ASTON VILLA 2 - 2 LIVERPOOL / Emery frena al líder
El Aston Villa puso contra las cuerdas al Liverpool, que terminó rescatando un punto gracias a los goles de Salah y Alexander-Arnold. Asensio fue titular por primera vez con los de Birmingham.
Igualado, con dos equipos bien plantados sobre el césped del Villa Park. Ofreciendo pocos espacios, y en consecuencia, creando pocas ocasiones. Hubo que esperar 38 minutos para encontrar el primer disparo a puerta. Antes, Watkins mandó la pelota a la red tras una buena combinación entre Asensio y Rashford, titulares por primera vez a las órdenes de Emery. El jugador cedido por el United había arrancado en fuera de juego y el tanto no subió al marcador. El Liverpool captó el mensaje y respondió. Primero, con una serie de ocasiones que no llegaron a buen puerto. Una volea de Jota se paseó frente a la meta de Martínez y el argentino bloqueó un pase hacia Szoboszlai dentro del área. Salah cabecearía alto poco después.
El egipcio fue quien abrió el marcador. Con ayuda de Jota y de García. El ex del Levante ofreció el balón directamente al futbolista portugués. Este, en lugar de buscar portería, dejó que fuese Salah, en mejor posición, quien diese la ventaja al líder. Fácil. Herido en su orgullo, el Villa se lanzó adelante y nueve minutos más tarde, McGinn cabeceó un balón que la zaga visitante no había acertado a despejar. Tampoco lo hizo tras la intervención del escocés. Tielemans no tuvo problema en batir a Alisson. Ganó en intensidad el choque. En el césped y también en la grada. Rugió Villa Park a sus leones, que se tomaron ventaja en el último minuto del añadido. Mientras los jugadores del Liverpool protestaban una posible mano de McGinn, los de Emery salieron al ataque y Digne encontró a Watkins en el área. El inglés ganó la partida a su par y cabeceó cruzado. Y a la red.
Alisson se equivocó en el quinto minuto de la reanudación. Salió a interceptar un balón en largo que buscaba a Rashford en la izquierda. Lo encontró y el inglés mandó un globo por encima del meta brasileño, en tierra de nadie. Apareció Konaté para salvar la papeleta despejando a córner. Y del posible 3-1, al 2-2. Jota avisó después de revolverse en la frontal del área y sacar un disparo potente desde la media luna. El larguero escupió el balón. Un minuto más tarde, Alexander-Arnold arrancó y se apoyó en Salah. Cuando recibió el esférico, chutó a portería y un rebote en Mings hizo inútil la estirada de Martínez. El portero, por un lado. Y la pelota, a la red.
Aumentó el ritmo, aumentó la intensidad y también las ocasiones. Núñez desaprovechó la más clara. Szoboszlai se plantó ante Martínez y cuando parecía armar la pierna para disparar, cedió el esférico a Núñez. Bajo presión, pero con la meta vacía, el uruguayo encaló la pelota. Debió marcar. Se rompió el partido. Se volvió loco. Dos minutos más tarde, Malen arrancó sin miramiento por la derecha, pero Alisson salió de su meta para bloquearlo. Cuatro más tarde, Martínez abandonó su área con prontitud cuando Núñez arrebató el esférico a Mings y se dirigía raudo hacia su portería. El uruguayo se topó con el argentino. Alguien le había dado al botón de avance rápido, las carreras hacia ambos fondos fueron vertiginosas. En una de ellas, Ramsey creyó haber aprovechado el espacio a la espalda de la defensa del Liverpool para marcar, pero el VAR anuló su gol, ya que arrancó en fuera de juego. El Villa puso bajo presión al líder. Lo encerró durante los cinco minutos del añadido, con buenas oportunidades para Rogers, Cash y Malen, cuyo disparo dio en el poste… y se marchó fuera. Se dieron la mano Emery y Slot tras el pitido final, cuando se certificó el reparto de puntos.
