El presidente interino de Corea del Sur asumió el cargo y se disculpó por la crisis política que sacudió al país
Tras la destitución de dos presidentes en un mes, Choi Sang Mok prometió restablecer la estabilidad nacional y advirtió sobre la vulnerabilidad del país frente a Corea del Norte
InfobaeEl nuevo presidente en funciones de Corea del Sur, Choi Sang Mok, se dirigió este viernes por primera vez a la población para disculparse por la crisis política que ha sacudido al país, donde tres líderes han ocupado la presidencia en el último mes. Según la agencia oficial Yonhap, Choi se comprometió a centrar su breve mandato en estabilizar la situación nacional, afectada por la destitución de su predecesor, Yoon Suk Yeol, tras una fallida declaración de ley marcial.
En su comunicado, Choi expresó que el gobierno “hará todo que pueda para garantizar la estabilidad nacional”.
El nuevo mandatario enfrenta criticas por su relación con Yoon, específicamente tras involucrase en una reunión del gabinete convocada por Yoon antes de la declaración de la ley marcial. Sin embargo, ha manifestado su interés por superar la actual crisis: “Estoy seguro de que seremos capaces de superar la crisis actual si se combinan la conciencia cívica madura del pueblo y la respuesta responsable del Gobierno”.
Además, Choi reconoció que el país atraviesa una delicada situación de seguridad ante la posibilidad de que Corea del Norte quiera aprovecharse de la crisis actual.
“Existe la posibilidad de que Corea del Norte intente diversas formas de provocaciones, ya que considera que la situación interna atraviesa un momento de vulnerabilidad en materia de seguridad”, alertó.
En este contexto, el ministro de Exteriores, Cho Tae Yul, ha intensificado contactos diplomáticos con representantes de Estados Unidos, Japón y China, buscando garantizar a sus aliados que el gobierno surcoreano trabaja para controlar la situación.
Por su parte, el gobierno de Estados Unidos se ha mostrado atento a los recientes acontecimientos en Corea del Sur, mostrando preocupación por la inestabilidad política que atraviesa uno de sus principales aliados en Asia. El Departamento de Estado reiteró la importancia de preservar la estabilidad en la región, especialmente en un contexto donde las tensiones con Corea del Norte podrían incrementarse.