Deplorable estado del Amalfitani en la derrota de Vélez ante Platense
Los trabajos en el césped no terminaron a tiempo para que el campo de juego llegara en buenas condiciones al encuentro con el Calamar. Arena y pozos, a la orden del día, que complicaron el andar del partido.
Esta vez, los eventos que sucedieron después de la recordada final contra Huracán, fueron el Párense de Manos (19/12) y los conciertos de Airbag (20, 21 y 22/12). Desde entonces, el Fortín inició tareas de resembrado en su césped híbrido, que ya comenzó a generar impaciencia desde hace un par de semanas, al verse el campo colmado de arena en la mayoría de los sectores.
Finalmente, los trabajos no finalizaron a tiempo y este martes el escenario se vio muy deteriorado para la negativa presentación del conjunto de Sebastián Domínguez en el Torneo Apertura ante su gente, en medio de nerviosismo por la salida de las figuras del campeón, el 0-3 del debut con Tigre, los abonos a la platea Bianchi Baja, lesiones, joyas juveniles no tenidas en cuenta y el portazo de Mateo Pellegrino.
El Amalfitani, del césped a las nuevas luces led
El recinto de Liniers históricamente impecable en su césped de la mano del legendario canchero Lelo García fue modernizado durante el tramo final de la anterior administración del club encabezada por Sergio Rapisarda, mutando a un esquema híbrido -mixto- entre natural y sintético, que prometía mayores prestaciones. Por ahora, las luces del pasado resultan imbatibles en comparación al presente.
Mientras tanto, durante el parate fueron reemplazados los clásicos focos de las torres de iluminación por un sistema led, acorde a las exigencias de Conmebol para la disputa de la Copa Libertadores, que será estrenado este martes frente al Calamar.