Ban Ki-moon recibe protestas de Burundi y Uganda acerca del informe sobre el Congo
Naciones Unidas, Agencias
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, ha recibido sendas cartas de los Gobiernos de Burundi y Uganda acerca de un polémico informe sobre la comisión de violaciones de derechos humanos en la vecina República Democrática del Congo (RDC), informó hoy el organismo internacional.
El portavoz de Naciones Unidas, Martin Nesirky, declinó precisar el contenido de las misivas, que expresan el disgusto de ambos países con el informe que la alta comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Navi Pillay, divulgará el viernes en Ginebra.
"No puedo decir qué explican las cartas, pero se espera que se difundan junto al informe", explicó en una conferencia de prensa Nesirky.
La ONU se vio obligada hace varias semanas a posponer hasta el 1 de octubre la divulgación del informe, después de que la filtración a la prensa de un borrador provocara fuertes propuestas entre los países africanos implicados.
En el documento se responsabiliza a tropas ruandesas, ugandesas y burundesas, que actuaron en el este de la RDC en varias ocasiones entre 1993 y 2003, de crímenes de guerra y contra la humanidad, y hasta de genocidio contra la etnia hutu.
Según informaron hoy fuentes diplomáticas a Efe en Kampala, el Gobierno ugandés ha amenazado a la ONU con retirarse de las misiones internacionales, en especial de Somalia, si se mantiene la acusación contenida en el informe.
En una carta enviada a distintos altos cargos del organismo por el ministro de Asuntos Exteriores ugandés, Sam Kutesa, se califica el documento de "compendio de rumores" y se señala que su metodología es "completamente errónea", según esas mismas fuentes.
Por su parte, el Gobierno burundés informó el miércoles en Bujumbura de que había enviado una nota de protesta a la ONU y que exigía que se retirara el nombre del país del informe, ya que sus distintos Gobiernos siempre han insistido en que nunca colaboraron con Ruanda y Uganda en las intervenciones militares en el Congo.
Por su parte, Ruanda también amenazó con retirarse de las misiones de paz de Naciones Unidas cuando se filtró el borrador del informe, pero una visita de Ban a Kigali consiguió calmar los ánimos del presidente ruandés, Paul Kagame.
El polémico borrador incluye numerosos datos sobre asesinatos, violaciones y otros crímenes cometidos durante una década en la convulsa región oriental de la RDC.
La mayoría de esas actuaciones se produjeron tras el genocidio ruandés de 1994, cuando miles de civiles hutus se trasladaron junto a milicias de esas misma etnia a territorio congoleño por temor a represalias por el asesinato de unos 800.000 tutsi y hutus políticamente moderados.
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, ha recibido sendas cartas de los Gobiernos de Burundi y Uganda acerca de un polémico informe sobre la comisión de violaciones de derechos humanos en la vecina República Democrática del Congo (RDC), informó hoy el organismo internacional.
El portavoz de Naciones Unidas, Martin Nesirky, declinó precisar el contenido de las misivas, que expresan el disgusto de ambos países con el informe que la alta comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Navi Pillay, divulgará el viernes en Ginebra.
"No puedo decir qué explican las cartas, pero se espera que se difundan junto al informe", explicó en una conferencia de prensa Nesirky.
La ONU se vio obligada hace varias semanas a posponer hasta el 1 de octubre la divulgación del informe, después de que la filtración a la prensa de un borrador provocara fuertes propuestas entre los países africanos implicados.
En el documento se responsabiliza a tropas ruandesas, ugandesas y burundesas, que actuaron en el este de la RDC en varias ocasiones entre 1993 y 2003, de crímenes de guerra y contra la humanidad, y hasta de genocidio contra la etnia hutu.
Según informaron hoy fuentes diplomáticas a Efe en Kampala, el Gobierno ugandés ha amenazado a la ONU con retirarse de las misiones internacionales, en especial de Somalia, si se mantiene la acusación contenida en el informe.
En una carta enviada a distintos altos cargos del organismo por el ministro de Asuntos Exteriores ugandés, Sam Kutesa, se califica el documento de "compendio de rumores" y se señala que su metodología es "completamente errónea", según esas mismas fuentes.
Por su parte, el Gobierno burundés informó el miércoles en Bujumbura de que había enviado una nota de protesta a la ONU y que exigía que se retirara el nombre del país del informe, ya que sus distintos Gobiernos siempre han insistido en que nunca colaboraron con Ruanda y Uganda en las intervenciones militares en el Congo.
Por su parte, Ruanda también amenazó con retirarse de las misiones de paz de Naciones Unidas cuando se filtró el borrador del informe, pero una visita de Ban a Kigali consiguió calmar los ánimos del presidente ruandés, Paul Kagame.
El polémico borrador incluye numerosos datos sobre asesinatos, violaciones y otros crímenes cometidos durante una década en la convulsa región oriental de la RDC.
La mayoría de esas actuaciones se produjeron tras el genocidio ruandés de 1994, cuando miles de civiles hutus se trasladaron junto a milicias de esas misma etnia a territorio congoleño por temor a represalias por el asesinato de unos 800.000 tutsi y hutus políticamente moderados.