El grupo terrorista libanés Hezbollah consideró que logró “una gran victoria” contra Israel tras el acuerdo de alto el fuego
“Ganamos porque impedimos que el enemigo aniquilara o debilitara a la Resistencia”, declaró el jefe del grupo terrorista libanés
Este es el primer discurso de Qassem desde que un acuerdo de alto el fuego pusiera fin esta semana a más de un año de enfrentamientos entre Israel y Hezbollah.
El conflicto dejó en ruinas gran parte del sur, el este y los suburbios de la capital libanesa, y los ataques israelíes eliminaron a gran parte de la cúpula militar de Hezbollah.
“Estamos hoy en un ambiente de victoria divina de este grupo honorable, que fue celebrada por todos los amantes de Dios”, dijo Qasem y remarcó que Hezbollah “no quería la guerra” con Israel.
Entre esos golpes a Hezbollah se encuentran el asesinato de su anterior líder, Hassan Nasrallah, en un ataque aéreo masivo en los suburbios meridionales de Beirut el 27 de septiembre pasado y la muerte de una importante parte de sus comandantes de campo, altos cargos militares y políticos de la formación.
Sin embargo, Qasem alegó que tras estos golpes Hezbollah “recuperó sus fuerzas” y continuó “con su resistencia en el frente”, mientras que al mismo tiempo prosiguió lanzando cohetes, misiles y drones contra varios puntos del norte y el centro de Israel.
“He decidido anunciar como resultado de la batalla (...) de forma clara y oficial que estamos ante una gran victoria que supera la de julio de 2006″, dijo en referencia a la guerra de un mes librada ese año entre Israel y Hezbollah.
En este sentido, afirmó que Israel accedió a pactar un alto el fuego por “la incapacidad de lograr sus objetivos” en el Líbano, como minar las capacidades militares del grupo y garantizar el regreso de unos 60.000 desplazados del norte del Estado judío por los ataques de Hezbollah contra asentamientos y ciudades del territorio israelí.
Cooperación con el Ejército libanés
En su mensaje, Qasem también declaró que Hezbollah se compromete a “cooperar” con el ejército libanés en la aplicación del acuerdo del cese el fuego con Israel, que prevé que las tropas israelíes y las de la milicia islamista se retiren del sur de Líbano.
“Habrá una coordinación de alto nivel entre la Resistencia y el ejército libanés para implementar los términos del acuerdo”, declaró. Y añadió: “Que nadie apueste por problemas o conflictos”.
“Gracias a Dios, la cooperación entre el Ejército libanés y la Resistencia será de alto nivel para implementar los compromisos del acuerdo”, afirmó Qasem y señaló que el pacto estipula la retirada de las tropas de Israel del sur del Líbano.
El clérigo, nombrado líder de Hezbollah tras el asesinato de su predecesor, Hassan Nasrallah el 27 de septiembre en un bombardeo israelí en los suburbios meridionales de Beirut, afirmó que el grupo considera al Ejército libanés como “patriótico” y que la institución asumirá “la protección de la seguridad del Líbano y la frontera con el enemigo israelí”.
Sobre el acuerdo de tregua, Qasem expuso como una victoria que se trate de cumplir lo dispuesto en la resolución 1701 del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas y se brinde al Ejército regular libanés las competencias de “extenderse” por el sur del país. “El acuerdo se hizo bajo el techo de la soberanía libanesa y lo aceptamos con la frente en alto en nuestro derecho a la defensa”, declaró.
Por último, Qasem recordó a todos los líderes de Hezbollah y de otros grupos islamistas, momento en el que ensalzó el apoyo mostrado por Irán y los rebeldes hutíes de Yemen con la causa palestina y los ataques contra Israel. Sobre la causa palestina, aseveró que su apoyo “no cesa” y que el objetivo final sigue siendo “la liberación de Jerusalén”.
Y advirtió que, de ser violada la tregua en el Líbano, Hezbollah sigue preparado para una nueva confrontación con Israel. “Estamos preparados para la guerra en el caso de que el enemigo israelí nos obligue”, dijo.