Los veteranos del Partido Comunista de China piden una reforma política tras conocer el Nobel
Pekín, Agencias
Una veintena de veteranos del Partido Comunista de China (PCCh, en el poder desde 1949), entre ellos el antiguo secretario de Mao Zedong, pidieron al gobierno una reforma política aprovechando la concesión del Nobel de la Paz al disidente Liu Xiaobo, que cumple condena por pedir esta reforma.
Una carta abierta, publicada primero por la prensa de Hong Kong (la ex colonia británica que todavía conserva cierta libertad de prensa), circula hoy por blogs de la China continental y el servicio de "microblogging" de Twitter, en la que cientos de activistas la están reenviando a medida que la censura china la elimina de la red.
Aunque los primeros firmantes fueron 23, la misiva ha reunido hasta hoy más de 500 rúbricas de ciudadanos con edades comprendidas entre los 20 y los 70 años.
Los 23 veteranos piden reformas como la abolición del aparato censor del gobierno para permitir la libertad de prensa, la libertad de publicación para las editoriales o garantizar el derecho de los periodistas chinos a trabajar en libertad y sin interferencias.
Entre los firmantes está Li Rui, antiguo secretario del fallecido presidente Mao, o el ex editor jefe del "Diario del Pueblo", que actúa casi como el portavoz del Partido, Hu Jiwei.
La carta abierta, publicada primero en Internet, pide también que los diarios y libros que se publican en Hong Kong y Macao puedan llegar sin restricciones hasta las librerías chinas.
Los firmantes recuerdan que la falta de libertad de expresión, que está incluida en la Constitución china desde 1982, "es un escándalo en la historia del mundo y de la democracia" y condena al departamento de Propaganda, el brazo censor, como la "mano negra" que incluso tiene poder para ocultar las peticiones de reforma política del primer ministro, Wen Jiabao.
El "premier" chino pronunció varios discursos en agosto y en septiembre, uno de ellos ante las Naciones Unidas, en los que pidió avanzar en el proceso de democratización que fue totalmente censurado por la prensa oficial, que depende de la agencia de noticias Xinhua.
La difusión de la carta coincide con el anuncio, el viernes, del nuevo premio Nobel de la Paz, concedido a un veterano disidente político e intelectual que inició su activismo antes de las manifestaciones pro democráticas pacifistas de 1989 en la plaza pequinesa de Tiananmen, que fue atajada por el Ejército en una masacre en la que murieron cientos o miles de civiles.
Liu cumple sentencia de once años de cárcel desde 2009 después de que el año anterior colaborara en la redacción del manifiesto político "Carta 08", en la que él y otros trescientos intelectuales pedían reformas democráticas y la aplicación de derechos constitucionales como la libertad de prensa o el pluripartidismo.
Sin embargo, los redactores de la carta han señalado que ésta fue redactada antes de que se conociera el Nobel, como reacción a la detención de Xie Chaoping, un periodista de investigación detenido en agosto por publicar un libro sobre el caso de la emigración forzada de unos campesinos para dejar paso a un proyecto hidráulico hace 30 años.
Además del secretario Li, entre los firmantes se encuentran otros nonagenarios como Zhong Peizhang, ex redactor jefe del departamento de Propaganda, Yu You, ex editor en jefe del diario "China Daily", y personalidades más jóvenes, como la activista ecologista Dai Qing, el ex presidente del Teatro Popular de Shanghái, Sha Yexin.
Incluso el ex vicepresidente de la agencia oficial de noticias Xinhua, Li Pu, ha apoyado la carta.
La censura en la prensa en chino silencia desde el viernes la concesión del premio Nobel a Liu, una información que ha quedado relegada a las columnas de opinión de los diarios en inglés "China Daily" o del "Global Times", que califican el premio a un "delincuente" chino como un ataque contra la emergencia de la segunda potencia económica.
Una veintena de veteranos del Partido Comunista de China (PCCh, en el poder desde 1949), entre ellos el antiguo secretario de Mao Zedong, pidieron al gobierno una reforma política aprovechando la concesión del Nobel de la Paz al disidente Liu Xiaobo, que cumple condena por pedir esta reforma.
Una carta abierta, publicada primero por la prensa de Hong Kong (la ex colonia británica que todavía conserva cierta libertad de prensa), circula hoy por blogs de la China continental y el servicio de "microblogging" de Twitter, en la que cientos de activistas la están reenviando a medida que la censura china la elimina de la red.
Aunque los primeros firmantes fueron 23, la misiva ha reunido hasta hoy más de 500 rúbricas de ciudadanos con edades comprendidas entre los 20 y los 70 años.
Los 23 veteranos piden reformas como la abolición del aparato censor del gobierno para permitir la libertad de prensa, la libertad de publicación para las editoriales o garantizar el derecho de los periodistas chinos a trabajar en libertad y sin interferencias.
Entre los firmantes está Li Rui, antiguo secretario del fallecido presidente Mao, o el ex editor jefe del "Diario del Pueblo", que actúa casi como el portavoz del Partido, Hu Jiwei.
La carta abierta, publicada primero en Internet, pide también que los diarios y libros que se publican en Hong Kong y Macao puedan llegar sin restricciones hasta las librerías chinas.
Los firmantes recuerdan que la falta de libertad de expresión, que está incluida en la Constitución china desde 1982, "es un escándalo en la historia del mundo y de la democracia" y condena al departamento de Propaganda, el brazo censor, como la "mano negra" que incluso tiene poder para ocultar las peticiones de reforma política del primer ministro, Wen Jiabao.
El "premier" chino pronunció varios discursos en agosto y en septiembre, uno de ellos ante las Naciones Unidas, en los que pidió avanzar en el proceso de democratización que fue totalmente censurado por la prensa oficial, que depende de la agencia de noticias Xinhua.
La difusión de la carta coincide con el anuncio, el viernes, del nuevo premio Nobel de la Paz, concedido a un veterano disidente político e intelectual que inició su activismo antes de las manifestaciones pro democráticas pacifistas de 1989 en la plaza pequinesa de Tiananmen, que fue atajada por el Ejército en una masacre en la que murieron cientos o miles de civiles.
Liu cumple sentencia de once años de cárcel desde 2009 después de que el año anterior colaborara en la redacción del manifiesto político "Carta 08", en la que él y otros trescientos intelectuales pedían reformas democráticas y la aplicación de derechos constitucionales como la libertad de prensa o el pluripartidismo.
Sin embargo, los redactores de la carta han señalado que ésta fue redactada antes de que se conociera el Nobel, como reacción a la detención de Xie Chaoping, un periodista de investigación detenido en agosto por publicar un libro sobre el caso de la emigración forzada de unos campesinos para dejar paso a un proyecto hidráulico hace 30 años.
Además del secretario Li, entre los firmantes se encuentran otros nonagenarios como Zhong Peizhang, ex redactor jefe del departamento de Propaganda, Yu You, ex editor en jefe del diario "China Daily", y personalidades más jóvenes, como la activista ecologista Dai Qing, el ex presidente del Teatro Popular de Shanghái, Sha Yexin.
Incluso el ex vicepresidente de la agencia oficial de noticias Xinhua, Li Pu, ha apoyado la carta.
La censura en la prensa en chino silencia desde el viernes la concesión del premio Nobel a Liu, una información que ha quedado relegada a las columnas de opinión de los diarios en inglés "China Daily" o del "Global Times", que califican el premio a un "delincuente" chino como un ataque contra la emergencia de la segunda potencia económica.