INTER 1 - VENECIA 0 / El Inter se acerca al Nápoles con susto

Los nerazzurri tumbaron 1-0 al Venecia en San Siro y marchan con un punto menos respecto a los de Conte antes del enfrentamiento directo. Anulado en el último segundo un gol a los visitantes.

Mirko Calemme
As
El Inter vuelve a acelerar en la lucha por el scudetto. Tras la derrota del Nápoles con el Atalanta, los nerazzurri tumbaron 1-0 al Venecia en San Siro (donde apareció una pancarta de apoyo para la Comunidad Valenciana: “Compartimos el dolor del pueblo valenciano”) y ponen el liderato a tiro. Los de Conte ahora solo tienen un punto de ventaja y, dentro de una semana, tendrán que visitar justo a los milaneses.

Los de Inzaghi, eso sí, tuvieron que sudar para llevarse los tres puntos ante el equipo de Di Francesco, valiente y hambriento para salir de los puestos de descenso. El Inter tuvo ocasiones para adelantarse antes del descanso pero, entre falta de puntería (Thuram desperdició un mano a mano chutando fuera) y paradas de Stankovic, dejó con vida a los vénetos, que llegaron al descanso haciendo temblar al Meazza. Idzes llegó al fondo desde la banda izquierda y su centro, peinado por Pohjanpalo, llegó a Oristanio, que en el área chica golpeó el balón con el gemelo y Sommer necesitó un gran reflejo para evitar el 0-1.

El partido enloqueció en la segunda parte, que se abrió con un bonito gol de Mkhitaryan anulado por un fuera de juego de Dimarco, autor de la asistencia, con la ayuda del VAR. El Venecia respondió con dos disparos de Pohjanpalo, que se topó una vez más con Sommer, y poco después el Inter volvió al ataque. Después de un cabezazo de Dumfries neutralizado por Stankovic, Lautaro puso fin a una sequía de 249 días sin marcar goles ligueros en casa, cabeceando a la red un centro perfecto, para variar, de Dimarco.

El 1-0 llegó en el 65′, y en la última media hora los milaneses continuaron acumulando ocasiones sin aprovecharlas, algo que estuvo a un paso de pasar una factura carísima. En el 98′, el Venecia puso las tablas gracias a un cabezazo de Sverko que, sin embargo, tras un largo control del VAR, fue anulado por un toque con la mano del defensa. Después del susto, San Siro pudo celebrar: la batalla por el scudetto está más abierta que nunca.

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