Harry Redknapp: Por qué Rubén Amorim debería construir su nuevo Manchester United en torno a Harry Maguire
Redknapp ha estado en la posición de Amorim y explica exactamente lo que debe hacer.
CUANDO la leyenda Sir Alex Ferguson ganó el triplete en el Manchester United lo llamaron "El sueño imposible".
Pero ahora, 25 años después, Rubén Amorim entrará en Old Trafford y muchos dirán que se ha convertido en un trabajo imposible.
Bueno, tengo noticias para todos ellos: Sir Alex rió el último en 1999 y estoy convencido de que el nuevo entrenador del United hará lo mismo.
No voy a ganar todo lo que se me presente, antes de que pienses que he perdido el control. No estoy sugiriendo tres trofeos y un desfile en autobús descapotable por Manchester en mayo.
Pero veo esto como la oportunidad perfecta para que Amorim se convierta en un héroe.
En realidad, es el trabajo soñado y el momento perfecto para enfrentarse a uno de los cuatro o cinco clubes más grandes del mundo.
Verás, si estás en tu peor momento, como el United ahora, solo hay un camino a seguir. A mí me pasó lo mismo cuando me fui a los Spurs en 2008.
Me hice cargo de un equipo que estaba en el último lugar, sin ganar después de ocho partidos y con la barbilla por los suelos. Pero miré a mi alrededor ese primer día y supe que no estaríamos allí por mucho tiempo.
No con jugadores como Luka Modric, un joven Gareth Bale, Jermaine Jenas, Aaron Lennon... Hay grandes talentos por todas partes.
Alejandro Garnacho , un jugador que me encanta, Kobbie Mainoo y Marcus Rashford jugarían en la mayoría de los equipos de la Premier League.
Obviamente los resultados deben mejorar y el entrenador querrá traer una o dos caras nuevas y hacer algún que otro ajuste.
Pero no estamos hablando de una revisión completa.
Éste no es el United que heredó David Moyes cuando reemplazó a Sir Alex en 2013.
Uno que puede haber sido campeón pero, con el debido respeto, ciertamente no estuvo ni cerca de ser el mejor.
Fergie los ayudó a superar la meta, pero muchos jugadores estaban llegando al final y era necesaria una reconstrucción total.
Harry no siempre lo tuvo fácil con Erik ten Hag (y eso es decirlo suavemente) y se gastó mucho dinero en nuevos defensores centrales.
No se parecía en nada al equipo actual, que solo necesita algunos ajustes. Así que ignoren las tonterías sobre que esta temporada ya está descartada.
Con tantos partidos por jugar, si el United sigue en racha (y no hay motivos para ello), podría conseguir el cuarto puesto.
El Chelsea es probablemente el favorito, pero nadie lo está agarrando por los cuernos.
El Tottenham entra y sale y el Aston Villa también tiene que lidiar con la Liga de Campeones.
El trabajo inmediato de Amorim es devolverles la confianza, hacerlos sentir bien nuevamente, como tuve que hacerlo en los Spurs .
Recuerdo mirar a Jonathan Woodgate, Ledley King, Vedran Corluka y el resto y pensar: "Si no puedo lograr que estos jugadores jueguen mejor, algo realmente anda mal".
No necesitaban que les dijera que no había sido suficientemente bueno, ¡aunque lo hice!
También les dije a todos que había igualdad de condiciones ya que todos partían del mismo punto.
No me molestaba quién había caído en desgracia antes. Era un nuevo comienzo y elegiría un bando en función de quién me había impresionado en los entrenamientos.
Ése fue el desafío y todos lo asumieron.
Es un trabajo duro, sin duda, tan duro como parece. Pero, ¿es imposible? Ni lo sueñes.
Quería encontrar jugadores en los que pudiera confiar, tal como Amorim tiene que hacerlo en el United. Y me sorprendería que Harry Maguire no estuviera en el primer puesto de esa lista.
Harry no siempre lo tuvo fácil con Erik ten Hag (y eso es decirlo suavemente) y se gastó mucho dinero en nuevos defensores centrales.
Pero Maguire mantuvo la cabeza baja durante todo el partido, no causó problemas, esperó su oportunidad y siempre dio el 100 por ciento cuando llegó.
Puede que haya nombres más glamorosos en el United, pero nadie da más, nadie quiere ganar más o nadie se preocupa tanto.
Maguire es el tipo de jugador que todo nuevo entrenador necesita y estoy seguro de que Amorim no tardará en darse cuenta de ello.
Pronto descubrirá que la Premier League es un mundo muy distinto al que deja atrás en Portugal y que le queda mucho trabajo duro por delante.
Es un trabajo duro, sin duda, tan duro como parece. Pero, ¿es imposible? Ni lo sueñes.
