En Estudiantes esperarán la decisión de Enzo Pérez

Sin presiones de la dirigencia y con el amor incondicional de la gente, deberá definir qué hace cuando termine su contrato a fin de año.

Ignacio Tara
TyC
El tercer ciclo de Enzo Pérez en Estudiantes viene, por ahora, de mayor a menor, y mucho de todo esto tiene que ver con el equipo en curso de Eduardo Domínguez. Porque el Pincha supo ser claro protagonista en el primer tercio del año, volviendo a ser campeón con un Enzo extraordinario, y luego la renovación del plantel por ventas millonarias y las continuas lesiones de varios jugadores apagaron un poco el brillo de todo el equipo.

Si bien aún queda saber con quién jugará Estudiantes el trofeo de de Campeones a fin de año, lo cierto es que a Enzo Pérez no hubo ni hay que explicarle nada en Estudiantes. Su llegada fue con el silencio de quien llegaba herido por el destrato de Demichelis y, del otro lado del mostrador, la clara alegría por volver a ver en la ciudad de La Plata a un campeón de América e hijo pródigo de Estudiantes.

A Enzo en Estudiantes no se le piden explicaciones. Él mismo ya sabe moverse con los límites de la escuela pincha. Incluso a su llegada, a principios de año, ni quiera hubo una conferencia de prensa para presentarlo. Tampoco dio notas individuales y solamente fue con Eduardo Domínguez luego del título en Santiago del Estero a responder algunas preguntas.

Quizás Enzo haya pagado cara la lesión muscular con la que volvió a la pretemporada de invierno. Su extrema preparación generó que en pleno receso, trabajando con el plantel de Maipú, se rompiera una fibra, algo que le impidió una buena preparación para la segunda parte del año. En el medio, Estudiantes vendió a varias figuras y la regeneración del ciclo deportivo todavía se está trabajando. Por eso el equipo de Domínguez no brilla, pero siempre con Enzo presente, jugando un alto porcentaje de partidos y al nivel que acostumbra.

Es tan grande del respeto a Enzo y el goce de su tercer ciclo que al hincha del Pincha ni siquiera le importa o enoja que en cada hotel al que viaja el plantel haya hinchas de River en la puerta esperando y cantando por él.

En todo caso, a fin de año, cuando culmine su contrato, será el propio Enzo quien defina su futuro con la tranquilidad del caso. No tendrá presiones de la dirigencia ni murmullos de los hinchas. Su relación es directa con Juan Sebastián Verón y la tecretaría Técnica, que sólo le pedirá su respuesta para armar el equipo de la Copa Libertadores 2025. Simple, sencillo. Sin vueltas del lado de Estudiantes.

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