Manifestantes "camisas rojas" causan 35 incendios en Bangkok
Bangkok, EP
Los manifestantes antigubernamentales tailandeses desalojados el miércoles del centro de Bangkok, donde se atrincheraron durante dos meses, incendiaron 35 edificios, mientras que se conoció hoy que la violencia de las últimas horas causó al menos 14 muertos y 88 heridos, según fuentes oficiales.
Los opositores "camisas rojas" se rindieron y tuvieron que abandonar su campamento después de que los militares asaltaran sus posiciones y detuvieran a nueve de sus líderes. Otros tres dirigentes de la protesta (Veera Musigkapong, Weng Tojirakarn y Korkaew Pikulthong) se entregaron hoy a la policía y un cuarto, Arisman Pongruangrong, fue detenido.
A primera hora de hoy la calma regresaba a la capital tailandesa después de las peores escenas de violencia sufridas en dos décadas. El gobierno decidió extender hasta el domingo el toque de queda, desde las nueve de la noche hasta las cinco de la mañana, para garantizar la seguridad.
"Entendemos su frustración, pero la violencia que se desencadenó la pasada noche iba más allá de esa frustración", declaró el portavoz del gobierno, Panitan Wattanyakorn.
"Se trató de crimen organizado, terrorismo organizado. Ahora estamos trabajando para contener esos actos de terrorismo", añadió.
De acuerdo con los datos ofrecidos por el gobierno, al menos 14 personas murieron y 394 resultaron heridas el miércoles cuando las fuerzas oficiales asaltaron el barrio comercial de Ratchaprasong, que los manifestantes ocupaban desde el pasado 3 de abril.
En estos dos meses se registraron hasta 82 víctimas mortales a causa de los enfrentamientos y el hostigamiento del ejército, que llegó a disparar con fuego real contra los manifestantes.
Miles de opositores huyeron tras el ataque a un templo budista de la zona. "Nos dispararon estando en el templo", declaró Manat Kaetphet, de 44 años, procedente de la provincia de Amnat Charoen. "Vi que las balas alcanzaban al menos a seis personas", añadió.
El gobierno ofreció a muchos manifestantes la posibilidad de regresar en autobús a su lugares de origen, principalmente las provincias del norte y noroeste del país.
Tras el asalto y la rendición de la mayor parte de sus líderes, muchos "camisas rojas" enardecidos se lanzaron a saquear tiendas e incendiar hasta 35 edificios comerciales vinculados a las élites del país.
El Frente Unido por la Democracia y contra la Dictadura (UDD), mejor conocido como el movimiento de los "camisas rojas", comenzó a manifestarse en Bangkok el pasado 12 de marzo para exigir la dimisión del primer ministro Abhsiit Vejjajiva, la disolución del Parlamento y la convocatoria de nuevas elecciones.
El UDD acusa a Abhisit de haber llegado al poder de forma ilegítima, con el apoyo de los militares.
Los manifestantes antigubernamentales tailandeses desalojados el miércoles del centro de Bangkok, donde se atrincheraron durante dos meses, incendiaron 35 edificios, mientras que se conoció hoy que la violencia de las últimas horas causó al menos 14 muertos y 88 heridos, según fuentes oficiales.
Los opositores "camisas rojas" se rindieron y tuvieron que abandonar su campamento después de que los militares asaltaran sus posiciones y detuvieran a nueve de sus líderes. Otros tres dirigentes de la protesta (Veera Musigkapong, Weng Tojirakarn y Korkaew Pikulthong) se entregaron hoy a la policía y un cuarto, Arisman Pongruangrong, fue detenido.
A primera hora de hoy la calma regresaba a la capital tailandesa después de las peores escenas de violencia sufridas en dos décadas. El gobierno decidió extender hasta el domingo el toque de queda, desde las nueve de la noche hasta las cinco de la mañana, para garantizar la seguridad.
"Entendemos su frustración, pero la violencia que se desencadenó la pasada noche iba más allá de esa frustración", declaró el portavoz del gobierno, Panitan Wattanyakorn.
"Se trató de crimen organizado, terrorismo organizado. Ahora estamos trabajando para contener esos actos de terrorismo", añadió.
De acuerdo con los datos ofrecidos por el gobierno, al menos 14 personas murieron y 394 resultaron heridas el miércoles cuando las fuerzas oficiales asaltaron el barrio comercial de Ratchaprasong, que los manifestantes ocupaban desde el pasado 3 de abril.
En estos dos meses se registraron hasta 82 víctimas mortales a causa de los enfrentamientos y el hostigamiento del ejército, que llegó a disparar con fuego real contra los manifestantes.
Miles de opositores huyeron tras el ataque a un templo budista de la zona. "Nos dispararon estando en el templo", declaró Manat Kaetphet, de 44 años, procedente de la provincia de Amnat Charoen. "Vi que las balas alcanzaban al menos a seis personas", añadió.
El gobierno ofreció a muchos manifestantes la posibilidad de regresar en autobús a su lugares de origen, principalmente las provincias del norte y noroeste del país.
Tras el asalto y la rendición de la mayor parte de sus líderes, muchos "camisas rojas" enardecidos se lanzaron a saquear tiendas e incendiar hasta 35 edificios comerciales vinculados a las élites del país.
El Frente Unido por la Democracia y contra la Dictadura (UDD), mejor conocido como el movimiento de los "camisas rojas", comenzó a manifestarse en Bangkok el pasado 12 de marzo para exigir la dimisión del primer ministro Abhsiit Vejjajiva, la disolución del Parlamento y la convocatoria de nuevas elecciones.
El UDD acusa a Abhisit de haber llegado al poder de forma ilegítima, con el apoyo de los militares.