Johannesburgo, una ciudad campeona
Johannesburgo,Agencias
Johannesburgo se suma, con la final del Mundial de Sudáfrica que el domingo disputarán las selecciones de Holanda y España, a la lista de ciudades campeones del Mundo que inauguró la capital uruguaya, Montevideo, hace ochenta años en el torneo de 1930.
La final se disputará en Soweto, en el área metropolitana de Johannesburgo, por lo que el choque no tendrá lugar en la misma ciudad, tal y como ya ocurrió otras dos veces, puesto que en 1958 la final del Mundial de Suecia se jugó en Solna, en las afueras de Estocolmo y en 1998 fue en Saint Denis, muy cerca de París.
En los tres casos esta circunstancia ha obedecido a la ubicación exacta del municipio en el que ha estado construido en estadio, siempre en los alrededores de una gran ciudad.
Si se admiten las áreas de Estocolmo-Solna y París-Saint Denis, así como Rio de Janeiro (escenario en el estadio de Maracaná del último partido del 1950, aunque no fue una final), hasta la fecha son quince las ciudades sede del partido decisivo del Mundial, por lo que, con Johannesburgo-Soweto, la cifra se elevará a dieciséis.
Aunque el actual es el decimonoveno Campeonato del Mundo de Fútbol, hay tres ciudades que han repetido a la hora de acoger una final como es el caso de Roma (1934 y 1990), París (1938 y 1998) y México (1970 y 1986).
Precisamente México es la que menos tiempo debió esperar desde una final a la siguiente, tan sólo dieciséis años, y, además, es la única que acogió las dos finales en el mismo estadio, el Azteca, ya que las de Roma se jugaron en el estadio Nacional y en el Olímpico y las de París en el de Colombes y Saint Denis, respectivamente.
Tras la primera final que tuvo lugar en el estadio Centenario de Montevideo, el Mundial viajó a Europa para vivir sus finales en Roma y París (1934 y 1938), antes de regresar a América para que el Mundial de 1950 se cerrara en el estadio de Maracaná, en Río de Janeiro.
Berna en Suiza (1954) y Estocolmo en Suecia (1958) fueron los dos siguientes escenarios, antes de que el torneo se volviera a disputar en Sudamérica. En 1962, el Mundial se cerró en el estadio Nacional de Santiago, en Chile.
Otro campo mítico, el de Wembley en Londres, fue la sede del Mundial de 1966, antes de que la competición viajara por primera vez a Norteamérica para que el Azteca de México acogiera la final de 1970.
El desaparecido estadio Olímpico de Munich vivió la final de 1974 y el Monumental de River Plate en Buenos Aires la de 1978, A continuación, un tercer estadio histórico, el Santiago Bernabeu de Madrid fuera sede de la final de 1982.
El Azteca de México acogió por segunda vez, en 1986, una final, y en 1990 fue el Olímpico de Roma el escenario del cierre mundialista, antes de que un estadio que originariamente no era de fútbol, el Rose Bowl de Los Ángeles, acogiera el último partido del Mundial Estados Unidos en 1994.
Un campo nuevo, el estadio de Francia en Saint Denis, acogió la final del torneo de 1998, desde donde el Mundial viajó a Corea del Sur y Japón, país este último que acogió la final en el Yokohama Internacional Stadium (año 2002).
El último capítulo de esta serie se escribió en el Olympiastadion de Berlín hace cuatro años y ahora el relevo lo va a tomar el Soccer City de Johannesburgo-Soweto.
Johannesburgo se suma, con la final del Mundial de Sudáfrica que el domingo disputarán las selecciones de Holanda y España, a la lista de ciudades campeones del Mundo que inauguró la capital uruguaya, Montevideo, hace ochenta años en el torneo de 1930.
La final se disputará en Soweto, en el área metropolitana de Johannesburgo, por lo que el choque no tendrá lugar en la misma ciudad, tal y como ya ocurrió otras dos veces, puesto que en 1958 la final del Mundial de Suecia se jugó en Solna, en las afueras de Estocolmo y en 1998 fue en Saint Denis, muy cerca de París.
En los tres casos esta circunstancia ha obedecido a la ubicación exacta del municipio en el que ha estado construido en estadio, siempre en los alrededores de una gran ciudad.
Si se admiten las áreas de Estocolmo-Solna y París-Saint Denis, así como Rio de Janeiro (escenario en el estadio de Maracaná del último partido del 1950, aunque no fue una final), hasta la fecha son quince las ciudades sede del partido decisivo del Mundial, por lo que, con Johannesburgo-Soweto, la cifra se elevará a dieciséis.
Aunque el actual es el decimonoveno Campeonato del Mundo de Fútbol, hay tres ciudades que han repetido a la hora de acoger una final como es el caso de Roma (1934 y 1990), París (1938 y 1998) y México (1970 y 1986).
Precisamente México es la que menos tiempo debió esperar desde una final a la siguiente, tan sólo dieciséis años, y, además, es la única que acogió las dos finales en el mismo estadio, el Azteca, ya que las de Roma se jugaron en el estadio Nacional y en el Olímpico y las de París en el de Colombes y Saint Denis, respectivamente.
Tras la primera final que tuvo lugar en el estadio Centenario de Montevideo, el Mundial viajó a Europa para vivir sus finales en Roma y París (1934 y 1938), antes de regresar a América para que el Mundial de 1950 se cerrara en el estadio de Maracaná, en Río de Janeiro.
Berna en Suiza (1954) y Estocolmo en Suecia (1958) fueron los dos siguientes escenarios, antes de que el torneo se volviera a disputar en Sudamérica. En 1962, el Mundial se cerró en el estadio Nacional de Santiago, en Chile.
Otro campo mítico, el de Wembley en Londres, fue la sede del Mundial de 1966, antes de que la competición viajara por primera vez a Norteamérica para que el Azteca de México acogiera la final de 1970.
El desaparecido estadio Olímpico de Munich vivió la final de 1974 y el Monumental de River Plate en Buenos Aires la de 1978, A continuación, un tercer estadio histórico, el Santiago Bernabeu de Madrid fuera sede de la final de 1982.
El Azteca de México acogió por segunda vez, en 1986, una final, y en 1990 fue el Olímpico de Roma el escenario del cierre mundialista, antes de que un estadio que originariamente no era de fútbol, el Rose Bowl de Los Ángeles, acogiera el último partido del Mundial Estados Unidos en 1994.
Un campo nuevo, el estadio de Francia en Saint Denis, acogió la final del torneo de 1998, desde donde el Mundial viajó a Corea del Sur y Japón, país este último que acogió la final en el Yokohama Internacional Stadium (año 2002).
El último capítulo de esta serie se escribió en el Olympiastadion de Berlín hace cuatro años y ahora el relevo lo va a tomar el Soccer City de Johannesburgo-Soweto.