El rey Carlos III exhibe“unidad familiar y poder” tras la explosiva entrevista de Harry: la prensa británica analiza la reaparición de los Windsor
La familia real se ha reunido en el balcón de Buckingham apenas tres días después de que el hijo menor del monarca diera unas polémicas declaraciones en la BBC
InfobaeEl rey Carlos III ha encabezado este lunes 5 de mayo la reaparición de los Windsor en el balcón del Palacio de Buckingham. El monarca y su esposa, la reina Camila, junto a los príncipes de Gales y otros miembros de la familia real británica, han protagonizado un reencuentro público con motivo del desfile del Día de la Victoria, un compromiso que la Corona ha aprovechado para lanzar un mensaje de unidad familiar y poder tras la explosiva entrevista del príncipe Harry en la BBC.
La experta en lenguaje corporal Judi James asegura que la aparición en el balcón ha enviado un poderoso mensaje de “resistencia y unidad familiar”. En declaraciones al Mirror, describe este gesto como un ejemplo del carácter estoico de la monarquía británica. “Las apariciones en el balcón suelen mostrar a la familia real al máximo de su fortaleza, representándolos como una unidad sólida en una posición de poder y resiliencia mientras los ciudadanos los aclaman”, explica.
El gesto de la princesa Ana
Otro instante curioso ocurrió entre los hermanos más pequeños, los tres hijos de los príncipes de Gales. Louis, conocido por sus expresivas interacciones públicas, se posicionó firme cuando entonaron el himno, pero giró rápidamente para corregir la postura de su hermano mayor, George, quien permanecía con las manos entrelazadas frente a su cuerpo. El gesto del príncipe Louis fue interpretado como una señal de atención hacia sus mayores, algo poco habitual dado su carácter juguetón en anteriores compromisos oficiales.
Tras sus últimas apariciones públicas en Navidad en Sandringham, los hijos de Guillermo y Kate volvieron a captar la atención, especialmente Louis, quien no defraudó a quienes esperaban su entusiasmo característico. Durante el evento, fue visto sosteniendo las aiguillettes doradas del uniforme de vuelo de su padre y extendiendo las manos para las primeras gotas de lluvia que anunciaban el mal tiempo.
El evento en el balcón se cerró con aplausos del público tras la exhibición aérea, dejando una imagen de fortaleza por parte de la monarquía británica en un día cargado de simbolismo histórico y emocional.