Israel abatió a decenas de militares iraníes que intentaban reparar los lanzamisiles destruidos en los últimos días
La Fuerza Aérea sigue operando en los cielos del país persa, atacando infraestructura de defensa y sitios nucleares clave para su programa
“La Fuerza Aérea continúa operando en el cielo iraní para eliminar las amenazas dirigidas a la retaguardia israelí. Las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF) no permitirán que el régimen iraní restablezca su infraestructura de lanzamiento de misiles”, prometió en ese sentido el comunicado.
El episodio en el oeste de Irán sucedió poco después de que las Fuerzas de Defensa confirmaran que, durante la madrugada, habían lanzado otra ofensiva aérea a gran escala, dirigida contra múltiples objetivos militares iraníes. Entre los blancos de la operación estuvo el reactor nuclear de agua pesada de Arak, que juega un papel central dentro del programa atómico persa, especialmente por su capacidad para producir plutonio.
De acuerdo con fuentes militares israelíes, en la ofensiva participaron 40 aviones de combate, que emplearon más de 100 municiones guiadas, todas dirigidas con información recabada por la Dirección de Inteligencia Militar israelí, con el objetivo de impedir que la central fuera restaurada y utilizada para el desarrollo de armas nucleares.

Junto a esta instalación, las tropas de Benjamin Netanyhau también atacaron un sitio especializado en el desarrollo de armas nucleares en la región de Natanz, también con la capacidad de acelerar el desarrollo del programa enemigo.
Por último, otros puntos asociados a la producción de misiles balísticos, sistemas de defensa antiaérea, radares, baterías antimisiles y depósitos de misiles tierra-tierra fueron alcanzados en las últimas horas.
Las operaciones de este jueves representaron el séptimo día consecutivo de bombardeos israelíes sobre infraestructura crítica en territorio iraní. Estas acciones se ejecutaron en respuesta al avance sostenido del programa nuclear persa y tras la escalada militar iniciada el pasado viernes 13 de junio, fecha en la que se reportó un fuerte intercambio de misiles luego del primer ataque aéreo de las FDI sobre Teherán y otras regiones.
En respuesta a estas ofensivas, el régimen persa ha estado lanzando también sus propias ofensivas contra el Estado judío, aunque en su caso se centra en objetivos civiles y residenciales.
De hecho, en las últimas horas, Irán lanzó un misil balístico contra el Centro Médico Soroka, el más grande del sur de Israel, causando daños de gran magnitud y dejando varios heridos, según informaron fuentes oficiales.
“Durante una guerra, creo que uno debe elegir con cuidado las palabras y ejecutar las acciones con precisión. Nuestro objetivo es doble: nucleares y balísticos. Los vamos a eliminar. Estamos en proceso de erradicar esta amenaza”, dijo Netanyahu durante una visita al lugar en la que condenó lo ocurrido y prometió abatir al enemigo.