A Capello le preocupa la agresividad de Rooney con los árbitros
Wayne Rooney, el jugador más en forma de la selección inglesa a tenor de los últimos partidos de preparación, ha recibido instrucciones para rebajar sus niveles de agresividad en el campo a fin de minimizar los riesgos de expulsión durante el Mundial, como ya le ocurrió en la edición anterior.
En el amistoso de este lunes contra el Platinum Stars, de la primera división sudafricana, Rooney marcó uno de los tres goles de Inglaterra y fue el alma del equipo cuando entró en la segunda parte, pero también dejó destellos de su fuerte carácter.
El delantero del Manchester United, que en el Mundial 2006 fue expulsado en el partido de cuartos de final contra Portugal, recibió ayer una tarjeta amarilla y se entregó al trabajo defensivo con excesivo ardor, lo que le indujo a pedir disculpas y regalarle su camiseta al árbitro, Jeff Selogilwe, al final del encuentro.
El colegiado lamentó haberle tenido que amonestar: "Me supo mal porque es mi jugador favorito. Es un gran jugador cuando le ves en televisión, pero en el terreno de juego no deja de insultar a los árbitros", comentó Selogilwe, según recoge la agencia local sudafricana.
"Debe aprender a controlar su temperamento porque en caso contrario puede ser expulsado, sobre todo si utiliza esa clase de lenguaje", añadió el árbitro.
Jermain Defoe, compañero de selección de Rooney, considera que el carácter de Rooney forma parte de su juego. "Si tuviera que rebajar su intensidad, sería un jugador menos importante, menos competitivo. No sería él mismo", comentó.
Inglaterra, integrada en el grupo C, debutará el sábado próximo contra Estados Unidos en Rustemburgo. Argelia y Eslovenia completan el grupo.
En el amistoso de este lunes contra el Platinum Stars, de la primera división sudafricana, Rooney marcó uno de los tres goles de Inglaterra y fue el alma del equipo cuando entró en la segunda parte, pero también dejó destellos de su fuerte carácter.
El delantero del Manchester United, que en el Mundial 2006 fue expulsado en el partido de cuartos de final contra Portugal, recibió ayer una tarjeta amarilla y se entregó al trabajo defensivo con excesivo ardor, lo que le indujo a pedir disculpas y regalarle su camiseta al árbitro, Jeff Selogilwe, al final del encuentro.
El colegiado lamentó haberle tenido que amonestar: "Me supo mal porque es mi jugador favorito. Es un gran jugador cuando le ves en televisión, pero en el terreno de juego no deja de insultar a los árbitros", comentó Selogilwe, según recoge la agencia local sudafricana.
"Debe aprender a controlar su temperamento porque en caso contrario puede ser expulsado, sobre todo si utiliza esa clase de lenguaje", añadió el árbitro.
Jermain Defoe, compañero de selección de Rooney, considera que el carácter de Rooney forma parte de su juego. "Si tuviera que rebajar su intensidad, sería un jugador menos importante, menos competitivo. No sería él mismo", comentó.
Inglaterra, integrada en el grupo C, debutará el sábado próximo contra Estados Unidos en Rustemburgo. Argelia y Eslovenia completan el grupo.