Netanyahu prometió un “Medio Oriente diferente” para cuando termine el conflicto con Irán
El primer ministro israelí anticipó un cambio geopolítico en la región. Además, llamó al líder supremo iraní, el ayatollah Alí Khamenei, un “Hitler moderno”
Consultado sobre si el derrocamiento del régimen iraní forma parte explícita de los objetivos de guerra de Israel, Netanyahu respondió con una mirada de largo plazo: “Lo veo desde una perspectiva histórica... Ciro liberó a los judíos, y hoy el Estado judío podría liberar a los persas. No en el sentido de que lo estemos haciendo por ellos... Al final, ellos tienen que alzarse, pero nosotros estamos creando las condiciones. Y por eso podría tener consecuencias”, dijo.
En paralelo, el presidente Donald Trump aprovechó la crisis para enviar un mensaje a la cúpula iraní durante un acto de campaña. “Sabemos exactamente dónde está escondido el líder supremo Khamenei”, dijo Trump el domingo por la noche en un mitin en Las Vegas. “Y le estamos diciendo: ríndete incondicionalmente o las consecuencias serán severas”, añadió, sin precisar si manejaba información de inteligencia actualizada.

Aunque no ocupa un cargo formal, Khamenei ejerce el control final sobre la política exterior y militar del país, incluyendo el programa nuclear.
Los comentarios cada vez más contundentes de Trump hacia el gobierno iraní se producen después de que instara a los 9,5 millones de residentes de Teherán a huir por sus vidas mientras acortaba su visita a una cumbre internacional para regresar a Washington para conversaciones urgentes con su equipo de seguridad nacional.
Los comentarios sobre Khamenei y los llamados a la rendición se produjeron poco después de que Trump, en una publicación separada, promocionara el control total de los cielos sobre Teherán.
En los primeros días del conflicto, Trump rechazó un plan presentado por Israel para matar a Khamenei, según un funcionario estadounidense familiarizado con el asunto, que no estaba autorizado para comentar sobre el asunto sensible y habló bajo condición de anonimato.
Los israelíes habían informado al gobierno de Trump que habían desarrollado un plan creíble para matar a Khamenei. Pero los funcionarios de la Casa Blanca informaron a los israelíes que Trump se oponía a tal movimiento. Los funcionarios de la administración estaban preocupados de que el plan para matar a Khamenei pudiera inflamar el conflicto y potencialmente desestabilizar la región.