Los
de Kompany le remontan un partido difícil al Stuttgart y dan un golpe
prácticamente definitivo en la pelea por la Bundesliga.
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El Bayern de Múnich de Kompany tiene unos nervios de acero y lo pone a prueba fin de semana tras fin de semana en la Bundesliga. Una semana después de hacerle un póker al siempre incómodo Frankfurt, el hexacampeón de Europa le remontó el partido al Stuttgart a domicilio para terminar imponiéndose por 1-3
y dar un golpe prácticamente definitivo en la pelea por el título con
el Leverkusen. A falta de lo que el conjunto dirigido por Xabi Alonso
haga este sábado contra el Frankfurt, el triunfo en tierras suabas le sirve a los muniqueses para ampliar a un total de 11 la diferencia de puntos con respecto al conjunto de las aspirinas en segundo lugar de la tabla.
Los
de Hoeness se adueñaron del choque nada más sonar el pitido inicial y
causaron problemas a un Bayern que anduvo algo errático a la hora de
trenzar jugadas. Solo un error del Stuttgart permitió a Musiala
encarar a Nübel, por lo demás todo fue un cuadro suabo que hizo mucho
daño por su carril diestro y terminó adelantándose gracias a un
disparo de Stiller desde la frontal que tuvo su origen en un resbalón de
Sané en la salida de balón. Sin embargo, el internacional alemán no tardó demasiado en resarcirse y,
justo antes de marcharse a vestuarios, sirvió en bandeja el empate a un
Olise al que no le tembló el pulso en el mano a mano con Nübel.
El ritmo del choque en el MHP Arena bajó algo en los segundos 45 minutos.
El Stuttgart ya no llegaba con tanta claridad y el Bayern, con Goretzka
y Palhinha por Kimmich (lesionado) y Pavlovic (resfriado) en la sala de
máquinas, siguió careciendo de esa claridad y creatividad en su juego.
De lo que siempre anda sobrado es de pegada, sobre todo cuando su rival
le invita. Y eso fue lo que ocurrió. Un grosero e incomprensible
error de Nübel y Stiller en la salida de balón le sirvió a Goretzka para
ganar el cuero en el área y superar al meta por medio de un zurdazo. Coman, tras otro error defensivo del Stuttgart, cerró el marcador tras regatear a Nübel y finalizar a puerta vacía. Letal.