Europa suaviza restricciones aéreas
Redacción, BBC Mundo
El desolado aeropuerto John Lennon en Liverpool, el lunes 19 de abril.
La Unión Europea (UE) dijo que reducirá la zona de prohibición de vuelos impuesta tras la erupción de un volcán en Islandia cuyas cenizas ennegrecieron los cielos de Europa.
Los ministros de Transporte de la UE dijeron que habrá una zona de exclusión de vuelos, otra abierta a todos los vuelos y una tercera de “precaución” en la que se permitirán ciertos vuelos.
La decisión se conoció luego de que Gran Bretaña, Alemania, Francia y Bélgica dijeron que el martes comenzarían a reabrir sus espacios aéreos.
Pérdidas millonarias
La Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA por sus siglas en inglés), había criticado duramente la decisión de muchos gobiernos europeos de cerrar el espacio aéreo debido a las cenizas del volcán de Islandia.
La industria de las aerolíneas aseguró que sus pérdidas ascienden ya a US$1.000 millones, desde que hace cinco días el espacio aéreo de Europa se cerró por las cenizas que lanzó al aire la erupción del volcán Eyjafjallajoekull.
El director ejecutivo de British Airways, Willie Walsh, consideró este lunes que las zonas de prohibición de vuelos eran innecesarias.
Las restricciones fueron impuestas por temor de que la ceniza -una mezcla de vidrio, arena y partículas de roca pudiera dañar los motores y las turbinas de los aviones.
A partir del martes, cientos de miles de pasajeros europeos podrán regresar a sus hogares.
El organismo inglés que controla el tráfico aéreo del Reino Unido dijo la noche del lunes que el espacio aéreo de Escocia, partes del norte de Gran Bretaña e Irlanda del Norte, se reabrirá el martes.
Lufthansa, mientras tanto, recibió autorización del organismo alemán que controla el tráfico aéreo para que 50 vuelos pudieran llegar a los aeropuertos de Frankfurt, Munich y Dusseldorf, procedentes del Lejano Oriente, Africa y Estados Unidos.
Francia y Bélgica anunciaron también que abrirán su espacio aéreo el martes.
Duras críticas de la IATA
El jefe de la IATA, Goivanni Bisignani, le dijo a la BBC que la acción de haber cerrado el espacio aéreo era una "vergüenza" para Europa y que se trataba de un "desorden europeo".
Agregó que “la decisión que Europa ha tomado está sin el gravamen de riesgo, ninguna consulta, ninguna coordinación, ninguna dirección”.
Explicó que el cierre del espacio aéreo le está costando a las aerolíneas alrededor de US$200 millones diarios.
El comisionado europeo de Transporte, Siim Kallas, había dicho que no habría ningún compromiso sobre seguridad.
Las líneas europeas habían pedido a la UE y a los gobiernos de países europeos una compensación por haber cerrado el espacio aéreo.
El volcán hizo erupción el miércoles de la semana pasada, por segunda vez en un mes, pero este lunes expertos aseguraron que la cantidad de ceniza que está expulsando comenzó a disminuir.
Un pasajero varado en el aeropuerto de Fiumicino, cerca de Roma.
Según la corresponsal de la BBC en Islandia, Lorna Gordon, la altura de la nube volcánica en el cielo ha descendido, por lo que -según los expertos- se están liberando menos cenizas a la atmósfera, en contraste con lo que ocurría al principio de la erupción.
"Los científicos aseguran que la actividad volcánica ha entrado a una fase diferente", agregó Gordon.
Sin embargo, la espesa nube de fino polvo mineral que flota en el aire se extiende desde el Círculo Ártico en el norte, hasta la costa francesa en el Mediterráneo en el sur, y desde España hasta Rusia.
El espacio aéreo ha estado cerrado, o parcialmente cerrado, en más de 20 países.
Varios aeropuertos europeos han reabierto sus pistas, incluyendo los de Austria, Estonia, Finlandia, Hungría y Turquía, después de que las autoridades decidieron que no había más riesgos.
El desolado aeropuerto John Lennon en Liverpool, el lunes 19 de abril.
La Unión Europea (UE) dijo que reducirá la zona de prohibición de vuelos impuesta tras la erupción de un volcán en Islandia cuyas cenizas ennegrecieron los cielos de Europa.
Los ministros de Transporte de la UE dijeron que habrá una zona de exclusión de vuelos, otra abierta a todos los vuelos y una tercera de “precaución” en la que se permitirán ciertos vuelos.
La decisión se conoció luego de que Gran Bretaña, Alemania, Francia y Bélgica dijeron que el martes comenzarían a reabrir sus espacios aéreos.
Pérdidas millonarias
La Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA por sus siglas en inglés), había criticado duramente la decisión de muchos gobiernos europeos de cerrar el espacio aéreo debido a las cenizas del volcán de Islandia.
La industria de las aerolíneas aseguró que sus pérdidas ascienden ya a US$1.000 millones, desde que hace cinco días el espacio aéreo de Europa se cerró por las cenizas que lanzó al aire la erupción del volcán Eyjafjallajoekull.
El director ejecutivo de British Airways, Willie Walsh, consideró este lunes que las zonas de prohibición de vuelos eran innecesarias.
Las restricciones fueron impuestas por temor de que la ceniza -una mezcla de vidrio, arena y partículas de roca pudiera dañar los motores y las turbinas de los aviones.
A partir del martes, cientos de miles de pasajeros europeos podrán regresar a sus hogares.
El organismo inglés que controla el tráfico aéreo del Reino Unido dijo la noche del lunes que el espacio aéreo de Escocia, partes del norte de Gran Bretaña e Irlanda del Norte, se reabrirá el martes.
Lufthansa, mientras tanto, recibió autorización del organismo alemán que controla el tráfico aéreo para que 50 vuelos pudieran llegar a los aeropuertos de Frankfurt, Munich y Dusseldorf, procedentes del Lejano Oriente, Africa y Estados Unidos.
Francia y Bélgica anunciaron también que abrirán su espacio aéreo el martes.
Duras críticas de la IATA
El jefe de la IATA, Goivanni Bisignani, le dijo a la BBC que la acción de haber cerrado el espacio aéreo era una "vergüenza" para Europa y que se trataba de un "desorden europeo".
Agregó que “la decisión que Europa ha tomado está sin el gravamen de riesgo, ninguna consulta, ninguna coordinación, ninguna dirección”.
Explicó que el cierre del espacio aéreo le está costando a las aerolíneas alrededor de US$200 millones diarios.
El comisionado europeo de Transporte, Siim Kallas, había dicho que no habría ningún compromiso sobre seguridad.
Las líneas europeas habían pedido a la UE y a los gobiernos de países europeos una compensación por haber cerrado el espacio aéreo.
El volcán hizo erupción el miércoles de la semana pasada, por segunda vez en un mes, pero este lunes expertos aseguraron que la cantidad de ceniza que está expulsando comenzó a disminuir.
Un pasajero varado en el aeropuerto de Fiumicino, cerca de Roma.
Según la corresponsal de la BBC en Islandia, Lorna Gordon, la altura de la nube volcánica en el cielo ha descendido, por lo que -según los expertos- se están liberando menos cenizas a la atmósfera, en contraste con lo que ocurría al principio de la erupción.
"Los científicos aseguran que la actividad volcánica ha entrado a una fase diferente", agregó Gordon.
Sin embargo, la espesa nube de fino polvo mineral que flota en el aire se extiende desde el Círculo Ártico en el norte, hasta la costa francesa en el Mediterráneo en el sur, y desde España hasta Rusia.
El espacio aéreo ha estado cerrado, o parcialmente cerrado, en más de 20 países.
Varios aeropuertos europeos han reabierto sus pistas, incluyendo los de Austria, Estonia, Finlandia, Hungría y Turquía, después de que las autoridades decidieron que no había más riesgos.