Putin defendió la alianza militar con Kim-Jong Un: “Estamos en contacto con nuestros amigos norcoreanos”
El mandatario se refirió a las denuncias de los últimos días de Occidente, que apuntaron al entrenamiento de miles de soldados de Pyongyang en Moscú, y señaló que las naciones se toman en serio los acuerdos suscritos
“Nunca hemos dudado de que los dirigentes norcoreanos se toman en serio nuestros acuerdos. Las imágenes son cosa seria... si las hay quiere decir que algo hay”, comenzó diciendo sobre las evidencias que se difundieron en los últimos días aunque sumó, a continuación, que “qué y cómo lo hacemos (aplicar el pacto) en virtud de este artículo es asunto nuestro”.
Asimismo, aprovechó la oportunidad para mencionar que no es su país el que ha escalado los combates en el último tiempo sino que fue Occidente quien lo hizo, con su postura de “armar activamente” a las tropas de Kiev. “¿A qué se debe la participación directa de militares de los ejércitos de los países de la OTAN en este conflicto?”, cuestionó.
A la par que Putin brindaba estas declaraciones, el Parlamento ruso ratificaba este pacto de asistencia mutua, firmado en junio por Putin y Kim, durante su visita a Pyongyang. El documento -una señal del estrecho vínculo entre los regímenes, el más fuerte desde el fin de la Guerra Fría-, establece la ayuda “por todos los medios” en caso de que cualquiera de las partes sea atacada por actores extranjeros, y se reflotó en medio de las denuncias contra Pyongyang por el envío de miles de soldados a Moscú, para sumarse a los combates en Ucrania.
“En caso de que una de las partes sea objeto de una agresión militar por parte de cualquier otro Estado o varios Estados y se encuentre de esa forma en estado de guerra, la otra parte le ofrecerá inmediatamente ayuda militar o de otro tipo por todos los medios a su alcance, en virtud del artículo 51 de la Carta de la ONU y en consonancia con la legislación rusa y norcoreana”, establece precisamente.
Esta semana, tras la evaluación de informes de inteligencia de Corea del Sur y Ucrania, Estados Unidos confirmó que, efectivamente, unos 3.000 oficiales norcoreanos habían llegado recientemente a suelo ruso y estaban recibiendo entrenamiento en el uso de drones y artillería varia, con el objetivo de sumarse a la brevedad a las filas en el frente de batalla. Esta acción fue considerada por el secretario de Defensa estadounidense, Lloyd Austin, como “un problema muy, muy grave” y supondría una escalada en el conflicto, además de que tendría un impacto no sólo en Ucrania sino que, también, en Europa y el Indo-Pacífico.
Inclusive, la OTAN advirtió que “marcaría una escalada significativa en el apoyo de Corea del Norte a la guerra ilegal de Rusia” aunque también confirmaría “las importantes pérdidas” del Kremlin en el último tiempo.
La incorporación de los oficiales norcoreanos llega en un momento en el que, tras más de dos años de guerra, el Ejército del Kremlin está desgastado y necesita con urgencia asistencia extranjera. En lo que va del conflicto, las tropas rusas han sufrido más de 60.000 bajas, la sociedad está cada vez más reacia a responder a los llamados de movilización y Putin tuvo que recurrir, inclusive, a convictos para llenar sus filas.
Es por ello que Rusia habría ofrecido a su aliado conocimiento clave en el rubro tecnológico, nuclear y balístico, que permitirán seguir fortaleciendo los programas de Kim, a cambio de su ayuda.
En un intento por disuadir a las partes de avanzar con esta decisión, el portavoz Consejo de Seguridad estadounidense, John Kirby, advirtió la víspera que “si estos soldados deciden unirse a los combates contra Ucrania, se convertirán en objetivos militares legítimos”, quedando así a merced de las reglas de la guerra.