Trump afirmó que la relación entre Ucrania y Rusia “puede estar yendo bien”, pese a la continuidad de los ataques por parte del Kremlin
“Ya veremos qué pasa. Y lo van a descubrir muy pronto. Llega un punto en el que hay que aguantar o callarse”, declaró el mandatario a periodistas a bordo del Air Force One, mientras se trasladaba desde su residencia en Mar-a-Lago, Florida, hacia Miami para asistir a un evento de artes marciales mixtas
Trump añadió que “tenemos muchos conflictos en marcha alrededor del mundo y creo que pronto tendremos muchas buenas noticias sobre algunos de estos conflictos”, sin ofrecer detalles sobre negociaciones concretas.

Aunque no se han revelado detalles del encuentro, la Casa Blanca había instado previamente a Moscú a tomar medidas para detener las hostilidades, con el objetivo de alcanzar un acuerdo de paz.
Hasta ahora, no se ha concretado ningún avance sustancial hacia un cese al fuego, y el intercambio de acusaciones entre las partes continúa.
El enviado de Trump para Ucrania propuso un modelo similar al de Berlín de posguerra como parte de un acuerdo de paz
El enviado estadounidense para Ucrania, Keith Kellogg, sugirió aplicar en el país un modelo de zonas de control similar al de Berlín tras la Segunda Guerra Mundial, con una presencia militar diferenciada entre potencias occidentales y Rusia, según una entrevista publicada este sábado por el diario británico The Times.

En el marco de los esfuerzos de Estados Unidos por facilitar una salida al conflicto armado que comenzó hace más de tres años, Kellogg propuso el río Dniéper como una posible línea divisoria natural entre fuerzas aliadas occidentales y tropas rusas.
“Lo que pasó con Berlín en la Segunda Guerra Mundial, cuando había una zona rusa, una zona francesa, una zona británica y una zona estadounidense”, recordó el funcionario al explicar el modelo de referencia.
De acuerdo con la propuesta, una eventual fuerza de paz integrada por Francia y Reino Unido se desplegaría al oeste del Dniéper. En el este del país, Rusia mantendría su presencia en las zonas ocupadas.
Kellogg también propuso la creación de una zona desmilitarizada a lo largo de las actuales líneas del frente para separar a las fuerzas de Kiev y sus aliados de las tropas rusas.
Aunque la Casa Blanca, bajo la presidencia de Donald Trump, ha acercado posiciones con Moscú, Washington ha descartado enviar tropas estadounidenses al terreno. Además, ha advertido a Ucrania que deberá aceptar concesiones territoriales como parte de una eventual solución negociada.

Según Kellogg, la presencia militar de países europeos occidentales “no sería provocativa en absoluto” para el Kremlin, aunque reconoció que el Gobierno ruso podría rechazar esta propuesta.
Tras la publicación de la entrevista, el enviado aclaró en la red social X que sus declaraciones no implicaban una propuesta de partición territorial. “Hablaba de una fuerza de resistencia posterior al alto el fuego en apoyo de Ucrania. En la conversación sobre la partición, me refería a áreas de referencia o zonas de responsabilidad para una fuerza aliada”, escribió.