Lula visitó a la ex presidenta argentina Cristina Fernández de Kirchner en su casa donde cumple prisión domiciliaria
El mandatario brasileño se encuentra Buenos Aires donde se celebra la cumbre del Mercosur
El mandatario brasileño acudió escoltado y en vehículo oficial al barrio de Constitución, donde reside Fernández, y entró a la vivienda donde se habían concentrado seguidores de la ex mandataria desde el mediodía. Se retiró poco después de la misma forma.

Y añadió: “Por eso hoy SU VISITA FUE MUCHO MÁS QUE UN GESTO PERSONAL: FUE UN ACTO POLÍTICO DE SOLIDARIDAD”.
En ese sentido, CFK señaló que “los ojos del mundo están viendo con atención como la ARGENTINA VIVE UNA AUTÉNTICA DERIVA AUTORITARIA DE LA MANO DEL GOBIERNO DE MILEI; EN LO QUE PODEMOS IDENTIFICAR COMO TERRORISMO DE ESTADO DE BAJA INTENSIDAD”.
No es la primera vez que el brasileño expresó muestras de apoyo a Fernández ante su condena. El mandatario brasileño llamó por teléfono a la dirigente peronista para expresarle su apoyo luego de que la Corte Suprema de Argentina confirmara el mes pasado el fallo condenatorio que le había impuesto el Tribunal Oral Federal N°2 en 2022.
“Observé con satisfacción la serenidad y determinación con la que Cristina enfrenta esta situación adversa y su determinación a seguir luchando”, afirmó Lula.
Lula también ha enfrentado la prisión. Mientras estaba confinado en una sede policial en Curitiba en 2019 tras ser hallado responsable de actos de corrupción, recibió la visita del entonces candidato peronista a la presidencia, Alberto Fernández, quien luego lideró el gobierno en el que la hoy condenada líder peronista ejerció la vicepresidencia (2019-2023). La sentencia de cárcel al dirigente brasileño luego fue anulada por la justicia.
El también líder del Partido de los Trabajadores brasileño se trasladó por Buenos Aires en medio de un operativo de seguridad que le permitió recorrer rápidamente los cinco kilómetros que separan el Palacio San Martín —sede de la Cancillería donde tuvo lugar la cumbre del Mercosur— del domicilio de Fernández.
La atención de la gente y de la televisión estaba puesta en una de las ventanas del departamento por la que la ex mandataria ya ha salido a saludar a sus simpatizantes varias veces desde que inició su periodo de seis años de prisión en arresto domiciliario.
No obstante, el tribunal que concedió autorización para la visita de Lula había advertido a la condenada que debía respetar una de las condiciones de su reclusión en casa: no alterar la paz del barrio.
Lula venía de saludarse con el presidente argentino, Javier Milei, y de recibir la presidencia pro témpore del bloque sudamericano del Mercosur con la presencia demás de los mandatarios de Paraguay, Uruguay y de Bolivia, que se adhirió el año pasado. Milei y Lula, en posiciones políticas contrapuestas, mostraron sus diferencias en sus declaraciones sobre el rumbo que debía seguir el Mercosur.