Ucrania realizó ataques con drones contra territorio ruso a cientos de kilómetros de la línea del frente
Ocho aviones no tripulados llegaron hasta la ciudad de Kazán, en la región de Tartaristán. De ellos, seis impactaron en edificios residenciales, uno en una instalación industrial y otro fue derribado sobre un río
Un video publicado en el canal local de noticias de Telegram, Astra, verificado por The Associated Press, muestra un dron volando hacia los pisos superiores de un edificio de gran altura.
Las autoridades locales indicaron que no hubo víctimas. Los vuelos se suspendieron en el aeropuerto de Kazán y se cancelaron todas las reuniones multitudinarias del sábado y el domingo.
Los ataques, que Ucrania no reconoció de acuerdo con su política de seguridad, se producen después de que un ataque ucraniano el viernes contra una ciudad en la región fronteriza rusa de Kursk utilizando misiles suministrados por Estados Unidos matara a seis personas, incluido un niño.
Moscú envió 113 drones a Ucrania durante la noche y hasta el sábado, según informaron las autoridades ucranianas. Según la Fuerza Aérea ucraniana, 57 drones fueron derribados durante los ataques. Otros 56 drones se “perdieron”, probablemente porque habían sido bloqueados electrónicamente.
El gobernador de la región ucraniana de Kharkov, Oleh Syniehubov, dijo que ocho personas resultaron heridas el viernes por la noche en ataques con drones en la capital regional.
En la ciudad de Zaporizhia, cuatro personas resultaron heridas cuando un edificio residencial de nueve pisos fue dañado por la caída de escombros de un dron el viernes por la noche, dijo el gobernador regional, Ivan Fedorov.
Las tropas de Moscú también siguen avanzando lentamente en el este de Ucrania. El Ministerio de Defensa ruso dijo este sábado que sus fuerzas habían tomado el control de la aldea de Kostiantynopolske, en la provincia ucraniana de Donetsk, a solo seis millas de la ciudad sitiada de Kurakhove, que están tratando de cercar.
Zelensky pidió a la comunidad internacional no ceder ante la “locura de Rusia”
El presidente ucraniano, Volodimir Zelensky, condenó este viernes el accionar criminal de Rusia y pidió a la comunidad internacional no ceder ante su “locura” y “terrorismo cotidiano”.
“Está claro que el mundo no debe percibir esta locura de Rusia como algo rutinario: el terrorismo cotidiano merece una presión cada vez mayor sobre el terrorista. Rusia debe rendir cuentas, e incluso si está dirigida por una persona completamente inadecuada, la presión sobre ellos debe hacer que el Estado ruso sienta lo que es la realidad y cómo la realidad puede castigar a los criminales internacionales. Son necesarias más sanciones contra Rusia”, indicó el mandatario en un mensaje en el que llamaba a los aliados a intensificar sus esfuerzos por castigar a Vladimir Putin y a brindarle más asistencia para contrarrestar las agresiones enemigas.
En ese sentido, se refirió puntualmente al compromiso asumido por la OTAN de “proporcionar más sistemas de defensa aérea y más armas que puedan proteger (a Ucrania) de los terroristas” y solicitó nuevos acuerdos.
Si bien Zelensky lleva meses pidiendo a Occidente el suministro de este armamento, que ha demostrado ser de lo más efectivo para neutralizar los ataques de Rusia, sus palabras comenzaron a repetirse con mayor frecuencia en el último tiempo, dado que Putin centra cada vez más sus ofensivas en instalaciones eléctricas ucranianas y en edificios y zonas civiles.
Sin ir más lejos, este viernes, cerca de las 07:00 hora local, una persona murió y otras tres resultaron heridas en Kiev por el impacto de misiles hipersónicos del Kremlin. Se trató de uno de los ataques más fuertes de los últimos días, según vecinos, que habría sido en respuesta a la maniobra previa de las tropas de Zelensky con misiles estadounidenses y británicos sobre la región de Rostov.
Según el jefe de la Administración Militar local, Sergiy Popko, en el ataque de esta mañana se utilizaron proyectiles de tipo Kinzhal e Iskander y, debido a su potencia, vehículos y edificios cercanos se vieron afectados.
Entre ellos, las embajadas de Argentina, Albania, Macedonia del Norte, Montenegro, Palestina y Portugal registraron daños y condenaron las acciones del Kremlin por medio de protestas formales. Imágenes difundidas por los Gobiernos mostraron roturas en los vidrios de las ventanas, mamposterías caídas y piezas de mobiliario dañadas, entre otras, aunque afortunadamente no se lamentaron víctimas ni heridos.
“Esto es altamente condenable. Cualquier ataque de Rusia a Ucrania y a la ciudad de Kiev merece nuestra más fuerte condena, pero es absolutamente inaceptable que pueda haber ataques que tengan impacto o afecten a instalaciones diplomáticas”, denunció el ministro de Exteriores luso, Paulo Rangel, quien dijo que se convocó al encargado de Negocios de la embajada rusa en Lisboa para presentar abordar esta cuestión.