La ceniza retrasará vuelos por 48 horas
Redacción, BBC Mundo
La organización de controladores de tráfico aéreo europeo ha dicho que los vuelos podrían verse interrumpidos por otras 48 horas debido a las cenizas provenientes de un volcán en Islandia.
El portavoz de Eurocontrol, Brian Flynn, dijo que la falta de viento en el área ocasionó que la nube de cenizas "se mueva muy lentamente hacia el este" y se mantenga "muy densa".
Un total de 5.000 vuelos podrían haberse visto afectados durante la jornada del jueves.
Los aviones se quedaron varados en pistas de Reino Unidos, Irlanda, Holanda, Bélgica, Dinamarca, Noruega, Suecia y Finlandia, entre otros países.
Por ejemplo, Francia tuvo que clausurar sus aeropuertos principales.
En tanto, Reino Unido cerró su espacio aéreo con excepción de los vuelos de emergencia debido al riesgo de que las cenizas dañaran los motores de los aviones.
No se espera que las restricciones se levanten antes de las 12.00 GMT del viernes, por lo menos.
Futuro inmediato
Un total de 5.000 vuelos podrían haberse visto afectados al final del jueves.
Eurocontrol, que cubre 38 naciones en toda Europa, dijo que la ceniza expulsada por el volcan debajo del glaciar Eyjafjallajoekull en Islandia, continuaría moviéndose en dirección al sudeste.
Basados en las directrices de la Organización de Aviación Civil Internacional, los servicios normales de control aéreo no podrán ser proporcionados a vuelos en espacios aéreos afectados por la ceniza volcánica, lo que exige la suspensión temporal del tráfico aéreo, agregó.
Los expertos han advertido que las diminutas partículas de roca, vidrio y arena contenida en la nube de cenizas podría ser suficiente para atascar los motores de los aviones.
Flynn, jefe asistente de Eurocontrol de las operaciones, dijo que la duración de la interrupción fue "mayor de lo que jamás se haya visto en la Unión Europea" y advirtió que el problema podría persistir por un período de 48 horas.
"La situación meteorológica es tal que la ceniza volcánica está avanzando muy lentamente hacia el este pero no hay mucho viento ... así que es muy lenta y muy densa", dijo Flynn a la agencia de noticias Reuters.
Un portavoz del Servicio Nacional de Tráfico Aéreo británico (Nats) dijo que su restricción del espacio aéreo fue la peor de la que se tenga memoria y que era "muy poco probable que la situación en Inglaterra vaya a mejorar en un futuro inmediato".
Las restricciones mantienen en un profundo silencio al aeropuerto de Heathrow, el segundo más activo del mundo y varados a decenas de miles de pasajeros en todo el mundo.
Noruega, Dinamarca, Suecia, Bélgica y Holanda decidieron cerrar su espacio aéreo por completo, mientras que se registraron interrupciones en Finlandia, Francia, Alemania y España.
Tim Farish, quien tenía planeado volar de Oslo a Londres por negocios, dijo a la BBC que había sido informado por la compañía aérea SAS de quedarse en casa y no molestar llamando para obtener actualizaciones.
"Se puede oler azufre aquí, ahora, de la nube del volcán", dijo a la BBC desde su casa en la capital noruega.
"Al parecer, ésto podría durar unos cuantos días más, lo único que puedo hacer, como cualquier otra persona, es sentarme y esperar."
Testimonio
Las restricciones mantienen varados a decenas de miles de pasajeros en todo el mundo.
El editor de BBC Mundo, Alberto Souviron, ha sido una de las miles de víctimas varadas en los aeropuertos de Europa, luego de que su vuelo de Madrid a Londres fuera cancelado.
"Nos dijeron que todos los aeropuertos en Londres estaban completamente cerrados. Como opción nos dijeron que nos anotáramos en lista de espera para este viernes y obviamente está muy larga".
La otra opción era cambiar el boleto para otro día, lo que significaría quedarse en la capital española hasta el lunes o el martes.
Decidió entonces tomar un avión a París —antes de que también cerraran sus aeropuertos— con la intención de tomar el tren Eurostar que va de la capital francesa a Londres.
"Lamentablemente todos los boletos se agotaron por varios días".
Ahora Souviron ha tenido que rentar una habitación de hotel en París con la intención de levantarse a primera hora este viernes, rentar un auto, irse a Calais y ver si puede abordar un ferry a Dover.
"Con optimismo llegaré", dijo Souviron, que además tiene que tomar un avión a Nueva York el domingo.
Erupción, cenizas... y espera
El miércoles, el volcán lanzó una nube de ceniza de 11 km a la atmósfera.
El volcán bajo el glaciar Eyjafjallajoekull entró en erupción el miércoles por segunda vez en un mes, lanzando una nube de ceniza de 11 km a la atmósfera. En el momento en que alcanzó el norte de Reino Unido, se había elevado a 16 kilómetros.
Testigos dijeron que dos corrientes de agua habían comenzado a salir del glaciar el miércoles y que la carretera que bordea el río Markarfljot se había inundado en varios puntos. Hasta 800 personas fueron evacuadas de sus hogares.
El jueves, se informó que la inundación había disminuido pero el volcán siguió produciendo cenizas que iniciaron a volar hacia Europa.
La última erupción volcánica bajo el glaciar fue el 20 de marzo. Una anterior inició en 1821 —y continuó durante dos años.
La organización de controladores de tráfico aéreo europeo ha dicho que los vuelos podrían verse interrumpidos por otras 48 horas debido a las cenizas provenientes de un volcán en Islandia.
El portavoz de Eurocontrol, Brian Flynn, dijo que la falta de viento en el área ocasionó que la nube de cenizas "se mueva muy lentamente hacia el este" y se mantenga "muy densa".
Un total de 5.000 vuelos podrían haberse visto afectados durante la jornada del jueves.
Los aviones se quedaron varados en pistas de Reino Unidos, Irlanda, Holanda, Bélgica, Dinamarca, Noruega, Suecia y Finlandia, entre otros países.
Por ejemplo, Francia tuvo que clausurar sus aeropuertos principales.
En tanto, Reino Unido cerró su espacio aéreo con excepción de los vuelos de emergencia debido al riesgo de que las cenizas dañaran los motores de los aviones.
No se espera que las restricciones se levanten antes de las 12.00 GMT del viernes, por lo menos.
Futuro inmediato
Un total de 5.000 vuelos podrían haberse visto afectados al final del jueves.
Eurocontrol, que cubre 38 naciones en toda Europa, dijo que la ceniza expulsada por el volcan debajo del glaciar Eyjafjallajoekull en Islandia, continuaría moviéndose en dirección al sudeste.
Basados en las directrices de la Organización de Aviación Civil Internacional, los servicios normales de control aéreo no podrán ser proporcionados a vuelos en espacios aéreos afectados por la ceniza volcánica, lo que exige la suspensión temporal del tráfico aéreo, agregó.
Los expertos han advertido que las diminutas partículas de roca, vidrio y arena contenida en la nube de cenizas podría ser suficiente para atascar los motores de los aviones.
Flynn, jefe asistente de Eurocontrol de las operaciones, dijo que la duración de la interrupción fue "mayor de lo que jamás se haya visto en la Unión Europea" y advirtió que el problema podría persistir por un período de 48 horas.
"La situación meteorológica es tal que la ceniza volcánica está avanzando muy lentamente hacia el este pero no hay mucho viento ... así que es muy lenta y muy densa", dijo Flynn a la agencia de noticias Reuters.
Un portavoz del Servicio Nacional de Tráfico Aéreo británico (Nats) dijo que su restricción del espacio aéreo fue la peor de la que se tenga memoria y que era "muy poco probable que la situación en Inglaterra vaya a mejorar en un futuro inmediato".
Las restricciones mantienen en un profundo silencio al aeropuerto de Heathrow, el segundo más activo del mundo y varados a decenas de miles de pasajeros en todo el mundo.
Noruega, Dinamarca, Suecia, Bélgica y Holanda decidieron cerrar su espacio aéreo por completo, mientras que se registraron interrupciones en Finlandia, Francia, Alemania y España.
Tim Farish, quien tenía planeado volar de Oslo a Londres por negocios, dijo a la BBC que había sido informado por la compañía aérea SAS de quedarse en casa y no molestar llamando para obtener actualizaciones.
"Se puede oler azufre aquí, ahora, de la nube del volcán", dijo a la BBC desde su casa en la capital noruega.
"Al parecer, ésto podría durar unos cuantos días más, lo único que puedo hacer, como cualquier otra persona, es sentarme y esperar."
Testimonio
Las restricciones mantienen varados a decenas de miles de pasajeros en todo el mundo.
El editor de BBC Mundo, Alberto Souviron, ha sido una de las miles de víctimas varadas en los aeropuertos de Europa, luego de que su vuelo de Madrid a Londres fuera cancelado.
"Nos dijeron que todos los aeropuertos en Londres estaban completamente cerrados. Como opción nos dijeron que nos anotáramos en lista de espera para este viernes y obviamente está muy larga".
La otra opción era cambiar el boleto para otro día, lo que significaría quedarse en la capital española hasta el lunes o el martes.
Decidió entonces tomar un avión a París —antes de que también cerraran sus aeropuertos— con la intención de tomar el tren Eurostar que va de la capital francesa a Londres.
"Lamentablemente todos los boletos se agotaron por varios días".
Ahora Souviron ha tenido que rentar una habitación de hotel en París con la intención de levantarse a primera hora este viernes, rentar un auto, irse a Calais y ver si puede abordar un ferry a Dover.
"Con optimismo llegaré", dijo Souviron, que además tiene que tomar un avión a Nueva York el domingo.
Erupción, cenizas... y espera
El miércoles, el volcán lanzó una nube de ceniza de 11 km a la atmósfera.
El volcán bajo el glaciar Eyjafjallajoekull entró en erupción el miércoles por segunda vez en un mes, lanzando una nube de ceniza de 11 km a la atmósfera. En el momento en que alcanzó el norte de Reino Unido, se había elevado a 16 kilómetros.
Testigos dijeron que dos corrientes de agua habían comenzado a salir del glaciar el miércoles y que la carretera que bordea el río Markarfljot se había inundado en varios puntos. Hasta 800 personas fueron evacuadas de sus hogares.
El jueves, se informó que la inundación había disminuido pero el volcán siguió produciendo cenizas que iniciaron a volar hacia Europa.
La última erupción volcánica bajo el glaciar fue el 20 de marzo. Una anterior inició en 1821 —y continuó durante dos años.