Golpe en la mesa del Nápoles
Un gol de David Neres iluminó la noche fría del Nápoles contra la Roma de Gasperini: los ‘Azzurri’ vuelven a volar en la tabla al lado del Milan.
La primera mitad del partido comenzó con el Nápoles imponiendo su velocidad por los costados a la Roma. De hecho, la primera oportunidad de gol llegó inmediatamente con Neres sirviendo a Lang quien, sin embargo, a unos pasos de Svilar, la desperdició. Poco después la tuvo Di Lorenzo, también gracias a un centro de Neres, pero el balón acabó justo a la izquierda del portero contrario. Parecía claro que la Roma estaba sorprendida por el poder de los extremos ofensivos del Nápoles, quienes generaron movimiento constante y lucharon por tomar contramedidas.
Por otro lado, el delantero centro de la Roma, Ferguson, apenas se dejó ver con un cabezazo sobre la media hora. En el 37’, entonces, llegó un contraataque de manual del Nápoles: Hojlund construyó con Neres por el campo y el brasileño perforó la meta de Svilar en la salida. Los ‘Giallorossi’ sufrieron la determinación del Nápoles y el equipo de Conte siguió embalado a la espera del final de la primera parte.
La segunda mitad arrancó con el mismo ritmo que la primera. Entonces Gasperini - sentado en la grada por sanción- dio entrada a El Aynaoui y Dybala mientras que, para el Nápoles, Politano entró al campo en lugar de Lang. Hasta el 65’, sin embargo, los contrastes no hicieron más que aumentar entre el Nápoles, que intentó desbaratar el intento de juego de la Roma, y los ‘Giallorossi’, estresados por el ataque azzurro.
Los temores de la Roma se justificaron con un intento desde fuera del área de Politano en el 75’, pero Svilar resistió mientras la defensa de la Roma siguió achicando aguas con Hermoso imponiéndose en los cierres y la lectura de los tiempos. El equipo local intentó tomar el control del juego con Wesley corriendo por todo el carril derecho, pero Buongiorno desvió a tiempo hacia la esquina. En pleno tiempo adicional, Milinkovic-Savic se robó el espectáculo y atajó un derechazo de Baldanzi que podría haber cambiado el destino del partido. El Nápoles apagó las luces del Estadio Olímpico y volvió a cambiar la tabla de la Serie A, ocupando el primer puesto junto al Milan.


