EE.UU. afirma que Irán quiere abrir bancos en países musulmanes para evitar las sanciones
Washington, Agencias
El Gobierno de EE.UU. afirmó hoy que Irán quiere abrir bancos en naciones musulmanas y lo está haciendo para evitar las sanciones económicas impuestas a Teherán por su programa nuclear, una señal de que éstas están teniendo su efecto.
"Sabemos que lo están intentando hacer", dijo el portavoz adjunto del Departamento de Estado estadounidense, Mark Toner, en su rueda de prensa diaria.
"No es una sorpresa, francamente. Les hemos visto hacerlo antes. De hecho es algo que forma parte de las conversaciones que mantenemos con nuestros aliados en la región y en todo el mundo. Pero para nosotros es una señal de que las sanciones están teniendo su impacto", señaló.
El Washington Post indicó hoy que Irán está intentando en secreto abrir bancos en países musulmanes, incluido Irak y Malasia.
Para ello utiliza nombres falsos y estructuras de control opacas para tratar de circunvalar el estricto régimen de sanciones que afecta cada vez más a las actividades bancarias internacionales de la República Islámica, asegura el diario.
El Departamento del Tesoro de EE.UU. ya impuso sanciones a 16 bancos de Irán por apoyar presuntamente el programa nuclear iraní y actividades terroristas, mientras que otros países han seguido el ejemplo de EE.UU. y han aplicado medidas similares.
De acuerdo con el Post, EE.UU. cree que Irán no ha tenido mucho éxito a la hora de abrir filiales de sus bancos en el exterior.
No obstante,según un funcionario de ese país, Teherán ha conseguido abrir al menos dos bancos en Bagdad, incluida una entidad afiliada del Banco Melli, el banco comercial más grande de Irán y que está en las listas negras de EE.UU., de la ONU y de la Unión Europea (UE) por supuestamente estar vinculado al programa nuclear iraní.
También ha intentado abrir bancos en el norte de Irak, en la región del Kurdistán.
Azerbaiyán también cuenta en Baku con una filial de Banco Melli, y en 2008 el Tesoro afirmó que Futurebank en Bahrein está controlado por el Banco Melli.
Durante años, los Emiratos Árabes Unidos (UAE) han sido un importante canal para bienes y transacciones financieras iraníes.
Pero desde las últimas sanciones del Consejo de Seguridad de la ONU ha emprendido una política dura con Irán, en parte al reducir acuerdos financieros con bancos iraníes que figuran en la lista negra de Washington.
Por eso, Irán parece intentar utilizar a Malasia como su principal plaza financiera internacional, pero sin haber tenido éxito, según funcionarios estadounidenses.
Malasia ha sido un punto estratégico para transportar bienes sospechosos a Irán, con lo que sería un buen lugar para sus transacciones financieras.
Sin embargo, este año el Gobierno malasio anunció una ley de control de exportaciones para mejorar su capacidad de interceptar material destinado a desarrollar armas de destrucción masiva, según el Washington Post.
El Gobierno de EE.UU. afirmó hoy que Irán quiere abrir bancos en naciones musulmanas y lo está haciendo para evitar las sanciones económicas impuestas a Teherán por su programa nuclear, una señal de que éstas están teniendo su efecto.
"Sabemos que lo están intentando hacer", dijo el portavoz adjunto del Departamento de Estado estadounidense, Mark Toner, en su rueda de prensa diaria.
"No es una sorpresa, francamente. Les hemos visto hacerlo antes. De hecho es algo que forma parte de las conversaciones que mantenemos con nuestros aliados en la región y en todo el mundo. Pero para nosotros es una señal de que las sanciones están teniendo su impacto", señaló.
El Washington Post indicó hoy que Irán está intentando en secreto abrir bancos en países musulmanes, incluido Irak y Malasia.
Para ello utiliza nombres falsos y estructuras de control opacas para tratar de circunvalar el estricto régimen de sanciones que afecta cada vez más a las actividades bancarias internacionales de la República Islámica, asegura el diario.
El Departamento del Tesoro de EE.UU. ya impuso sanciones a 16 bancos de Irán por apoyar presuntamente el programa nuclear iraní y actividades terroristas, mientras que otros países han seguido el ejemplo de EE.UU. y han aplicado medidas similares.
De acuerdo con el Post, EE.UU. cree que Irán no ha tenido mucho éxito a la hora de abrir filiales de sus bancos en el exterior.
No obstante,según un funcionario de ese país, Teherán ha conseguido abrir al menos dos bancos en Bagdad, incluida una entidad afiliada del Banco Melli, el banco comercial más grande de Irán y que está en las listas negras de EE.UU., de la ONU y de la Unión Europea (UE) por supuestamente estar vinculado al programa nuclear iraní.
También ha intentado abrir bancos en el norte de Irak, en la región del Kurdistán.
Azerbaiyán también cuenta en Baku con una filial de Banco Melli, y en 2008 el Tesoro afirmó que Futurebank en Bahrein está controlado por el Banco Melli.
Durante años, los Emiratos Árabes Unidos (UAE) han sido un importante canal para bienes y transacciones financieras iraníes.
Pero desde las últimas sanciones del Consejo de Seguridad de la ONU ha emprendido una política dura con Irán, en parte al reducir acuerdos financieros con bancos iraníes que figuran en la lista negra de Washington.
Por eso, Irán parece intentar utilizar a Malasia como su principal plaza financiera internacional, pero sin haber tenido éxito, según funcionarios estadounidenses.
Malasia ha sido un punto estratégico para transportar bienes sospechosos a Irán, con lo que sería un buen lugar para sus transacciones financieras.
Sin embargo, este año el Gobierno malasio anunció una ley de control de exportaciones para mejorar su capacidad de interceptar material destinado a desarrollar armas de destrucción masiva, según el Washington Post.