Córdoba escribirá a las FARC y al Gobierno para lograr una salida política al conflicto

Buenos Aires, Agencias
La senadora colombiana Piedad Córdoba, sancionada por la Procuraduría de su país con 18 años de inhabilitación por su presunta colaboración con las FARC, anunció hoy que esta semana va a solicitar por carta al Gobierno y a la guerrilla colombiana que establezcan un diálogo político.

La congresista explicó durante una visita a Buenos Aires que como líder de la agrupación "Colombianos por la paz" va a remitir una misiva conjunta a las FARC y al Ejército de Liberación Nacional (ELN), con la que espera tener "una respuesta positiva en términos de lo que significa la humanización del conflicto y la posibilidad de un diálogo político para lograrlo".

Córdoba, quien ha ejercido de mediadora ante las FARC para la liberación de una docena de secuestrados, añadió que este martes va a escribir también al presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, quien -aseguró- ha aceptado reunirse con integrantes de la agrupación para dialogar sobre la salida política del conflicto armado que vive el país desde hace décadas.

En una rueda de prensa la senadora volvió a arremeter contra el procurador general de la nación, Alfredo Ordóñez, quien el pasado 27 de septiembre le inhabilitó para ocupar cargos públicos durante los próximos 18 años, porque bajo su punto de vista es parcial y no tiene la competencia para tomar esta decisión.

"El ordenamiento jurídico colombiano no contempla para el señor procurador ese tipo de atribuciones de las cuales se ha hecho cargo. Quiero dejar muy claro que el procurador no es competente, bajo ninguna circunstancia, y menos para trasladar de la Corte Suprema la investigación por delitos de lesa humanidad en mi contra", consideró.

La congresista del Partido Liberal explicó que el máximo tribunal de su país lleva adelante desde hace tres años una investigación por su presunta vinculación con el grupo armado, y recordó que el titular de la Corte aseguró hace unos meses que no podían vincularle ni procesarle "porque no había pruebas".

Córdoba denunció que es víctima de una persecución política en su contra por parte de "sectores de extrema derecha, retractarios, que tienen muchísimo interés en que un proceso de paz no avance".

La senadora aseguró que la próxima semana acudirá a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) "a hacer las sanciones pertinentes, que tienen que ver con el delito de expresión y de persecución", y adelantó que el Parlamento de su país "está pensando en trasladar esta decisión a la Corte Constitucional por incompetencia".

En su opinión, el conflicto armado que vive Colombia está siendo utilizado además "como un mecanismo de desestabilización en la región", como "una punta de lanza" para crear "estrategias de desprestigio".

"La guerra ahora no sólo se hace a punta de balas, sino de micrófonos", aseguró al referirse al "complot mediático" que a su juicio hay en América Latina dirigido a "satanizar" a personas que, como ella, juegan un papel importante para impulsar procesos de paz, "generando ante la población el imaginario" de que son "peligrosos" y "terroristas", lamentó.

"Colombia no se puede convertir en un vecino incómodo para la región. Lo que estamos buscando es que el mundo no nos deje solos", consideró durante su intervención en la sede de la Conferencia Permanente de Partidos Políticos de América Latina y el Caribe (COPPPAL), en la que ejerce como vicepresidenta, antes de reunirse con políticos y representantes de organismos humanitarios.

En este sentido, anunció que en diciembre habrá una reunión en Buenos Aires en la que participarán varios Premios Nobel de la Paz, entre ellos el argentino Adolfo Pérez Esquivel, para "buscar una salida a la guerra en Colombia".