Francia 2 - Islandia 1 / Mbappé, siempre Mbappé

El del Real Madrid, con un gol y otra asistencia, salva a Francia de un desastre ante Islandia. Tchouameni acabó expulsado tras una dura entrada.

Andrés Onrubia

As

Un gol de penalti de Kylian Mbappé, además de una asistencia a Barcola, fue suficiente para doblegar, con suspense, con mucha fortuna y con bastantes dudas a una combativa y correosa Islandia que empató en el minuto 89, pero el colegiado lo anuló por una falta de Guðjohnsen sobre Konaté. Los galos jugaron 25 minutos en inferioridad numérica por la expulsión de Tchouameni, pero volvieron a sobrevivir en un territorio comanche, en una guerra de trincheras, en un escenario en el que se sienten cómodos incluso sufriendo, con más dudas que certezas, pero con los deberes prácticamente hechos en un parón en el que han encarrilado la clasificación al próximo Mundial.

Mbappé, con su gol, el número 52 como internacional, superó a Thierry Henry como el segundo máximo artillero de la historia de la tricolor, a tan solo cinco del récord de Olivier Giroud.

Los pitos en el calentamiento dirigidos hacia Deschamps por parte del Parque de los Príncipes, estadio del PSG, mostrando su disconformidad con su trabajo tras las lesiones de Dembélé y Doué, desconcertaron a una Francia que firmó una actuación muy pobre en el primer tiempo. Islandia, replegada con cinco defensas, presionando por momentos, sorprendió a la subcampeona del mundo, que dependió, como casi siempre, de su rebosante caudal ofensivo.

A pesar de una ocasión manifiesta de Marcus Thuram, tras un gran pase de Olise, o de algunas internadas con ahínco de Mbappé, la realidad es que esta Francia se siente tan superior por momentos que se deja meter mano con mucha facilidad. La estrella del Bayern, tras un pase de Tchouaméni, se confió en el área y falló estrepitosamente en un pase hacia Upamecano que aprovechó un atento Guðjohnsen. El 0-1, que no era merecido, enmudeció París.

Francia reaccionó sobre la bocina. Las individualidades, el salvavidas de Deschamps desde tiempos atávicos, volvió a salvarle de un apuro. Una pared entre Mbappé y Thuram derribó al del Inter, y el delantero del Real Madrid, con firmeza, sin titubear, firmó el empate. No fue un gol cualquiera, sino un tanto más que simbólico, ya que superaba a Henry como segundo máximo goleador histórico de la selección y se colocaba a tan solo cinco del récord de Giroud. Casi nada a sus 26 años.

Francia pisó el acelerador. Y cuando un equipo más que provisto de talentos de primerísimo nivel, decide cambiar de marcha, el rival necesita rozar la perfección para no hundirse. Tchouaméni, de héroe a villano en cuestión de minutos, se inventó, otro día más, como si ya fuera rutinario, un extraordinario pase en largo para Mbappé, que asistió a Barcola para que marcara el segundo de los de Deschamps. El partido parecía sentenciado por completo, con una Islandia entregada, pero Tchouaméni se excedió.

Aurélien Tchouameni clava sus tacos sobre Thorsteinsson, acción por la que fue expulsado.

El mediocentro clavó parte de sus tacos en la tibia de un rival y el árbitro le expulsó tras consultarlo con el VAR. Francia, con 10, se sintió incómoda, ya que Islandia le cedió el balón aun con superioridad numérica. Rabiot, que entró tras la roja, recibió una pitada ensordecedora del Parc, que no le perdona que jugara en el Olympique de Marsella la temporada pasada. El estadio del PSG pasó de la rabia al silencio, justo cuando Guðjohnsen puso el empate en el minuto 89. El VAR, esa herramienta tan polémica, alertó al colegiado, que anuló el tanto por una falta muy rigurosa del delantero sobre Konaté. Victoria sufrida, muy sufrida, para Francia, que encarrila la clasificación al Mundial.