Hezbollah teme nombrar a un nuevo líder tras la muerte de Hassan Nasrallah por las infiltraciones de Israel
La situación ha generado desconfianza entre Irán y el grupo terrorista, así como dentro de sus propias filas, complicando el funcionamiento de la alianza antiisraelí
Las investigaciones se han centrado en aquellos miembros que viajan al extranjero o que tienen familiares viviendo fuera de Irán. Teherán comenzó a sospechar de ciertos miembros de la Guardia Revolucionaria que habían estado viajando al Líbano, indicó el funcionario. Las alarmas se activaron cuando uno de estos individuos empezó a indagar sobre el paradero de Nasrallah y el tiempo que permanecería en ciertas ubicaciones.
El sospechoso ha sido arrestado junto con varias personas más, aseguró el primer funcionario, sin revelar la identidad de los detenidos ni de sus familiares, quienes se habrían trasladado fuera de Irán.
Según otro funcionario iraní, el asesinato de Nasrallah ha sembrado la desconfianza tanto entre Teherán y Hezbollah como dentro de la propia organización libanesa. “La confianza que mantenía todo unido ha desaparecido”, afirmó.
Un tercer alto cargo, cercano a la cúpula iraní, aseguró que el Líder Supremo, el ayatollah Ali Khamenei, “ya no confía en nadie”.
Nasrallah fue asesinado tras dos semanas de ataques precisos por parte de Israel, que destruyeron instalaciones de armamento, eliminaron a la mitad del consejo de liderazgo de Hezbollah y diezmaron su cúpula militar.
El temor de Irán por la seguridad de Khamenei y la pérdida de confianza, tanto en Hezbollah como en las instituciones iraníes, se ha reflejado en conversaciones con 10 fuentes que describieron una situación que podría complicar el funcionamiento efectivo de la Alianza de la Resistencia, compuesta por grupos armados irregulares antiisraelíes.
La situación de incertidumbre y desorganización también dificulta que Hezbollah elija a un nuevo líder, pues persiste el miedo a que la infiltración israelí ponga en peligro al sucesor de Nasrallah, señalaron cuatro fuentes libanesas.
Hezbollah, fundado con el respaldo de Irán en la década de 1980, ha sido durante mucho tiempo el miembro más formidable de la alianza.
El caos también está dificultando que Hezbollah elija un nuevo líder, por temor a que la continua infiltración ponga en riesgo al sucesor, dijeron cuatro fuentes libanesas.
“Básicamente, Irán perdió la mayor inversión que había tenido en las últimas décadas”, dijo Magnus Ranstorp, un experto en Hezbollah de la Universidad de Defensa de Suecia, sobre el profundo daño causado a Hezbollah que, según él, disminuyó la capacidad de Irán para atacar las fronteras de Israel.
“Esto sacudió a Irán hasta sus cimientos. Muestra también cómo Irán está profundamente infiltrado: no sólo mataron a Nasrallah, mataron a Nilforoushan”, afirmó, quien era un asesor militar de confianza de Khamenei.
La pérdida de capacidad militar y de cuadros dirigentes de Hezbollah podría empujar a Irán a realizar el tipo de ataques contra embajadas y personal israelí en el exterior que realizaba con mayor frecuencia antes del surgimiento de sus fuerzas subsidiarias, dijo Ranstorp.