Rodrygo, sacrificio y rebelión
El Rayo se dispara. En 2025 participa en un tanto cada 83,3 minutos. En los últimos 17 partidos, 10 goles, seis asistencias y un penalti provocado.
Ya no hay debate. Tampoco sequías. Los tres tantos y dos asistencias en los primeros 18 duelos han quedado enterrados. En los últimos 17, 10 goles, seis asistencias y un penalti provocado. Un cambio de paradigma cimentado en confianza. En acierto. Sin opacar todo lo demás. Porque eso sigue latente. Eso que le ha convertido, con o sin tino, en imprescindible con Ancelotti. Rodrygo siempre ha sido más que números. Ha sido intangibles. Asociación en territorio hostil. Una bisagra. Una especie de asesino silencioso. Pero ha subido los decibelios de su fútbol. Al contrario que su celebración fetiche y reivindicativa (’Now, you can’t see me’, de John Cena), ahora todos le ven.
Sigue sin pisar, no de manera continua al menos, su hábitat natural. Ya sea la banda izquierda o una mediapunta por la que tiene querencia. No obstante, en su asunción de su contexto ha estado su triunfo. En ese sacrificio verbalizado por Bellingham. Desde la derecha golpea y ha multiplicado su incidencia. Decisivo en las grandes noches. Como el último derbi, donde desarboló a Lino y a Galán en el tanto de Mbappé. Como en el huracán blanco que derrumbó al City.
En la vuelta no solo firmó una asistencia. No falló un solo pase (31/31), 16 de ellos en el último tercio del campo (líder junto a Valverde). Fue quien más regates intentó (seis) y quien más completó (dos, como Bellingham y Mbappé). Y también medalla de oro en centros (cuatro) y de plata en ocasiones creadas (tres). Se confirmó como pesadilla de Guardiola. Una noche más ante su rival favorito. No es de extrañar que el de Santpedor le haya llamado en más de una ocasión en el pasado...
Romper su propio techo
Su horizonte, por mucho que Arabia mastique una propuesta astronómica, es blanco. Más que nunca. Y tiene un reto. Superarse a sí mismo. Superar su 2022-23. Entonces fueron 19 goles, 10 asistencias y tres penaltis provocados. Participó en 32 goles en total. De momento, ya ha participado en 22 tantos (13 zarpazos, ocho asistencias y un penalti provocado) en 35 encuentros. Y tiene por delante un máximo de 31 partidos, si el Madrid llega a la meta en Copa y Champions. Necesita generar 10 más. Salen las cuentas.