Operación encubierta desmanteló red de tráfico de armas vinculada al Tren de Aragua en Nueva York
Agentes encubiertos lograron infiltrar un esquema de tráfico de armamento, exponiendo los métodos utilizados por una red delictiva con presencia en múltiples países
InfobaeUn operativo encubierto de más de ocho meses culminó con la detención de seis personas y la incautación de 34 armas de fuego, incluidas dos armas fantasma, en Nueva York. Según informó Associated Press (AP), los detenidos forman parte de una red de tráfico de armas operada por miembros y asociados de la banda criminal venezolana Tren de Aragua, conocida por su historial de violencia y actividades ilícitas en el hemisferio occidental. La investigación, liderada por la fiscal del distrito de Queens, Melinda Katz, y el Departamento de Policía de Nueva York (NYPD), reveló que la organización buscaba expandir su alcance tanto a nivel nacional como internacional.
La investigación comenzó tras una serie de decomisos de armas en el distrito de Queens, donde agentes encubiertos detectaron un patrón en la venta de armas ilegales vinculadas a redes delictivas de América Latina. A través de vigilancia y comunicaciones interceptadas, las autoridades lograron identificar a los responsables y documentar cómo operaban dentro de la ciudad. Según AP, el caso es parte de un esfuerzo más amplio para desmantelar el tráfico de armas que alimenta la violencia en comunidades urbanas y que, en muchas ocasiones, tiene nexos con organizaciones extranjeras.
El Tren de Aragua: una amenaza transnacional
El Tren de Aragua, originado hace más de una década en Venezuela, ha sido vinculado a una amplia gama de delitos, incluyendo secuestros, extorsión, tráfico de drogas y armas, y explotación de migrantes. Según Associated Press, la banda ha aprovechado la crisis migratoria venezolana para expandir su influencia en varios países de América Latina y, más recientemente, en Estados Unidos. En Nueva York, las autoridades han identificado al menos 67 miembros de esta organización criminal, quienes han estado involucrados en robos organizados, hurtos de teléfonos móviles utilizando scooters motorizados y otros delitos.
El caso del Tren de Aragua ganó notoriedad en Estados Unidos tras la difusión de un video de seguridad que mostraba a un grupo de hombres armados irrumpiendo en un apartamento en Aurora, Colorado. Según AP, algunos de los involucrados en ese incidente también están relacionados con la red desmantelada en Nueva York. Este video generó controversia política, ya que el presidente Donald Trump lo utilizó durante su campaña para criticar la presencia de migrantes venezolanos en el país.
Armas fantasma y drogas sintéticas: el arsenal de la banda
Entre las armas incautadas durante la operación se encuentran dos armas fantasma, que son armas de fuego sin número de serie y, por lo tanto, difíciles de rastrear. Una de ellas era un rifle estilo AR, mientras que la otra había sido modificada para disparar de manera automática. Según detalló la fiscal Katz, estas armas representan un grave peligro para la seguridad pública. Además, los agentes encubiertos adquirieron 48 gramos de una droga conocida como “tusi” o “cocaína rosa”, una mezcla de cocaína, MDMA y ketamina, que también formaba parte de las actividades ilícitas de la red.
El esquema de tráfico de armas operaba a través de la aplicación de mensajería WhatsApp, donde los miembros de la banda coordinaban las ventas y entregas. Según el informe de AP, algunos de los acusados obtenían las armas de otros estados, incluyendo armas reportadas como robadas, mientras que otros utilizaban su propio inventario. Las transacciones se realizaban en lugares públicos, como estacionamientos, y en algunos casos, los sospechosos intentaron enviar armas a Colombia para aumentar sus ganancias, aunque estos intentos fueron frustrados por las autoridades.
Impacto de la operación y próximos pasos
La fiscal Katz destacó la importancia de este operativo para desmantelar los intentos del Tren de Aragua de establecerse en Nueva York. “Como resultado de nuestra investigación, 34 armas peligrosas están fuera de las calles, y estamos desmantelando esta banda mientras intenta establecerse localmente”, afirmó. Sin embargo, el caso aún está en desarrollo, y las autoridades continúan investigando posibles vínculos adicionales y delitos relacionados.
Por su parte, el jefe de detectives del NYPD, Joseph Kenny, señaló que todos los acusados ingresaron ilegalmente a Estados Unidos alrededor de 2023. Kenny también mencionó que la policía ha estado monitoreando las actividades del Tren de Aragua en la ciudad, incluyendo su participación en robos organizados y otros delitos.
El mismo día de las detenciones en Nueva York, la recién confirmada secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, anunció la captura de varios inmigrantes buscados por cargos criminales, entre ellos Anderson Zambrano Pacheco, de 26 años, quien presuntamente formaba parte del grupo armado vinculado al incidente en Aurora, Colorado. Según AP, estas acciones reflejan un esfuerzo coordinado entre las autoridades locales y federales para combatir el crimen organizado transnacional.
Un desafío persistente para las autoridades
El caso del Tren de Aragua pone de manifiesto los desafíos que enfrentan las autoridades para combatir el crimen organizado transnacional, especialmente cuando estos grupos aprovechan las crisis migratorias para expandir su alcance. La operación en Nueva York no solo logró desarticular una red de tráfico de armas, sino que también envió un mensaje claro sobre la determinación de las autoridades para frenar las actividades de esta peligrosa organización.
A pesar de este golpe contra la banda, las autoridades han advertido que el Tren de Aragua sigue activo en varios estados y países. Investigaciones previas han revelado su presencia en Texas, Florida y California, así como en Colombia, Chile y Perú. Expertos en seguridad han señalado que la estructura descentralizada del grupo y su capacidad de adaptación representan un reto constante para las fuerzas del orden.
Los próximos pasos en la investigación incluyen el rastreo de posibles células criminales aún operando en la región y la identificación de más integrantes de la banda. La fiscal Katz y el NYPD han reafirmado su compromiso de continuar con las operaciones para erradicar la presencia del Tren de Aragua en Nueva York y evitar que esta organización se consolide en el país.