y una independencia de poderes, principalmente del Judicial.
"Las acciones tomadas en contra de los miembros de la oposición son sujeto de preocupación y por ello insisto en un debido proceso para que los individuos contra los que se sospecha no sean suspendidos, si no que tengan un debido proceso", argumentó en conferencia de prensa.
Aseguró que uno de los pilares de una sociedad democrática debe ser el Poder Judicial "independiente", además del respeto por el estado de derecho y un juicio justo.
A su juicio, los problemas en la administración de la justicia en Bolivia "no son nuevos" y reconoció que el Gobierno del presidente Evo Morales, "ha tomado algunas medidas para asegurar un mínimo funcionamiento del sistema".
Sin embargo, expresó su preocupación por la falta de acceso a la justicia, principalmente en las comunidades rurales y "la amplia" impunidad que existe en casos de violaciones de los derechos humanos.
Recomendó superar ese problema con la selección de candidatos para los tribunales superiores de forma "urgente", para garantizar la independencia del Poder Judicial.