Racing, a las semifinales: venció por penales a Tigre en un desenlace dramático y buscará la final del torneo Clausura contra Boca
Se impuso 4-2 tras el 0-0 que ni el alargue pudo romper y con un buen arbitraje de Andrés Merlos, que expulsó a tres jugadores: Martirena y Sosa (en el local) y Arias (en el Matador)
LA NACION, Christian Leblebidjian
Racing eliminó a Tigre al vencerlo 4-2 por penales, luego de un desenlace emotivo y lleno de tensión, por los tres expulsados y por la gran cantidad de goles fallados por la Academia. En el Cilindro de Avellaneda ambos equipos dejaron todo, pero el héroe final fue Facundo Cambeses, que desvió dos penales (ante Cardona y Laso) para el pasaje a las semifinales de la Academia, que ahora enfrentará en esa instancia a Boca, en la Bombonera.
Racing fue el equipo de siempre en la búsqueda ofensiva: tuvo el 70% de la posesión, fabricó 131 ataques y 24 remates, pero sólo 4 de ellos fueron al arco rival. Sufrió con las expulsiones de Santiago Sosa y Gabriel Martirena (en Tigre ya había visto la roja Ramón Arias), pero se desahogó en los penales. Este Racing de Costas versión segundo semestre de 2025 aprendió a hacerse fuerte desde el cero en el arco de Cambeses. Mientras Maravilla Martínez ya acumula 10 partidos sin poder festejar un gol, avanza de ronda porque el arquero los evita.
La jornada alrededor de Racing había nacido con la noticia de la oficialización de la partida de Gabriel Arias. El arquero, de 38 años, uno de los símbolos de los últimos tiempos, se irá de la Academia en busca de continuidad. En un mensaje en las redes del club, se explicó: “El de esta noche ante Tigre será el último partido en el Cilindro de Gabriel Arias, luego de 254 partidos jugados, más de un centenar de vallas invictas y 6 títulos en siete años defendiendo el arco de La Academia. Hoy, en tu despedida, es momento de agradecer más que nunca por todo lo que nos brindaste, Gaby, y recordarte que nunca te vamos a olvidar, porque sos parte fundamental de nuestra historia. Nos diste seguridad, nos hiciste invencibles y aún más grandes". Y el mensaje está acompañado de una foto de Arias con los seis trofeos conseguidos en la institución. Arias fue importante en el ciclo de Gustavo Costas pero luego perdió el puesto a manos de Facundo Cambeses y ahora prefirió buscar otro rumbo en donde pueda volver a atajar. Pero Arias recibió el cariño de los hinchas antes y durante el encuentro: en el minuto 21 (en honor al número de su camiseta) fue ovacionado.
Después de la gran victoria ante River por 3-2, por los octavos de final, el entrenador Costas hizo un trabajo mental con sus futbolistas no sólo para mantener el espíritu ganador sino también para no relajarse luego de triunfos importantes. Además, a la Academia le costaron más los rivales como Tigre que los clásicos. Muchas derrotas como local, incluso en este campeonato, fueron contra Barracas Central (0-1), Tigre (1-2), Unión (2-3); hasta igualó con Independiente Rivadavia (0-0). Como le había sucedido en el Apertura, había arrancado muy mal el certamen pero terminó recuperando posiciones hasta ingresar en los playoffs.
Tigre es un equipo que refleja el “estilo Dabove”: aguerrido, comprometido y con un doble 9 que van a cada pelota como si fuera la última y no dejan de luchar ante los centrales rivales: Ignacio Russo y David Romero. Frente a Racing salió a jugar 4-3-1-2, con Jabes Saralegui como nexo entre los volantes y los atacantes. En la primera que le quedó de frente al arco a Romero, probó a Cambeses con un remate desde afuera que controló el arquero.
El Racing de siempre
El Racing de Costas salió a jugar 4-3-3 plantado en campo rival, con el “enmascarado” Sosa más como volante central que como líbero, como en los últimos encuentros. Y con la novedad de la presencia de Duván Vergara en lugar de Conechny como tercer hombre del tridente con Solari y Adrián Martínez. En el medio, a los costados de Sosa, Agustín Almendra (que cumplió 100 partidos en la Academia) y Juan Nardoni, otro que podría tener futuro europeo para 2026. Los laterales Martirena y Gabriel Rojas, como es habitual, se proyectaron desde el arranque con alma de wines. La Academia salió desde el minuto cero con todo al ataque, fue el Racing de siempre y atrás defendió mano a mano entre Colombo y García Basso contra Russo y Romero.
En el desarrollo del juego, un estilo directo que obligaba al espectador a ver la pelota volando de un lado para el otro. De un lanzamiento largo llegó otra chance para Romero, que tras encarar de izquierda al centro remató apenas por encima del travesaño. Mientras que Solari y Maravilla Martínez también estaban expectantes porque con pocos movimientos son capaces de generar una chance de riesgo.
La única polémica del primer tiempo fue una mano de Laso tras un zurdazo de Colombo, en una acción que nació de una jugada preparada de Racing, pero antes de todo eso hubo posición adelantada de Maravilla Martínez, bien sancionada por el asistente 1 Pablo Acevedo. En un buen primer tiempo de Merlos, amonestó a Sebastián Medina por una falta sobre Martirena y a Santiago Sosa por cortar tácticamente un contraataque de Tigre (justamente una infracción sobre Medina).
En el arranque del segundo tiempo Racing contó con dos chances muy buenas: a los cinco minutos, entre el arquero Zenobio y el defensor Tomás Cardona, salvaron en la línea de su arco los goles de Maravilla Martínez y Vergara, respectivamente. Y luego un centro de Santiago Sosa no pudo ser empujado en el punto penal por Martínez: el 9 que no podía romper la mala marcha de nueve encuentros sin convertir.
Con el ingreso de Braian Martínez por Romero, Tigre modificó el 4-3-1-2 por un 4-4-2, corriéndose Jabes Saralegui como volante derecho y Medina a la izquierda del doble 5 Piñeiro y Julián López. Pero enseguida Diego Dabove observó que la línea de volantes necesitaba más recambio y dispuso tres modificaciones juntas: ingresaron Guillermo Soto, Jalil Elías y Simón Rivero por Saralegui, Piñeiro y Medina. En la primera etapa había utilizado la primer ventana de modificaciones con el ingreso de Diego Sosa por Federico Alvarez, lesionado.
Lo mejor del partido
La gente de Rcing se levantó a los 23 minutos porque sintió que el equipo estaba cerca del gol, sobre todo luego de un muy buen centro de Martirena al punto penal que se llevó por delante (pero si puntería) Almendra. Si los cambios de Dabove eran para reforzar la recuperación de la pelota, los de Costas fueron con ambición ofensiva: Adrián Toto Fernández entró por Almendra. Martirena exigió a Zenobio con un tiro libre que terminó en el córner. En el contraataque, lo tuvo Nacho Russo para Tigre, pero su remate se fue alto. Otro mensaje de Costas para no llegar al alargue: adentro Conechny (delantero) por Nardoni (mediocampista). Racing con línea de 2, Sosa por delante y el resto, todos al ataque.
Cerca del final, Zenobio le sacó un mano a mano a Maravilla Martínez y en el contragolpe lo perdió Russo tras un desborde de Rivero desde la izquierda. Más que nunca el desarrollo estaba dado para la posesión de la Academia (70%) y la ofensiva feroz o el contraataque del Matador, que le prendía todas las velas al incansable hijo de Miguel. La chance más clara de Racing llegó a los 47 del segundo tiempo, con un remate desde afuera de Martirena que desvía Zenobio pero en el rebote se la llevó por delante Maravilla de derecha y... a las nubes.
Roja directa para Arias
Cuando se cumplían los 50 minutos, Cachila Arias fue perfectamente expulsado por Merlos: le tiró un trancazo desde atrás a Maravilla Martínez por el afán de cortar un avance prometedor y con el tiempo cumplido. El destino quiso que Racing vs. Tigre sea el segundo encuentro de los playoffs que va al alargue, luego de la igualdad entre Deportivo Riestra y Barracas Central, por los octavos de final.
Si la Academia era superior once contra once, acrecentó su dominio en el comienzo del alargue con dos chances claras para Maravilla Martínez y Conechny. Pero entre tanto empuje, lo que le faltó a Racing fue claridad para no tirar siempre pelotazos o centros.
A los 6 minutos, otro acierto del línea Pablo Acevedo: anuló por posición adelantada de Maravilla Martínez un gol que terminaba anotando Duván Vergara. Racing pidió penal por una salida de Zenobio algo fallida y un contacto con Conechny, pero no fue infracción, sino un roce producto de la acción. Y en medio del revuelo Merlos expulsó a Martirena por doble amarilla: el lateral derecho lo aplaudió irónicamente en un gesto de reclamo.
Expulsado Sosa
Para el arranque del segundo tiempo suplementario, en Racing ingresaron Mura por Colombo y Balboa por Vergara. En otra acertada decisión de Merlos, se fue expulsado Santiago Sosa por doble amarilla tras una acción temeraria sobre el rostro de Oviedo, que le generó un corte en la nariz. Ante este contexto, con cuatro minutos por delante, ingresó Di Césare por Soalri para reforzar la última línea.
Con los dos equipos extenuados, el alargue tampoco ayudó -y la falta de eficacia de Maravilla tampoco- para romper el 0-0 y el partido fue a los penales. En la definición desde los once metros, para la Academia anotaron Maravilla Martínez, Toto Fernández, Matías Rojas y García Basso; para el Matador fueron eficaces Diego Sosa y Julián López. Pero el héroe final fue Cambeses, que se los desvió a Tomás Cardona y Joaquín Laso y generó el triunfo de Racing por 4-2. Y un nuevo desahogo de Costas y sus muchachos, que nunca dejan de luchar en búsqueda de un objetivo.


