El régimen de Irán amenazó con una propagación de la guerra más allá de Medio Oriente
El ministro de Relaciones Exteriores, Abás Araqchi, sostuvo que “el mundo debe saber que si la guerra se extiende, sus efectos nocivos no se limitarán” a la región en cuestión
“La inseguridad y la inestabilidad pueden propagarse a otras regiones, incluso muy lejanas”, añadió Araqchi.
Israel, gran enemigo regional de Irán, está en guerra con el grupo terrorista palestino Hamas en la Franja de Gaza y contra Hezbollah en Líbano, dos movimientos aliados del régimen de Teherán, que por su lado pide un alto el fuego en ambos frentes.
La tensión entre ambos países ha crecido al calor de los conflictos de Gaza y Líbano, y el 26 de octubre, aviones de combate israelíes bombardearon instalaciones militares en Irán, en represalia a un ataque balístico iraní contra Israel el 1 de octubre.
Teherán prometió responder, e Israel hizo saber que en ese caso replicará con mayor contundencia.
El jueves, Ali Larijani, uno de los asesores del ayatolá Alí Khamenei, el líder supremo de Irán, estimó que el país debe guardarse de reaccionar “instintivamente” contra Israel tras los ataques del 26 de octubre, a fin de “no caer en la trampa” del gobierno de Benjamin Netanyahu.
El jefe de Estado iraní, Masud Pezeshkian, declaró el domingo pasado que un eventual alto el fuego entre los aliados de Teherán e Israel podría influir en la respuesta de su país a los ataques israelíes.
Israel eliminó a decenas de milicianos y destruyó múltiples objetivos terroristas
En otro orden, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) informaron este sábado que sus tropas eliminaron a “decenas de terroristas” en Jabaliya, en el norte de la Franja de Gaza, y llevaron a cabo medio centenar de ataques en posiciones identificadas como “terroristas” en Líbano.
“La división 162 continúa operando en Jabaliya; durante el último día las fuerzas han eliminado a decenas de terroristas”, declararon las FDI en su cuenta oficial en la red social X, agregando que también “han localizado y destruido un almacén de armas”.
En Rafah, al sur de Gaza, las operaciones militares de las FDI continuaron con la eliminación de terroristas, la localización de armamento y la destrucción de infraestructuras.
En total, el Ejército israelí asegura haber impactado en más de 50 “objetivos terroristas” tanto en Líbano como en diversos puntos de Gaza en las últimas 24 horas. Las cifras de víctimas civiles en Gaza, controlada por los terroristas del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamas), siguen aumentando.
La escalada de operativos por parte de Israel comenzó tras los ataques lanzados por Hamas el 7 de octubre, que resultaron en unos 1.200 muertos y 250 secuestrados en territorio israelí.
Israel atacó un cuartel de Hezbollah en Tiro
El Ejército de Israel lanzó el viernes un ataque aéreo contra un cuartel general de Hezbollah en Tiro, al suroeste del Líbano, que resultó en tres muertos y trece heridos, según el Ministerio de Salud Pública libanés.
Las FDI denunciaron que “la organización terrorista Hezbollah se apodera sistemáticamente de espacios civiles en todo el estado del Líbano y explota la infraestructura civil con fines terroristas”, integrando a sus comandantes en zonas habitadas.
Cerca de una base de la Fuerza Provisional de las Naciones Unidas en el Líbano (UNIFIL), las tropas israelíes también localizaron un centro de entrenamiento de Hezbollah, donde hallaron documentos operativos, mapas de Israel, instrucciones de equipamiento, y armas listas para ser disparadas. Este ataque forma parte de un esfuerzo constante, según Israel, para impedir que Hezbollah recupere sus capacidades militares.
En represalia, Hezbollah lanzó al menos 13 ataques contra posiciones israelíes, usando proyectiles, drones y un misil guiado, dirigidos hacia asentamientos y bases militares en Miskav Am, Margaliot, Al Manara, Doviv y la base de Karmiel.
Además, drones de asalto y misiles de alta precisión atacaron una base aérea y un transporte de tropas en Sari, en el sur del Líbano, asegurando, según Hezbollah, la destrucción del vehículo y la baja de sus ocupantes, aunque esto no fue confirmado por el Ejército de Israel.