El banquillo aprieta
Camavinga y Brahim cerraron la ‘manita’ al Kairat y Rodrygo fue un torbellino en 20 minutos. Ceballos, de menos a más, promete ser importante. Xabi, encantado.
La revolución que sobrevolaba el ambiente de Almaty no fue tal de inicio, pero sí llegó en el segundo tiempo. “Los que entraron con 0-2 estuvieron muy bien”, resumió Xabi. Y no lo faltó razón. Tres protagonistas que, junto a un Ceballos que fue de menos a más contra el Kairat, pidieron protagonismo en Kazajistán.
Rodrygo
Olviden al Rodrygo de banda derecha, por mucho que Xabi dijera desde las entrañas del Estadio Central que “puede jugar ahí en algún momento”. Será conyuntural, porque el de Osasco quiere demostrar que su hábitat es la izquierda. Y contra el Kairat dio un golpe sobre la mesa. Saltó al campo en el 70′ y tuvo tiempo para ser el mayor regateador (¡junto a Huijsen!) del equipo, con cuatro completados y el tercero en ocasiones creadas (dos) y remates (dos). Todo ello en poco más de 20 minutos. Con la confianza rebosante, fue un dolor de cabeza constante y de sus botas nació el tanto de Camavinga. Si Vinicius fue la cruz, en Almaty, Rodrygo fue la cara.
Brahim
Brahim también aprovechó la ciudad de las manzanas para morder la oportunidad. Saltó al campo enérgico, con ganas de reivindicarse. Y lo hizo. Estuvo cerca de hacerle un nudo a la zaga kazaja dentro del área, pero el último control se le escapó. No se escaparía la última jugada de la noche. Gonzalo, otro que exprimió sus 10 minutos, asistió y Brahim ejecutó. Disparo desde la derecha, con la derecha. Directo a la red. El primer tanto de una temporada en la que necesitaba un trampolín. Y nada te hace saltar más alto que el gol.
Camavinga
Para Xabi, Camavinga es un reto. Apenas ha podido trabajar con él y le necesita. Por ser un centrocampista diferente, algo que ha destacado el tolosarra en varias ocasiones. Para muestra, sus declaraciones tras el Levante: "Ya lo habéis visto. Ha hecho una arrancada que ha traspasado líneas. Es muy dinámico. Tiene muchas cualidades“. Frente al Kairat, las líneas las rompieron otros y él, con la coronilla, besó la red. En 13 minutos, un tanto, dos recuperaciones, dos entradas exitosas (100%) y un 86,7% (13/15) en pases. Difícil hacer más en menos. En un encuentro alborotado, Camavinga lo alborotó aún más.
Ceballos
Dani sí fue titular. Y le costó de inicio, ante un Kairat que buscó exprimirse en busca de la historia... hasta que las piernas fallaron. Ahí, comenzó a ganar peso y dejó una hoja estadística de impresión: 99 pases completados (de 104, un 95,2%) y 27 de ellos en el último tercio. Más que nadie. También completó dos entradas y recuperó siete balones. De pasar de puntillas por Almaty a gobernarla. La plantilla del Madrid es muy completa, pero solo tiene un mediocentro puro. Él.


