El tridente ya funciona
Baena asiste a Julián Alvarez en una jugada con papel clave de Almada. Tres jugadores llamados a combinar y a dar muchas alegrías al Atlético.
El Cholo desde el primer día busca un sitio ideal para Baena. Como mediapunta o segundo delantero por detrás de Julián Alvarez para explotar el último pase. Hasta el momento, el andaluz ha entrado poco en juego, la nota pendiente. Sin embargo, cuando lo ha hecho ha sido para enseñar su colmillo. Balón al espacio para dejar en ocasión clara de gol a Giuliano. Y el pase en bandeja para que la Araña abriese la cuenta en Newcastle. Una salida a la contra tras un balón peleado por Gallagher y el buen pase de Thiago Almada para la carrera de Julián al espacio. Este cedió sin ventaja a Baena, pero ya se la inventó el fichaje rojiblanco más caro del verano.
Y el llamado a hacer más la diferencia. Lo tiene todo. Golpeo, visión, carácter y esa capacidad para que las asistencias se le caigan de los bolsillos. Su pase entre las piernas del defensa para que Julián solo tuviese que empujarla es de los que cambia partidos. Dos cracks llamados a entenderse y formar una fantástica dupla... A la que se suma Almada. Más allá de su pase al hueco para Julián, el argentino quiere ser protagonista. Parte desde la banda izquierda, pero baja a recibir, a combinar, a iniciar el juego. Muy amigo de Correa, sus cualidades son otras. Más en la base, a la hora de formar el juego del equipo. Se ofrece y se rebela si el equipo no agarra la posesión. Almada es un jugador con personalidad.
Junto a Hancko, probablemente el mejor de las caras nuevas. Unas sinergias que se van formando en el nuevo tridente del Cholo, que cuenta con un as en la manga. La presencia de Griezmann como revulsivo. El autor de un golazo contra el Rayo y una definición de superclase en Newcastle. Al francés pareció quemársele el motor el curso pasado. Era el jugador de campo con más minutos y lo pagó. Pero en su papel como suplente de lujo parece haber encontrado la capacidad para ser, un año más, decisivo. Le sobra la clase, es única en la plantilla. Pronto llegará Raspadori. Y Sorloth no quiere perder sus minutos. Un ataque con variantes y que en Newcastle demostró que tiene mimbres para hacer cosas grandes.