Union Berlin 1-Bayer Leverkusen 2 / Wirtz lo cambia todo

El crack de Xabi desatascó un partido en la segunda mitad que se le había puesto cuesta arriba a un Leverkusen que vuelve a apuntarse a la pelea por el título.

José Carlos Menzel

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El Bayer Leverkusen de Xabi Alonso ha puesto a prueba en incontables ocasiones que nunca hay que darlo por muerto. Este sábado, en su visita al siempre incómodo Union Berlín, el campeón de la Bundesliga dejó claro una vez más que hay que picar mucha piedra para darle la puntilla. En un partido en el que no se sintió a gusto del todo y que, una vez más, tuvo que desatascar Wirtz cuando ingresó en el terreno de juego en la segunda mitad, el conjunto de las aspirinas terminó imponiéndose por 1-2 para sumar tres puntos de oro que le devuelven a la pelea por el título. El triunfo le sirve al conjunto renano para igualar a puntos con el Frankfurt en segunda posición de la tabla y ponerse a seis del Bayern, a la espera de lo que hiciera el líder ante el Dortmund.

El choque en el estadio An Der Alten Försterei comenzó con un jarro de agua fría para los locales. Un desplazamiento en largo de Tah pilló completamente adelantada a la zaga local, Grimaldo se plantó en el área y cruzó el cuero para que Frimpong fusilara a Rønnow después de tan solo dos minutos disputados. Sin embargo, la ventaja no le sirvió al Leverkusen, con Wirtz en el banquillo por motivos de gestión de carga, para hacerse con el control. Todo lo contrario: los del tolosarra le permitieron a los berlineses pisar área y Hollerbach fue el que supo aprovecharlo. Un jugadón del alemán terminó en un centro raso al corazón del área que Jeong no perdonó para poner las tablas en el luminoso. La cara de Xabi era un poema.

El técnico español no se lo pensó dos veces y puso a calentar a Wirtz. Mientras tanto, los once elegidos por el tolosarra regresaron al césped sin cambios, pero el guión del choque siguió siendo el mismo. Fue un quiero y no puedo por parte de un cuadro renano que también sufría de lo lindo cada vez que el Union cruzaba la divisoria. Y Xabi se hartó. Introdujo a Wirtz y Palacios por Aleix García y Andrich para la última media hora de partido, tiempo más que suficiente para que el crack pusiera a prueba una vez más que está hecho de otra pasta. Llevaba el internacional alemán algo más de diez minutos sobre el verde cuando se sacó de la chistera un centro milimétrico desde la frontal que Schick, en modo killer, finalizó con el pecho para dar un triunfo vital a los suyos.

El Leipzig, en picado

Por otra parte, el Leipzig, que llegó a ser líder de la Bundesliga en las primeras jornadas, agrandó la crisis en la que anda metido desde hace semanas con una contundente derrota sufrida en su estadio, el Red Bull Arena, contra el Wolfsburgo (1-5). El conjunto de Kamil Grabara solo necesitó once minutos del cuarto de hora inicial de la primera parte para sentenciar el choque y sumar su tercer triunfo consecutivo.