Rodrygo, no; Rüdiger, quizás
El brasileño avanza a buen ritmo, pero su presencia ante el Valencia está descartada. No así el alemán, con opciones de llegar a tiempo... en caso de haber partido.
El ritmo de recuperación del brasileño es óptimo, en la horquilla más optimista. Se quedó sin Clásico por una rotura muscular en el bíceps femoral sufrida ante el Dortmund. La dolencia apareció después de una carrera en el 83′. Rodrygo trató de salvar un balón, lo consiguió, cedió a Lucas Vázquez y así se cocinó el tanto de Lucas Vázquez, el tercero. Tras ello se echó la mano a la pierna y pidió el cambio. Paró a tiempo. Y Una vez realizada la resonancia pertinente, se estimaron entre dos y tres semanas de baja. Unos 20 días. Entre la remontada (5-2) contra los borussen y la visita de los rossoneri van 14 días. Salen las cuentas.
También salen con Rüdiger. El Clásico le dejó tocado. El Clásico, y todo lo demás. Pues el de Neükoln apenas ha descanso 83 minutos esta temporada. Aguantó la cojera temporal ante el Barça y terminó el partido, pero al día siguiente apareció sobrecargado. Se temió una lesión, aunque, por suerte, no fue más allá. Cansancio por los sobreesfuerzos en su pierna izquierda. Hoy, como Rodrygo, ha trabajado en su recuperación con ejercicios específicos. Eso sí, en su caso, tiene papeletas para llegar a tiempo, de haber partido, a Mestalla.
Será, la del alemán, un alta esperada en la enfermería. Sin él, Ancelotti ha estado trabajando esta semana con Tchouameni como central, como acompañante de Militao. Una opción que, aún entrando Rüdiger en la lista, no se descarta. Justamente por esa sobrecarga. Para darle un pequeño respiro a Antonio, que sufrió físicamente en la segunda parte contra el Barcelona. Carletto tenía en mente trazar rotaciones en la zaga, pero la escasez de efectivos y las molestias menores que ha sufrido Militao no le han permitido hacerlo. Valencia puede ser un buen lugar. Más teniendo al Milan a la vuelta de la esquina.