Nápoles 2 - Genoa 2 / El scudetto, al rojo vivo

El Nápoles no pasó del empate a dos con el Genoa en el Maradona y deja la lucha totalmente abierta: el Inter, a solo un punto del liderato.

Mirko Calemme

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La lucha por el scudetto se ha puesto al rojo vivo. El Nápoles, que necesitaba siete puntos en tres jornadas para cantar el alirón, utilizó el ‘comodín’ del empate en el encuentro teóricamente más asequible, ante el Genoa en el Maradona. Ese 2-2 reaviva las esperanzas del Inter, que ahora marcha a solo un punto de los azzurri cuando faltan dos jornadas para el final de una Serie A como no se recordaba en los últimos años.

Mientras Vieira, que selló la salvación hace tiempo, se marcó como único objetivo romper su racha de tres derrotas consecutivas y apostó por varios jóvenes en su once (Ahanor, Otoa, Norton-Cuffy), los sureños se jugaban la vida y arrancaron el partido con el ímpetu de quien quiere hacer historia.

Tras 15 minutos de asedio, llegó el inevitable 1-0. Un McTominay cada vez más brillante filtró un pase entre líneas para Lukaku, que se deshizo de Vásquez y superó a Siegrist con un disparo cruzado.La alegría llegó tras una mala noticia: la lesión de Lobotka, que ya llegaba tocado y tuvo que dejar el campo en el 13’, sustituido por Gilmour. El tempranero tanto relajó a los napolitanos, un error grave ante un equipo sin grandes objetivos, pero bien organizado y con talento.

El Grifone golpeó el larguero con Pinamonti, que cabeceó con peligro una falta botada por Vitinha, y empató en una acción similar. En el 32’, Ahanor (nacido en 2008) se encontró solo en el área tras un centro de Messias y, tras el cabezazo repelido por Meret con la ayuda del poste, el guardameta desvió el balón contra su pierna, introduciéndolo en propia puerta.

El 1-1 despertó a los locales, que rozaron el segundo con Lukaku y Anguissa en el comienzo de la reanudación, y lo lograron con Raspadori, que aprovechó otra asistencia de McTominay para fusilar a Siegrist en el 64′.

El cuadro partenopeo, no obstante, volvió a cometer el error de la primera mitad: dejó demasiado espacio a las iniciativas del rival sin cerrar el partido. Y el Genoa lo aprovechó una vez más, firmando el 2-2 en el 84’ con un cabezazo de Vásquez tras un centro de Martín.

El arreón final del Nápoles no dio frutos, y ahora Conte necesita dos victorias para conquistar el scudetto. La próxima parada: una auténtica batalla en casa de un Parma que lucha por la permanencia, mientras el Inter recibirá a una Lazio en busca de puntos para la Champions.