Dembélé está de vuelta

El delantero deberá reaparecer el domingo, en los octavos de final del Mundial de Clubes contra Inter Miami. Su gran objetivo, ganar el Balón de Oro.

Andrés Onrubia
As
Ousmane Dembélé podrá cumplir su gran objetivo de medirse a su ídolo y excompañero Leo Messi el domingo,  en el Mercedes-Benz Stadium de Atlanta, con motivo del PSG-Inter Miami correspondiente a los octavos de final del Mundial de Clubes. El francés está completamente recuperado de su lesión en el cuádriceps del muslo izquierdo y, aunque no jugó ni un minuto ante el Seattle Sounders por precaución, en la tercera jornada de la liguilla, el internacional francés se siente preparado para volver a competir.

Ausente en los tres primeros partidos de la fase de grupos, por culpa de la lesión que sufrió en las semifinales de la Nations League contra España, Dembélé se ha mostrado ansioso por volver a los terrenos de juego. Sin embargo, ni Luis Enrique ni el staff médico, después de una temporada extenuante, con más de 61 partidos a sus espaldas, quisieron tomar ningún riesgo con el delantero, conscientes de que su importancia en la fase final del torneo, prioridad para el PSG, será capital para acercar a los parisinos al que puede suponer el quinto título de la temporada.

A lo largo de la semana, incluso este viernes, a dos dí el exjugador del Barcelona ha seguido a rajatabla el plan individual que le asignó el PSG, además de completar todas las sesiones con normalidad. Impaciente, sereno, y con la mirada puesta en los octavos, su vuelta al verde supone un soplo de aire fresco para el campeón de la Champions, que ha anhelado su presencia en los tres primeros partidos del Mundial, a pesar de la perentoria victoria en su debut por 4-0 contra el Atlético de Madrid.

Dembélé tiene entre ceja y ceja zanjar definitivamente el debate sobre el Balón de Oro en el Mundial de Clubes. Aterrizó en suelo americano con ese objetivo y hará todo lo posible para llevarse el título y para volver a erigirse como un pilar fundamental del Paris Saint-Germain, al que ha guiado, con números y liderazgo, a la primera Champions League de su historia. Con 48 participaciones de gol entre todas las competiciones, 33 goles y 15 asistencias, un gran final de torneo podría catapultarle definitivamente hacia la mayor distinción individual del mundo del fútbol.

La gran ‘ventaja’ para el francés es que su gran perseguidor, Lamine Yamal, no disputa esta competición y que, además, la fase final siempre queda en la retina de los periodistas que votarán para designar al mejor jugador del mundo. Si por Dembélé fuera, ya habría debutado en la fase de grupos, pero el staff médico quiso reducir su entusiasmo de vestirse de corto al considerar “arriesgado” que anticipara los plazos de recuperación.

Enfrentarse por última vez para el que es, según apostilla, el “más grande de todos los tiempos”, Messi, supone una motivación extra para Ousmane Dembélé. El PSG ha denotado síntomas de agotamiento en los últimos partidos, sobre todo en ataque, donde las piernas no han respondido a los delanteros. En un estadio climatizado, con una temperatura ambiente holgadamente más llevadera que las sufridas en los tres primeros encuentros del Mundial, Dembélé se postula como una de las claves para eliminar a un Inter Miami que ha sido la gran sorpresa de la fase de grupos al mostrar un gen competitivo inesperado antes del pistoletazo de salida de la nueva competición de la FIFA.

A priori, a tenor del modus operandi de Luis Enrique, Dembélé no debería arrancar de inicio contra el Inter Miami. El delantero ya ha completado varias sesiones completas con el resto de la plantilla y se siente preparado para ser titular, pero la última palabra la tiene el técnico asturiano, que cuida minuciosamente cada detalle, cada ínfimo percance, para no poner en peligro la salud de los jugadores. Su vuelta supone un chute de adrenalina para el PSG, que hará todo lo posible para que vuelva a ser el mejor jugador del mundo, el futbolista que, según la opinión pública francesa al unísono, merece ganar el próximo Balón de Oro.

Entradas populares