China quiere ‘independizarse’ del mundo: este es el ambicioso plan oceánico de 13.000 km de ‘megatuberías’ y fecha límite 2030
El proyecto busca reducir la dependencia de las importaciones energéticas y consolidar a China como potencia autosuficiente antes de 2030.
Esto lo hacen para alcanzar dos objetivos: lograr la independencia energética y avanzar en la descarbonización apostando por las energías renovables. Para crecer en el mar, necesitan tuberías que conecten con las plantas terrestres.
Estas tuberías tienen distintos diámetros: algunas miden menos de tres centímetros y otras alcanzan hasta 120 centímetros. Esta enorme inversión da nombre a proyectos como el de la Bahía de Hohai, donde se concentra el mayor número de tuberías, con 3.200 kilómetros, destinadas al transporte de petróleo y gas.
Otro proyecto destacado es el Deep Sea No.1, el primero de gas ultraprofundo construido completamente por China, que opera a 1.500 metros de profundidad. Para llevar a cabo esta construcción, el país ha contado con la ayuda del Hui Yang Shi You 201, el primer barco grúa diseñado para implantar tuberías a profundidades mayores que el proyecto Deep Sea No.1. Es decir, puede realizar instalaciones a 3.000 metros de profundidad.
Estas tuberías están preparadas para resistir temperaturas muy altas y cuentan con un tratamiento anticorrosivo, además de capacidad interna para transportar corrientes de gas y petróleo que pueden alcanzar los 120 grados.
Esta construcción demuestra las ganas que tiene China de lograr una independencia energética. Para 2030, quiere superar los 13.000 kilómetros de tuberías y así fortalecer la red de transporte de energía del país.
China también tiene en la mira el transporte de combustibles ‘verdes’, como el hidrógeno o el gas de esquisto, un combustible recientemente descubierto que podría ayudar en el futuro a reducir las importaciones.


