Golfo de México: el derrame podría seguir hasta agosto
Redacción
BBC Mundo
Los pronósticos del gobierno estadounidense respecto al derrame de petróleo que comenzó hace casi seis semanas en el Golfo de México son cada vez más sombríos.
El vertido de la empresa británica British Petroleum (BP) podría seguir hasta agosto y la Casa Blanca se está "preparando para lo peor", dijo este domingo Carol Browner, asesora de medio ambiente y energía del presidente de Estados Unidos, Barack Obama.
Browner, que acompañó a Obama a Luisiana el viernes pasado para evaluar el daño del derrame, afirmó este domingo al canal de televisión CBS que "podría haber petróleo saliendo hasta agosto, cuando los pozos de alivio estén terminados".
BP reconoció este sábado que la operación "top kill" puesta en marcha para frenar el vertido de crudo en el Golfo de México no funcionó y anunció que prepara una nueva estrategia.
La fallida operación pretendía detener la mancha de petróleo taponándola con barro y cemento. En un plan menos ambicioso, este domingo la empresa británica dijo que usará robots a control remoto para bombear el crudo hacia un buque en la superficie en lugar de cerrar el pozo.
Incertidumbre
La empresa espera que con esta alternativa -que tardaría unos cuatro días en instalarse- pueda recoger la mayoría del crudo derramado, aunque no se sabe cuánta probabilidad de éxito tiene este sistema, que nunca se realizó a tanta profundidad (1.500 metros).
En sintonía con BP, la asesora de Obama dijo que esa alternativa no sería una solución permanente ni evitaría que parte del petróleo fluya al mar, incluso cuando la operación esté terminada.
"Estamos preparados para lo peor. Lo hemos estado desde el principio", reconoció Browner.
"Lo peor" sería que no funcionara ninguno de los métodos de contención que se plantean.
La asesora alertó que es posible que el crudo siga manando hasta agosto, cuando se completarán los dos pozos alternativos que perfora BP.
El peor de la historia
Browner dijo que este es "posiblemente el peor desastre ecológico" de la historia del país.
Esto ya lo habían dicho los expertos, que explicaron que el derrame excede por mucho al desastre de Exxon Valdez en Alaska ocurrido en 1989, el peor registrado hasta ahora en EE.UU.
El vertido comenzó el 22 de abril, tras la explosión de la plataforma petrolera "Deepwater Horizon".
La mancha de petróleo ya ha contaminado más de 100 kilómetros de la costa de Luisiana, amenazando sus frágiles humedales y provocando importantes pérdidas a la industria pesquera.
Actualmente más de 12.000 barriles de petróleo son vertidos cada día en el Golfo de México.
"El hecho de que no podamos frenar la fuga y de que hayamos fracasado hasta el momento es aterrador", admitió el sábado el encargado de operaciones de BP, Doug Suttles.
En un intento por acallar las críticas Obama visitó el viernes por segunda vez la zona afectada en Luisiana por el vertido de crudo y anunció que triplicará el número de personas que trabajan en las tareas de limpieza y contención en la costa, que actualmente es de 20.000 efectivos.
La catástrofe ha minado la reputación de BP y podría costarle miles de millones de dólares.
"Cualquier retraso o fracaso adicional seguramente enojará a los pobladores de la costa del Golfo cuyo sustento económico ya ha sido gravemente afectado", señaló el periodista de la BBC en Luisiana, Andy Gallacher.
BBC Mundo
Los pronósticos del gobierno estadounidense respecto al derrame de petróleo que comenzó hace casi seis semanas en el Golfo de México son cada vez más sombríos.
El vertido de la empresa británica British Petroleum (BP) podría seguir hasta agosto y la Casa Blanca se está "preparando para lo peor", dijo este domingo Carol Browner, asesora de medio ambiente y energía del presidente de Estados Unidos, Barack Obama.
Browner, que acompañó a Obama a Luisiana el viernes pasado para evaluar el daño del derrame, afirmó este domingo al canal de televisión CBS que "podría haber petróleo saliendo hasta agosto, cuando los pozos de alivio estén terminados".
BP reconoció este sábado que la operación "top kill" puesta en marcha para frenar el vertido de crudo en el Golfo de México no funcionó y anunció que prepara una nueva estrategia.
La fallida operación pretendía detener la mancha de petróleo taponándola con barro y cemento. En un plan menos ambicioso, este domingo la empresa británica dijo que usará robots a control remoto para bombear el crudo hacia un buque en la superficie en lugar de cerrar el pozo.
Incertidumbre
La empresa espera que con esta alternativa -que tardaría unos cuatro días en instalarse- pueda recoger la mayoría del crudo derramado, aunque no se sabe cuánta probabilidad de éxito tiene este sistema, que nunca se realizó a tanta profundidad (1.500 metros).
En sintonía con BP, la asesora de Obama dijo que esa alternativa no sería una solución permanente ni evitaría que parte del petróleo fluya al mar, incluso cuando la operación esté terminada.
"Estamos preparados para lo peor. Lo hemos estado desde el principio", reconoció Browner.
"Lo peor" sería que no funcionara ninguno de los métodos de contención que se plantean.
La asesora alertó que es posible que el crudo siga manando hasta agosto, cuando se completarán los dos pozos alternativos que perfora BP.
El peor de la historia
Browner dijo que este es "posiblemente el peor desastre ecológico" de la historia del país.
Esto ya lo habían dicho los expertos, que explicaron que el derrame excede por mucho al desastre de Exxon Valdez en Alaska ocurrido en 1989, el peor registrado hasta ahora en EE.UU.
El vertido comenzó el 22 de abril, tras la explosión de la plataforma petrolera "Deepwater Horizon".
La mancha de petróleo ya ha contaminado más de 100 kilómetros de la costa de Luisiana, amenazando sus frágiles humedales y provocando importantes pérdidas a la industria pesquera.
Actualmente más de 12.000 barriles de petróleo son vertidos cada día en el Golfo de México.
"El hecho de que no podamos frenar la fuga y de que hayamos fracasado hasta el momento es aterrador", admitió el sábado el encargado de operaciones de BP, Doug Suttles.
En un intento por acallar las críticas Obama visitó el viernes por segunda vez la zona afectada en Luisiana por el vertido de crudo y anunció que triplicará el número de personas que trabajan en las tareas de limpieza y contención en la costa, que actualmente es de 20.000 efectivos.
La catástrofe ha minado la reputación de BP y podría costarle miles de millones de dólares.
"Cualquier retraso o fracaso adicional seguramente enojará a los pobladores de la costa del Golfo cuyo sustento económico ya ha sido gravemente afectado", señaló el periodista de la BBC en Luisiana, Andy Gallacher.