Izquierda vence a partido de Nicolas Sarkozy en comicios en Francia
Paris, EP
La izquierda opositora en Francia, que llevaba años de resultados negativos, resucitó el domingo, al aplastar al partido conservador del presidente Nicolas Sarkozy en las elecciones regionales, que extraoficialmente dieron comienzo a la carrera por la presidencia en el 2012.
Una aclamación resonó en las oficinas generales del Partido Socialista, cuando se dieron a conocer los resultados, desde la Riviera Francesa hasta París.
Con el 97% de los votos contados, los socialistas y sus aliados ganaron el 54% de los votos en el país, mientras que el partido UMP de Sarkozy obtuvo el 35,3%, de acuerdo con el Ministerio del Interior.
El Frente Nacional de extrema izquierda se quedó con alrededor del 10%.
Mientras siguen llegando los resultados región por región, todo parece indicar que los Socialistas obtendrán el gran triunfo que habían vaticinado.
Los resultados oficiales mostraban que los conservadores mantuvieron la región de Alsacia, aunque perdieron el control de Córcega.
Estas fueron las dos únicas regiones gobernadas por la derecha que estuvieron en disputa y fueron comicios muy vigilados.
Los franceses, descontentos por la manera como Sarkozy ha manejado la débil economía del país, tuvieron eso en cuenta a la hora de emitir su voto en esta segunda ronda de comicios.
Los socialistas y sus aliados de izquierda también ganaron la primera ronda electoral hace una semana.
El primer ministro francés Francois Fillon, con aire sombrío, reconoció la derrota de los conservadores incluso antes de que se dieran a conocer los resultados parciales.
“Estas elecciones demuestran que los franceses están preocupados” con las reformas a sus planes de pensiones y con otras prestaciones sociales, agregó.
El primer ministro destacó que el país ya no puede financiar al generoso sistema social de Francia sin instituir reformas.
“Nosotros no gobernamos a un gran país como Francia de acuerdo con el ritmo de sus elecciones locales”, agregó.
La incomodidad de los conservadores era evidente. El presidente del UMP, Xavier Bertrand y la ministra de Finanzas Christine Lagarde estaban visiblemente tristes en programas de debate realizados en la televisión tras los comicios.
Los socialistas, luego de años de división y enfrentamientos, en contraste estaban felices y anticipaban lo que ocurrirá para las elecciones presidenciales del 2012.
“Los franceses han hablado y deben ser escuchados”, señaló la dirigente socialista Martine Aubry.
“Es un enorme triunfo”, señaló su predecesor Francois Hollande, quien advirtió sin embargo que “aún no hemos ganado las elecciones presidenciales”.
La participación de votantes fue ligeramente superior al 50%, un poco más del 46% de participación en la primera ronda, pero aún en sus niveles más bajos para Francia.
La izquierda opositora en Francia, que llevaba años de resultados negativos, resucitó el domingo, al aplastar al partido conservador del presidente Nicolas Sarkozy en las elecciones regionales, que extraoficialmente dieron comienzo a la carrera por la presidencia en el 2012.
Una aclamación resonó en las oficinas generales del Partido Socialista, cuando se dieron a conocer los resultados, desde la Riviera Francesa hasta París.
Con el 97% de los votos contados, los socialistas y sus aliados ganaron el 54% de los votos en el país, mientras que el partido UMP de Sarkozy obtuvo el 35,3%, de acuerdo con el Ministerio del Interior.
El Frente Nacional de extrema izquierda se quedó con alrededor del 10%.
Mientras siguen llegando los resultados región por región, todo parece indicar que los Socialistas obtendrán el gran triunfo que habían vaticinado.
Los resultados oficiales mostraban que los conservadores mantuvieron la región de Alsacia, aunque perdieron el control de Córcega.
Estas fueron las dos únicas regiones gobernadas por la derecha que estuvieron en disputa y fueron comicios muy vigilados.
Los franceses, descontentos por la manera como Sarkozy ha manejado la débil economía del país, tuvieron eso en cuenta a la hora de emitir su voto en esta segunda ronda de comicios.
Los socialistas y sus aliados de izquierda también ganaron la primera ronda electoral hace una semana.
El primer ministro francés Francois Fillon, con aire sombrío, reconoció la derrota de los conservadores incluso antes de que se dieran a conocer los resultados parciales.
“Estas elecciones demuestran que los franceses están preocupados” con las reformas a sus planes de pensiones y con otras prestaciones sociales, agregó.
El primer ministro destacó que el país ya no puede financiar al generoso sistema social de Francia sin instituir reformas.
“Nosotros no gobernamos a un gran país como Francia de acuerdo con el ritmo de sus elecciones locales”, agregó.
La incomodidad de los conservadores era evidente. El presidente del UMP, Xavier Bertrand y la ministra de Finanzas Christine Lagarde estaban visiblemente tristes en programas de debate realizados en la televisión tras los comicios.
Los socialistas, luego de años de división y enfrentamientos, en contraste estaban felices y anticipaban lo que ocurrirá para las elecciones presidenciales del 2012.
“Los franceses han hablado y deben ser escuchados”, señaló la dirigente socialista Martine Aubry.
“Es un enorme triunfo”, señaló su predecesor Francois Hollande, quien advirtió sin embargo que “aún no hemos ganado las elecciones presidenciales”.
La participación de votantes fue ligeramente superior al 50%, un poco más del 46% de participación en la primera ronda, pero aún en sus niveles más bajos para Francia.