El ex ministro boliviano Fortún fue detenido en Lima y entregado a un juzgado penal
Lima, Agncias
El ex ministro boliviano de Gobierno (Interior) Guillermo Fortún Suárez fue detenido esta madrugada en el aeropuerto internacional Jorge Chávez de Lima, a petición de la Justicia de su país, y entregado a un juzgado penal, confirmó hoy la Policía peruana.
Fortún, que estaba en Perú desde hace cinco meses, fue arrestado por efectivos de la oficina de Migraciones cuando pretendía abordar un vuelo hacia Argentina, a raíz de un pedido de detención por el delito de estafa cursado por la Interpol, señaló a Efe un portavoz policial.
El ex ministro boliviano pasó a la oficina de Requisitorias y a las 07.00 horas de hoy (12.00 GMT) fue puesto a disposición de la policía judicial de la provincia del Callao, la jurisdicción en la que se encuentra el aeropuerto.
Horas después, Fortún fue entregado por la Policía a un juzgado de turno y éste, a su vez, lo derivó al sexto juzgado penal del Callao, donde se encuentra actualmente.
El político, que fue candidato de Acción Democrática Nacionalista (ADN, derecha) a la alcaldía de La Paz en los comicios del 4 de abril pasado, es investigado por su supuesta responsabilidad en la malversación de 18 millones de bolivianos (unos 2,5 millones de dólares) cuando fue ministro del Interior durante la gestión presidencial de Hugo Bánzer (1997-2001).
Fortún había sido convocado por la Fiscalía de La Paz a presentarse a declarar el 6 de abril pasado, pero su familia informó que el político se "autoexilió" en Chile, en marzo pasado, por ser víctima de una presunta persecución del Gobierno de Evo Morales.
A fines de marzo, Fortún llegó a Lima con su esposa y una hija, según confirmaron entonces fuentes peruanas.
Desde 2006, según la prensa boliviana, un centenar de opositores que enfrentan diversos procesos judiciales, promovidos en su mayoría por el oficialismo, han abandonado el país con el argumento de que no tendrán un juicio justo en Bolivia.
Varios de esos opositores bolivianos han encontrado refugio y asilo político en Perú, lo cual generó el enojo de Morales e incrementó la tensión en las relaciones con el Gobierno del mandatario peruano, Alan García.
El ex ministro boliviano de Gobierno (Interior) Guillermo Fortún Suárez fue detenido esta madrugada en el aeropuerto internacional Jorge Chávez de Lima, a petición de la Justicia de su país, y entregado a un juzgado penal, confirmó hoy la Policía peruana.
Fortún, que estaba en Perú desde hace cinco meses, fue arrestado por efectivos de la oficina de Migraciones cuando pretendía abordar un vuelo hacia Argentina, a raíz de un pedido de detención por el delito de estafa cursado por la Interpol, señaló a Efe un portavoz policial.
El ex ministro boliviano pasó a la oficina de Requisitorias y a las 07.00 horas de hoy (12.00 GMT) fue puesto a disposición de la policía judicial de la provincia del Callao, la jurisdicción en la que se encuentra el aeropuerto.
Horas después, Fortún fue entregado por la Policía a un juzgado de turno y éste, a su vez, lo derivó al sexto juzgado penal del Callao, donde se encuentra actualmente.
El político, que fue candidato de Acción Democrática Nacionalista (ADN, derecha) a la alcaldía de La Paz en los comicios del 4 de abril pasado, es investigado por su supuesta responsabilidad en la malversación de 18 millones de bolivianos (unos 2,5 millones de dólares) cuando fue ministro del Interior durante la gestión presidencial de Hugo Bánzer (1997-2001).
Fortún había sido convocado por la Fiscalía de La Paz a presentarse a declarar el 6 de abril pasado, pero su familia informó que el político se "autoexilió" en Chile, en marzo pasado, por ser víctima de una presunta persecución del Gobierno de Evo Morales.
A fines de marzo, Fortún llegó a Lima con su esposa y una hija, según confirmaron entonces fuentes peruanas.
Desde 2006, según la prensa boliviana, un centenar de opositores que enfrentan diversos procesos judiciales, promovidos en su mayoría por el oficialismo, han abandonado el país con el argumento de que no tendrán un juicio justo en Bolivia.
Varios de esos opositores bolivianos han encontrado refugio y asilo político en Perú, lo cual generó el enojo de Morales e incrementó la tensión en las relaciones con el Gobierno del mandatario peruano, Alan García.