Lula da Silva se recupera tras accidente doméstico en el que se golpeó la cabeza
El equipo médico del mandatario brasileño lo declaró “apto” para trabajar pero canceló su viaje a la cumbre de los BRICS en Rusia
Lula se golpeó la parte posterior de la cabeza y fue ingresado en el Hospital Sirio-Libanés de la capital brasileña, donde recibió varios puntos de sutura.
“El examen de imagen está estable en comparación al anterior”, según el boletín médico del martes, que agregó que “está apto para realizar su rutina de trabajo”.
Un nuevo examen de control está previsto en 72 horas.
Lula dijo el lunes que el accidente fue “grave”, pero aclaró que “no afectó ninguna parte delicada”.
Por recomendación médica, canceló el viaje que tenía previsto a Rusia el domingo para la cumbre de los BRICS, pero la presidencia informó que participaría por videoconferencia.
El martes, antes de acudir al hospital para realizarse nuevos exámenes, Lula conversó con Putin por cerca de 20 minutos.
“El presidente Putin quiso conocer el estado de salud del presidente (Lula) y lamentó que no pudiera asistir a la cumbre de los BRICS, al igual que el presidente Lula”, dijo la presidencia en un comunicado.
La cita iba a ser el primer encuentro de Lula y Putin en el tercer mandato del brasileño. En septiembre, ambos hablaron por teléfono sobre una propuesta conjunta de Brasil y China para poner fin a la guerra de Ucrania.
Cumbre Brics
En la cumbre de los BRICS, la delegación brasileña está encabezada por el ministro de Exteriores, Mauro Vieira, y el propio Lula tiene previsto participar por videoconferencia.
Uno de los puntos centrales de la cumbre será la discusión de los mecanismos para crear una nueva categoría de países asociados a los BRICS, sin que esto suponga ampliar la lista de nueve miembros del foro.
El grupo fue fundado por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica y el pasado 1 de enero ingresaron Egipto, Irán, Emiratos Árabes Unidos y Etiopía.
Deberían de haber consumado su entrada también este año Arabia Saudí y Argentina, pero la primera nunca confirmó su decisión de ingresar y la segunda retiró su solicitud en el último momento por decisión del presidente, Javier Milei.
Cerca de 30 países han manifestado públicamente su interés de ingresar en el foro, entre ellos Cuba, Venezuela, Turquía, Azerbaiyán y Malasia.
El Gobierno brasileño defiende que los BRICS mantengan un equilibrio en la representación de las diferentes regiones del mundo y que los nuevos miembros o países asociados tengan buenas relaciones con todos los integrantes del foro.
El asesor para asuntos internacionales del Gobierno brasileño, el ex canciller Celso Amorim, se declaró en contra de la entrada de Venezuela en los BRICS y ha llamado a “ir despacio” con la ampliación, para que el grupo no se convierta en un “nuevo G-77″.