Perú rechaza declaraciones de Claudia Sheinbaum sobre Pedro Castillo y defiende su soberanía ante México
Cancillería calificó de falsas la declaración de la mandataria al llamar perseguido político al expresidente hoy en prisión
InfobaeEl gobierno peruano, a través de un pronunciamiento oficial del Ministerio de Relaciones Exteriores, expresó su rechazo categórico a las recientes declaraciones de Claudia Sheinbaum, presidenta de los Estados Unidos Mexicanos, relacionadas con la situación del expresidente Pedro Castillo. El pronunciamiento, divulgado este 30 de agosto, señala que las afirmaciones de la mandataria mexicana constituyen una violación a los principios fundamentales de la Carta de la Organización de Estados Americanos (OEA) y muestran un desconocimiento sobre la realidad política y jurídica del Perú.
El comunicado de la cancillería peruana sostiene que “el ciudadano Pedro Castillo no es un perseguido político, como falsamente pretende sostener la señora Sheinbaum”. Según la posición oficial, el 7 de diciembre de 2022, Pedro Castillo intentó “el flagrante quiebre del orden constitucional” al anunciar públicamente la disolución inconstitucional del Congreso de la República y plantear la instauración de un “Gobierno de excepción”, junto con la propuesta de reorganización de instituciones clave como el Poder Judicial, la Fiscalía de la Nación, la Junta Nacional de Justicia y el Tribunal Constitucional.
Para las autoridades peruanas, estos hechos constituyeron un golpe de Estado fallido y una violación evidente de la institucionalidad democrática, situación que derivó en el procesamiento de Castillo conforme a la legislación nacional. "La situación jurídica del ciudadano Castillo obedece a decisiones adoptadas en el marco del Estado de derecho, con pleno respeto al debido proceso y a las garantías consagradas en la Constitución Política del Perú“, precisó el Ministerio de Relaciones Exteriores.
El gobierno peruano rechaza lo que califica como una “posición ideologizada” por parte de la presidenta mexicana, subrayando que “presentar su caso como una persecución política constituye una afirmación falsa e inaceptable”. El pronunciamiento oficial enfatiza que la situación de Pedro Castillo responde a disposiciones legales legítimas y a la preservación de la democracia en el país.
Respeto a la soberanía
El Ministerio de Relaciones Exteriores también mencionó que las declaraciones de Sheinbaum contradicen los principios centrales del derecho internacional, en particular el respeto a la soberanía y el principio de no intervención en los asuntos internos de otros Estados. El texto recuerda que, en contextos internacionales, la defensa de la soberanía nacional constituye uno de los fundamentos principales de la convivencia entre naciones.
En el documento oficial, el gobierno del Perú manifestó su extrañeza ante la postura de la mandataria mexicana, resaltando que “el secretario general de las Naciones Unidas, mediante comunicado del 8 de diciembre de 2022, condenó todo intento de subvertir el orden democrático en el Perú y llamó a respetar el Estado de derecho”. De esta forma, las autoridades peruanas insisten en que la comunidad internacional ha respaldado la defensa de la legalidad democrática tras la crisis política de diciembre de 2022.
El caso de Pedro Castillo continúa proyectando repercusiones en el escenario internacional, generando declaraciones y posiciones enfrentadas entre diversos mandatarios y organismos. Desde la salida abrupta del expresidente peruano tras su intento de disolver el Congreso, la relación bilateral entre Perú y México ha estado marcada por episodios de tensión diplomática.
El pronunciamiento finaliza reiterando que el país actuó en todo momento en armonía con los principios del Estado de derecho y el orden constitucional, preservando la estabilidad democrática y el funcionamiento de sus instituciones. El gobierno peruano insta al respeto del proceso judicial seguido contra el expresidente Pedro Castillo y a la observancia de los tratados y normas internacionales que rigen la convivencia entre Estados soberanos.