Cinco enigmas de la economía mundial
Marcelo Justo
BBC Mundo
Esta semana el presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos, Ben Bernanke, advirtió que la recuperación económica está en peligro y el miércoles, en el Reino Unido, el titular del Banco Central, Mervyn King, disminuyó sus proyecciones de crecimiento.
Hoy por hoy la economía mundial es una mezcla de luces y sombras.
El optimismo que surge con las naciones emergentes se corta con interrogantes sobre la sostenibilidad de la expansión china, mientras que Alemania aumenta sus exportaciones pero la Unión Europea (UE) sigue empantanada.
Desde el estallido de la crisis en septiembre de 2008, los economistas especulan sobre qué tipo de recuperación definirá los próximos años con una clic ensalada de letras que incluye la V (caída en picada seguida por fuerte recuperación), W (doble recesión) y U (caída, meseta y lenta recuperación).
Los ocho meses próximos serán clave.
BBC Mundo investigó cinco enigmas sobre la economía mundial:
Ajuste fiscal y deuda soberana
La economía mundial evitó una depresión al estilo de los años 30 gracias a la intervención estatal que estabilizó el sistema financiero y estimuló la producción.
Este estímulo se está agotando y, con la excepción de Estados Unidos, nadie considera la posibilidad de renovarlo.
En la UE, Alemania, el Reino Unido, Francia, Italia, España, Portugal y Grecia anunciaron fuertes programas de ajuste para lidiar con su deuda, los cuales todavía no han impactado de lleno en la economía porque están en una fase inicial de aplicación.
Consumidores: ¿y si dejan de gastar?
Este giro de la política económica de los países desarrollados plantea varias preguntas.
En el caso de las naciones europeas no se sabe si el megaajuste solucionará o empeorará el problema de la deuda soberana y qué profundo será el impacto en la economía del continente y mundial.
En otras palabras, ¿pueden los países desarrollados evitar una segunda recesión sin el oxígeno fiscal?
O, lo que es lo mismo, ¿está la inversión privada en condiciones de sustituir a la pública como motor económico?
Lo que nos lleva al segundo enigma.
Confianza de consumidores e inversores
La confianza es uno de los factores más sutiles y elusivos de la economía.
Los datos de las encuestas de consumidores y empresas son fluctuantes y contradictorios.
"Nadie sabe lo que puede pasar con la confianza de consumidores o inversores. Pretender lo contrario es absurdo", le dijo recientemente al diario británico Financial Times Nicholas Stern, catedrático de la London School of Economics (LSE).
Una cosa queda clara: si los consumidores no consumen y las empresas no invierten, la economía caerá en una nueva recesión.
Economías emergentes
Mucho se ha hablado de la fortaleza de las economías emergentes y del impulso que le están dando a la economía mundial.
Mientras la eurozona crecerá un 0,7% este año, según el Banco Mundial, Asia superará el 8% y América Latina se situará en un 4,5%.
Shanghái: ¿seguirá creciendo China?
China es el motor de esta expansión de las economías emergentes, pero los últimos datos señalan que su demanda de materias primas (petróleo, cobre, aluminio, hierro) cayó en julio.
La demanda de materias primas ha sido fundamental en el crecimiento de América Latina y apunta a la desaceleración que está experimentando China que, por primera vez en meses, crecerá menos de un 10%.
Al mismo tiempo, hay que recordar que el mundo desarrollado conforma un 70% del producto bruto mundial: su gravitación global sigue siendo fundamental.
Si algo demostró la recesión es que los países emergentes no pueden escapar a un vendaval económico como el que azotó al primer mundo.
El riesgo de una crisis sistémica global sigue presente.
Contracción crediticia
La contracción crediticia de 2007 puso fin a la era del dinero fácil que había sostenido el crecimiento de muchos países desarrollados.
Desde entonces los bancos, rescatados por el fisco, han vuelto a mostrar unos balances espectaculares, pero los préstamos siguen sin fluir.
El anuncio de la Reserva Federal de Estados Unidos, el martes, de que lanzará una nueva flexibilización cuantitativa, es decir, inyectará dinero en el sistema financiero, es un reconocimiento de esta situación.
En el Reino Unido, a instancias del gobierno y del Banco Central, las seis principales entidades financieras formaron esta semana un grupo de trabajo para buscar estrategias que descongelen el crédito.
Si el crédito no vuelve a fluir, la economía no podrá sostener su recuperación.
Además, el sistema financiero internacional sigue teniendo sus propias interrogantes internas, como se puede ver en el quinto enigma.
El septiembre dramático de 2008 fue la explosión en cadena de una burbuja financiera que había crecido en las sombras y que pocos habían notado.
La crisis de deuda soberana en los países europeos que dominó la primera mitad de este año volvió a tomar a todos por sorpresa.
El vendaval amainó en las últimas semanas, pero muchos gigantes bancarios europeos tienen sus arcas llenas de bonos del Estado que, en caso de cesación de pagos, podrían provocar estragos en sus balances.
En la reciente prueba de resistencia de los bancos europeos sólo siete de las 91 entidades examinadas no pudieron resistir una hipotética recesión económica, pero el ensayo no contempló la posibilidad de una cesación de pagos soberana.
Por el momento, parecería que los llamados activos tóxicos -deuda difícilmente cobrable- ligados a las hipotecas subprime están bajo control. Sin embargo, el Fondo Monetario Internacional (FMI) estima que el negocio de uno de los instrumentos financieros detrás de la crisis, los derivados, supera holgadamente el millón de millones de dólares.
Según el economista británico Will Hutton, entre el 40 y 60% de las ganancias de los grandes bancos británicos proviene de los derivados.
La posibilidad de nuevas sorpresas está a la vuelta de la esquina.
Algunas voces sobre la economía mundial
• Ben Bernanke: "Intervendremos si no vemos una mejora".
• Nigel Roubini, economista estadounidense: "Para algunos países será muy difícil evitar una segunda recesión"
• Mervyn King: "La recuperación será turbulenta".
• Nicholas Stern, LSE: "Nadie sabe lo que va a pasar con la confianza de los consumidores e inversores".
BBC Mundo
Esta semana el presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos, Ben Bernanke, advirtió que la recuperación económica está en peligro y el miércoles, en el Reino Unido, el titular del Banco Central, Mervyn King, disminuyó sus proyecciones de crecimiento.
Hoy por hoy la economía mundial es una mezcla de luces y sombras.
El optimismo que surge con las naciones emergentes se corta con interrogantes sobre la sostenibilidad de la expansión china, mientras que Alemania aumenta sus exportaciones pero la Unión Europea (UE) sigue empantanada.
Desde el estallido de la crisis en septiembre de 2008, los economistas especulan sobre qué tipo de recuperación definirá los próximos años con una clic ensalada de letras que incluye la V (caída en picada seguida por fuerte recuperación), W (doble recesión) y U (caída, meseta y lenta recuperación).
Los ocho meses próximos serán clave.
BBC Mundo investigó cinco enigmas sobre la economía mundial:
Ajuste fiscal y deuda soberana
La economía mundial evitó una depresión al estilo de los años 30 gracias a la intervención estatal que estabilizó el sistema financiero y estimuló la producción.
Este estímulo se está agotando y, con la excepción de Estados Unidos, nadie considera la posibilidad de renovarlo.
En la UE, Alemania, el Reino Unido, Francia, Italia, España, Portugal y Grecia anunciaron fuertes programas de ajuste para lidiar con su deuda, los cuales todavía no han impactado de lleno en la economía porque están en una fase inicial de aplicación.
Consumidores: ¿y si dejan de gastar?
Este giro de la política económica de los países desarrollados plantea varias preguntas.
En el caso de las naciones europeas no se sabe si el megaajuste solucionará o empeorará el problema de la deuda soberana y qué profundo será el impacto en la economía del continente y mundial.
En otras palabras, ¿pueden los países desarrollados evitar una segunda recesión sin el oxígeno fiscal?
O, lo que es lo mismo, ¿está la inversión privada en condiciones de sustituir a la pública como motor económico?
Lo que nos lleva al segundo enigma.
Confianza de consumidores e inversores
La confianza es uno de los factores más sutiles y elusivos de la economía.
Los datos de las encuestas de consumidores y empresas son fluctuantes y contradictorios.
"Nadie sabe lo que puede pasar con la confianza de consumidores o inversores. Pretender lo contrario es absurdo", le dijo recientemente al diario británico Financial Times Nicholas Stern, catedrático de la London School of Economics (LSE).
Una cosa queda clara: si los consumidores no consumen y las empresas no invierten, la economía caerá en una nueva recesión.
Economías emergentes
Mucho se ha hablado de la fortaleza de las economías emergentes y del impulso que le están dando a la economía mundial.
Mientras la eurozona crecerá un 0,7% este año, según el Banco Mundial, Asia superará el 8% y América Latina se situará en un 4,5%.
Shanghái: ¿seguirá creciendo China?
China es el motor de esta expansión de las economías emergentes, pero los últimos datos señalan que su demanda de materias primas (petróleo, cobre, aluminio, hierro) cayó en julio.
La demanda de materias primas ha sido fundamental en el crecimiento de América Latina y apunta a la desaceleración que está experimentando China que, por primera vez en meses, crecerá menos de un 10%.
Al mismo tiempo, hay que recordar que el mundo desarrollado conforma un 70% del producto bruto mundial: su gravitación global sigue siendo fundamental.
Si algo demostró la recesión es que los países emergentes no pueden escapar a un vendaval económico como el que azotó al primer mundo.
El riesgo de una crisis sistémica global sigue presente.
Contracción crediticia
La contracción crediticia de 2007 puso fin a la era del dinero fácil que había sostenido el crecimiento de muchos países desarrollados.
Desde entonces los bancos, rescatados por el fisco, han vuelto a mostrar unos balances espectaculares, pero los préstamos siguen sin fluir.
El anuncio de la Reserva Federal de Estados Unidos, el martes, de que lanzará una nueva flexibilización cuantitativa, es decir, inyectará dinero en el sistema financiero, es un reconocimiento de esta situación.
En el Reino Unido, a instancias del gobierno y del Banco Central, las seis principales entidades financieras formaron esta semana un grupo de trabajo para buscar estrategias que descongelen el crédito.
Si el crédito no vuelve a fluir, la economía no podrá sostener su recuperación.
Además, el sistema financiero internacional sigue teniendo sus propias interrogantes internas, como se puede ver en el quinto enigma.
El septiembre dramático de 2008 fue la explosión en cadena de una burbuja financiera que había crecido en las sombras y que pocos habían notado.
La crisis de deuda soberana en los países europeos que dominó la primera mitad de este año volvió a tomar a todos por sorpresa.
El vendaval amainó en las últimas semanas, pero muchos gigantes bancarios europeos tienen sus arcas llenas de bonos del Estado que, en caso de cesación de pagos, podrían provocar estragos en sus balances.
En la reciente prueba de resistencia de los bancos europeos sólo siete de las 91 entidades examinadas no pudieron resistir una hipotética recesión económica, pero el ensayo no contempló la posibilidad de una cesación de pagos soberana.
Por el momento, parecería que los llamados activos tóxicos -deuda difícilmente cobrable- ligados a las hipotecas subprime están bajo control. Sin embargo, el Fondo Monetario Internacional (FMI) estima que el negocio de uno de los instrumentos financieros detrás de la crisis, los derivados, supera holgadamente el millón de millones de dólares.
Según el economista británico Will Hutton, entre el 40 y 60% de las ganancias de los grandes bancos británicos proviene de los derivados.
La posibilidad de nuevas sorpresas está a la vuelta de la esquina.
Algunas voces sobre la economía mundial
• Ben Bernanke: "Intervendremos si no vemos una mejora".
• Nigel Roubini, economista estadounidense: "Para algunos países será muy difícil evitar una segunda recesión"
• Mervyn King: "La recuperación será turbulenta".
• Nicholas Stern, LSE: "Nadie sabe lo que va a pasar con la confianza de los consumidores e inversores".