Las tres claves para entender qué pasa en Estudiantes con Foster Gillett y el pase de Medina
El alerta enviada por Boca a raíz de irregularidades en el pago de la cláusula de rescisión del mediocampista encendió las alarmas. El trasfondo político, la falta de acuerdo en el Pincha para el arribo de capitales privados y una operación que quedó frenada por incumplir el reglamento de la FIFA.
La polémica llegada del empresario Foster Gillett a Estudiantes y el escándalo que se generó en Boca por el pase de Cristian Medina se robaron todas las miradas en medio de un movido mercado de pases en el fútbol argentino. La interna dirigencial en el Pincha por la falta de acuerdo en torno al arribo de capitales privados, el aviso del Xeneize por irregularidades en el pago por el mediocampista y un trasfondo político que amenaza con tener varios capítulos más.
Si bien es cierto que hubo una reunión de comisión directiva con apoyo unánime a la iniciativa planteada por Juan Sebastián Verón, se trató solo de la fase 1: dar a conocer los detalles y negociar de qué manera se podría implementar, teniendo en cuenta cómo esto podría afectar al estatuto del club,
Para que el acuerdo con el grupo Foster sea posible debe haber un acuerdo en la dirigencia - hay muchos que dudan y se manifestarían en contra- que permita convocar a una asamblea extraordinaria.
Los socios serán entonces los que voten para aceptar o rechazar el plan
que la Brujita fogonea. La aprobación se logra con los dos tercios de
los presentes.
2. En medio toda esta compleja situación
institucional, se supo que Cristian Medina ejecutaría la cláusula de
rescisión con Boca y pasaría a Estudiantes. Esto no cayó para nada bien en el Consejo de Fútbol,
que si bien veía con buenos ojos el ingreso de los 15 millones de
dólares y el cierre de una etapa conflictiva con el mediocampista,
también le generó un sabor amargo saber que reforzaría a un rival directo y sin poder hacer nada al respecto.
El dinero que llegó a las arca xeneizes eran provenientes de una cuenta de Foster Gillett, algo que está prohibido en el reglamento de la FIFA. El artículo 18 en la sección de transferencias indica que ningún tercero puede abordar la compra de la ficha de un jugador bajo su nombre y apoderarse de sus derechos, sino que obligatoriamente debe hacerlo el propio futbolista o en su defecto el equipo que lo contrata.
Ante la posibilidad de recaer en múltiples sanciones (económicas y deportivas), el departamento de legales de Boca lo notificó a la AFA.
Ahora solo resta que la investigación siga su curso y se definan los
pasos a seguir para darle un marco adecuado a la ejecución de la
cláusula, que es lo que todas las partes creen que sucederá.
3. Lo que nadie puede saber es cuáles serán las consecuencias de este escándalo,
con un claro trasfondo político que va más allá de dos clubes con
visiones antagónicas para sus destinos institucionales. Si la operación
finalmente se concreta, seguramente haya algunos resquemores mucho
menores que si el pase se cae (y con ello el costo de una intervención
frustrada por el grupo Foster en su primer intento).
A Boca tampoco le conviene romper relaciones con Estudiantes
y no solo por le hecho de ser una salida auspiciosa (desde lo
económico) al conflicto con Medina. La situación podría complicar
futuras negociaciones, como por ejemplo si se dese avanzar por Santiago Ascacibar.
El mediocampista central fue contactado por Fernando Gago y es una de
sus prioridades, aunque por el momento no hubo ofertas formales.
