Dembélé, cambio radical

En una temporada en la que protagonizó tiranteces con Luis Enrique, el extremo ha revertido su situación en el PSG. Suma 4 goles en los últimos 3 partidos.

Andrés Onrubia
As
Tras varios meses de tensión, siendo incluso descartado, Ousmane Dembélé ha recuperado la confianza de Luis Enrique y ha respondido con creces el desafío del técnico asturiano. El extremo le dio al Paris Saint-Germain el primer título de la temporada, la Supercopa de Francia contra el Mónaco, después de marcar, en el último minuto, un gol crucial que evitó que el partido se decidiera desde la tanda de penaltis. Un tanto que refrenda su recuperación y que ratifica su liderazgo desde diciembre en el PSG.

En junio de 2024, después de confirmarse la salida de Kylian Mbappé, Dembélé era uno de los jugadores que debía dar un paso al frente para subsanar, en la medida de lo posible, la ausencia del delantero. Sin embargo, su indisciplina y su continuo desatino de cara a gol le privaron de dar un paso al frente. A ello hay que añadirle que su relación con Luis Enrique se deterioró por completo a comienzos de octubre, ya que el técnico asturiano le desconvocó de un partido de la Champions contra el Arsenal después de que el exjugador del Barcelona le replicara en el vestuario un apunte táctico.

“Dembélé ha faltado a sus obligaciones como jugador con el resto de la plantilla. Esto aplica a cualquier jugador”, dijo por aquel entonces Luis Enrique, para justificar la decisión de dejar en tierra a Dembélé. El internacional francés se disculpó en una reunión con el gijonés y volvió a ser importante para el PSG, pese a que su rendimiento en la Champions League suscitó muchas dudas, a tal punto de ser expulsado contra el Bayern, en un partido trascendental para el devenir del equipo en la competición, el 26 de noviembre.

Esa roja fue el detonante de otro episodio tumultuoso entre Luis Enrique y Dembélé. Al técnico asturiano no le gustó aquella expulsión y como respuesta le dejó en el banquillo en los dos partidos siguientes, contra el Nantes y el Auxerre en la liga francesa. Fue entonces cuando la prensa francesa comenzó a informar de que la tensión entre ambas partes se había acrecentado considerablemente, no solo por la sanción, sino también porque Lucho consideraba que el delantero no tiró del carro a comienzos del curso tras la salida de Mbappé y sus actuaciones, sobre todo en Europa, seguían condicionando al Paris Saint-Germain.

Dembélé cambió el chip en diciembre. Aunque no pudo jugar, por sanción, el partido de Champions en Salzburgo, sus últimas prestaciones han decantado la balanza a su favor con el PSG. El 18 de diciembre, en Mónaco, en un encuentro trascendental por el liderato de la Ligue 1, el canterano del Rennes firmó una actuación de enjundia, anotando un doblete, el primero para empatar la contienda y el último, tras una vaselina fabulosa, para hacer todavía más líder al equipo de Luis Enrique, que volvió a deshacerse en elogios hacia el francés, del que llegó a decir, en octubre, que era uno de los jugadores por los que pagaría una entrada en un partido de fútbol.

Los números de Dembélé, aunque en la Champions no se ha estrenado como goleador (una asistencia), son prominentes. En 21 partidos entre todas las competiciones, el extremo ha acumulado 16 participaciones de gol, 9 goles y 7 asistencias. Este domingo fue el héroe del PSG en la Supercopa contra el Mónaco y, tal y como apostilló en rueda de prensa, la obsesión de la plantilla está en el encuentro contra el Manchester City del 22 de enero, en el que el ‘Mosquito’ deberá dar un paso al frente si no quiere que los parisinos caigan a las primeras de cambio en la máxima instancia europea. Lo que es evidente es que Dembélé está de vuelta y tanto Luis Enrique como París lo celebran al unísono.

Entradas populares