Eslovenia 0-0 Suiza / Oblak retrasa al reloj suizo
Tras un pleno de victorias en la primera vuelta, el combinado suizo tropezó en Eslovenia. El meta esloveno estuvo pletórico. La fiesta de Xhaka y compañía tendrá que esperar.
Jugada tras jugada, Oblak se fue haciendo grande. A pesar de no tener grandes complicaciones, el meta del Atlético de Madrid sofocó cada atisbo de fuego que amenazó su portería. Ya en la última de la primera mitad, Ndoye cayó en el área rival y el árbitro desestimó que eso fuera penalti y mandó el encuentro al descanso y sin goles.
La segunda parte redujo mucho esa ansiedad del combinado suizo, que ahora era más comedido, en vista de evitar un gol al contragolpe que lo complicase todo. Xhaka, que se convirtió en la brújula de los suizos, hizo un gran partido, aunque sin esa conexión con los hombres de delante, su fútbol se quedaba lejos de la definición de peligro.
La mejor de Eslovenia llegó al final. Sesko, sacando petróleo en una jugada vertical, disparo cruzando en exceso al mismo tiempo que sus compañeros y aficionados se lamentaron. Los últimos minutos dejaron una especie de intensidad estéril en ambos lados del campo. Oblak tuvo que detener dos disparos con pocas posibilidades de éxito pero que coronaron un gran partido del guardameta. La falta de un chispazo que prendiera la mecha concluyo el partido con un insípido 0-0 que deja a Suiza, por el momento, sin billete al Mundial pero a las puertas de conseguirlo en el próximo mes de noviembre.


